"¡Todos nosotros somos hijos del Altísimo! Todos ... El más pobre, el más repugnante, un niño recién nacido, un viejo achacoso, el ser humano menos inteligente... un idiota, un loco, un pecador... aquél que nos repugne más física o moralmente es un hijo de Dios". (Carlos de Foucauld Comentario Salmo 82 /81).