Este documento ofrece consejos a los educadores sobre cómo tratar a sus alumnos. Les aconseja perdonarlos, escucharlos activamente, felicitarlos cuando se portan bien aunque sea solo parcialmente, ilusionarlos y quererlos aunque no cambien. Finalmente, les recuerda que su labor es más importante que el reloj o la nómina y que al final serán juzgados por cómo trataron a cada alumno.