1. El amor consciente cristiano
Cristina Barajas Mora
1.1 Alfred Richard [c1]Orage fue un intelectual británico, ahora más conocido por
editar la revista The New Age . Mientras trabajaba como maestro de escuela en
Leeds, persiguió varios intereses, incluidos Platón, el Partido Laborista
Independiente y la teosofía. Las ideas de Ouspensky había dejado una impresión
duradera y cuando se mudó a Londres en 1921 Orage comenzó a asistir a sus
conferencias sobre «Fragmentos de una Enseñanza Desconocida». Orage exploró
sus nuevas ideas en varios libros. Vio el Übermensch de Nietzsche como una
metáfora del "estado superior de conciencia" buscado por los místicos e intentó
definir una ruta hacia este estado superior, insistiendo en que debía implicar un
rechazo de la civilización y la moral convencional. Se movió a través de una
celebración de Dioniso para declarar que estaba a favor, no de un socialismo
ordenado, sino de un movimiento anárquico.
En 1906 y 1907, Orage publicó tres libros: Conciencia: animal, humano y
sobrehumano, basado en su experiencia con la teosofía; Friedrich Nietzsche: El
espíritu dionisíaco de la época; y Nietzsche en Esquema y aforismo. La crítica
racional de la teosofía de Orage evocó una refutación editorial de The
Theosophical Review y en 1907 terminó su asociación con la Theosophical
Society. Los dos libros sobre Nietzsche fueron las primeras introducciones
sistemáticas al pensamiento de Nietzschean que se publicó en Gran Bretaña.
1.2 [c2]En su escrito El amor conciente [c3]Orange utiliza el misticismo cristiano
donde encuentra el desarrollo del amor a partir del crecimiento del hombre por
medio de vencer su humanidad y encender su conciencia en el amor divino. En
este amor místico del que se vale Orange, se pretende llegar a la comunicación
con Dios por medio de la visión, del éxtasis y de la revelación. Los elementos del
misticismo son propios de numerosas doctrinas filosófico-religiosas de la
Antigüedad.
2. En el caso de la mística cristiana el acto místico de unión con Dios, conocido como
éxtasis, no depende del individuo, sino solamente de Dios, que por motivos que
sólo él conoce otorga como gracia privada un breve tiempo de comunicación
sensible ultraterrena a algunas almas a las que se acerca, bien directamente o
bien para su posterior transmisión a un grupo específico o al conjunto social.
Puede ir acompañado de las manifestaciones llamadas «estigmas» o «llagas»:
heridas que reproducen algunas de las heridas de Cristo en la cruz, así como de
bilocación (suceso que consiste en que el santo o místico es visto en dos o más
sitios al mismo tiempo) y manifestaciones proféticas.
1.1 Por otra parte Saulo de Tarso[c4], más conocido como San Pablo de Tarso,
fue un ferviente apóstol del cristianismo que en los primeros años de nuestra era
se ocupó especialmente de difundir el mensaje que Jesucristo vino a dejarnos en
la tierra y en ese camino terminó por convertir al Cristianismo, la doctrina religiosa
que nació con Jesús, en religión universal. Pablo habría nacido entre los años 5 y
10, en Tarso justamente, una ciudad que ocupa el territorio que hoy pertenece a
Turquía; asimismo, Saulo, disponía de la ciudadanía romana.
Si bien Pablo había nacido en el seno de una familia de judíos fariseos, en el
marco de la cultura helena y de haber participado en las primeras persecuciones
que se perpetraron contra los cristianos, durante un Viaje a Damasco, poco tiempo
después de la crucifixión de Jesús, se convertiría a la nueva fe que en aquel
tiempo era considerada una secta herética del judaísmo, según supo relatar,
habría sido el mismísimo Jesús quien se le apareció en ese viaje y lo invitó a
difundir la buena nueva y así lo hizo…
Respecto de su formación, Pablo, contaba con una sólida formación académica
que incluía conocimientos sobre teología, filosofía, hechos jurídicos, lingüística y
mercantil, además, hablaba perfectamente los idiomas: griego, latín, arameo y
hebreo, situación que por supuesto le abriría el camino para la difusión de su
mensaje. Para concretar su misión, San Pablo, viajó por diversas partes del
mundo: Grecia, Asia Menor, Siria, Palestina, también, escribió cartas a diferentes
pueblos del mediterráneo, entre otros.
3. Más de la mitad de los Libros del Nuevo Testamento de la Biblia se le atribuyen a
San Pablo. Cabe destacar, que conceptos como los del pecado original, la
creencia que Jesús murió en la cruz por los pecados de los hombres y que su
sufrimiento redime a la humanidad, que Jesucristo era el mismísimo Dios y no tan
solo un predicador, el rechazo de la sexualidad y la subordinación de la mujer,
entre otros, se le deben a San Pablo. En Jerusalén, sus ideas no fueron aceptadas
de ningún modo por los judíos más ortodoxos, en tanto, una vez allí fue detenido,
juzgado, y enviado a Roma, donde probablemente murió ejecutado cuando corría
el año 67. El principal santuario de San Pablo es la Basílica de San Pablo
Extramuros en Roma, Italia.
1.2 [c5]Las cartas de San Pablo a los Corintios [c6]fueron escritas durante la
tercera jornada misionera, así como dos cartas adicionales que no han sido
conservadas. 1 de Corintios fue probablemente escrita en Éfeso, quizás en 55 DC.
Poco después de enviar esta carta, Pablo visitó Corinto brevemente tiempo
durante el cual fue gravemente ofendido por un miembro de la iglesia. Después de
esta visita, escribió una carta que en la actualidad está perdida, algunas veces
llamada "la carta de Angustia". Más tarde, después de recibir un informe de Tito
sobre la manera positiva en que se había recibido su carta de angustia, Pablo
escribió 2 de Corintios, probablemente desde Macedonia y seguramente dentro
del siguiente año más o menos de que escribió Primera de Corintios.
Ahora que hemos visto cómo las epístolas de Pablo a los corintios encajan dentro
del contexto de su tercer viaje misionero, debemos mirar algunos problemas
específicos dentro de la iglesia en Corinto. Muchos de los problemas que
surgieron en Corinto provinieron de un malentendido de escatología, cómo había
traído Cristo los tiempos venideros, los tiempos de salvación y vida. Muchos de los
corintios habían llegado a creer que realmente habían recibido más de las
bendiciones del futuro que nadie más; ellos pensaron que ya habían recibido las
bendiciones últimas de Dios.
4. 1.3 La obra de Orange sobresale [c7]en su exposición de los diferentes tipos de
amor que el encontrado a partir del sentir cristiano de la mística que estudio y del
sentido práctico de la vida cotidiana que busca necesariamente lo que no tiene y
en las que se pueden ver las necesidades humanas de aprecio y sentidos, de
aquí se desprende una serie de valoraciones del producto de los diferentes
amores que expone y de las características de cada uno de esos tipos de amores.
Aunque al que le dedica más tiempo es al amor consiente que es la tesis del texto.
Mientras que la obra de San Pablo sobresale[c8] en el rescate del amor cristiano
que se manifiesta como el fin primero de todo esfuerzo humano que puedo ser
más apreciado que el don de profecía, el uso del lenguaje de los ángeles, inclusive
superior al don de hacer milagros, pues San Pablo asegura que si se tuviera la
suficiente fe para mover montañas esto quedaría opacado y fuera de sentido al
realizar esta acción sin amor, manifestando así, el amor cristiano que deben tratar
de alcanzar los llamados bajo la doctrina de Jesús.
1.4 En el presente trabajo se va a realizar un trabajo de comparación del Texto
de Orange “El amor Consiente” y Primera Carta a Los Corintios de San Pablo.
1.5 Para esto se utilizara la metodología de la Hermenéutica, en la que se
considerara el amor como elemento principal de trabajo, 1.6 teniendo como
apartados el amor consiente, el amor racional y el amor emocional de Orange y el
amor cristiano de San Pablo.
2.1 Entro de estos la descripción de amor que presentan [c9]los autores parece
haber similitud entre el amor consiente de Orange y el amor cristiano de San
Pablo [c10]pues podemos ver el texto de Orange que asegura que:2.2 “Amar exige
que el amante adivine los deseos de la amada, antes de que hayan llegado a la
propia conciencia de ella”[c11]. Mientras que en el texto de San Pablo a los
Corintios el santo asegura que: 2.2 "Aunque repartiera todo lo que poseo e incluso
sacrificara mi cuerpo, pero para recibir alabanzas y sin tener el amor, de nada me
sirve".
5. 2.3 En estos fragmentos se puede apreciar la similitud en el concepto que
manejan ambos autores sobre el amor puesto que [c12]ambos requieren de
sacrificio por parte del que practica el amor, no del que lo recibe. Esto ya que el
amante de Orange no solo debe olvidarse de sí mismo, sino que debe conocer de
tal manera al amado que debe saber antes que este, lo que desea. Mientras que
el amante de San Pablo no solo debe entregar cuanto posee y lo que puede hacer
por sus potencias físicas y emocionales al amantes pues asegura, tales potencias
sin amor de nada sirven, dejando así claro que el bien material y físico de nada
sirve si no se tienen amor.
2.4 por tanto [c13]se puede decir que este amor que solicitan ambos autores aun
que se nombren de manera diferentes están en esencia, hablando de lo mismo, de
un amor que requiere sacrificios y conciencia a la hora de realizarlo.
2.5 El amor que presenta Orange no solo se establece como el que más trabajo
cuesta obtener sino que también se presenta como el único que requiere
sacrificios por parte del amante y que puede llegar a recordar el pensamiento
místico del que Orange recogió durante su etapa de búsqueda de filosofías
existenciales, esto mismo presenta San Pablo que se convierte en creyente y se
postula como uno de los más importantes seguidor de Jesús, esto a partir del
encuentro que sostuvo con el discípulo Pedro que no solo lo acepta en nombre del
espíritu santo, sino que lo cura y jamás reclama algo ante su pasado como
persecutor de los cristianos.
2.6 una prueba [c14]de esto puede ser los muchos cristianos que en los primeros
siglos iban gustosos a la muerte con tal de no negar el amor de Jesús y como dijo
el texto de San Pablo, poniendo el amor por encima del bienestar físico o
económico. 2.7 Así pues [c15]se puede llegar a la conclusión de que si bien el
nombre el amor que refiere ambos autores no es el mismo, el tipo de amor del que
habla si tiene similitudes puede muy bien llegar al mismo principio. La búsqueda
del hombre para encontrarse con el amor de Dios o lo divino.
2.1 Sin embargo[c16], no todo el amor expuesto en Orange es similar al de San
Pablo [c17]
6. Esto puesto que Orange también habla de otros tipos de amor en los que el amor
consiente no está presente: 2.2“Extrañas creaturas surgen de los brazos del amor
emocional; tritones y sirenas; barba-azules y belles dames sans merci.” Dice
Orange mientras que San Pablo asegura que: "El amor es paciente y muestra
comprensión. El amor no tiene celos, no aparenta ni se infla. No actúa con bajeza
ni busca su propio interés, no se deja llevar por la ira y olvida lo malo".
2.3 no puede pues decirse que barba- azules pueden crear un amor paciente y
sin celos, amor planteado por San Pablo, puesto que es bien conocido que este
personaje pasaba de una esposa a la siguiente por medio del asesinato,
mostrando así un perfil contrario al perfilado por San Pablo en su amante que no
solo no busca su interés personal, sino que no tiene ira ni desea nada malo, y ni
que decir de las otra figuras que presenta Orange, que tampoco logran expresar
los sentimientos que en este fragmento expone el santo. 2.4 Así pues, tendremos
que decir que la similitud del texto de Orange con el de San Pablo solo se da en
el apartado que habla del amor consiente que busca un amor divinizado.
2.5 El amor emocional busca satisfacer una necesidad humana que puede
aparecer dentro de la psique del amante o de sus carencias en la vida personal
que ha llevado o llevó durante su infancia mientras que, el amor cristiano habla de
un amor a Dios que se manifiesta en los hermanos y engrandece el alma humana.
Uno somete al amante a sus paciones y necesidades por encima del amante, el
otro busca someterse a sus propias paciones y necesidades en busca del bien al
otro.
2.6 La historia de la princesa y el plebeyo nos habla de esta triste condición
humana que crea héroes de las necesidades emocionales, pues mientras ella
busca un hombre que le asegure que hará todo lo posible por ella, en realidad lo
que está buscando es alguien que no la lastime y que esté dispuesto a soportar
dolor por ella, algo que ella no quiere para sí misma. Mientras que el plebeyo
enamorado, no camina tan lejos que ella, ya que su deseo de compasión por parte
de la que dice amar desde hace años, exige que ella sepa de sus sentimientos
como un amante consiente propuesto por Orange. 2.7 No se puede decir que la
historia de estos amantes es una tragedia, más bien es un estado natural del
7. amor humano que no se asemeja al amor consiente o el amor cristiano de los
textos que se están analizando y que nos hablan del común de los amores que
experimentamos y de los cuales aseguramos daríamos la vida por ellos.
3.1 Así pues[c18], podemos exponer que si bien el texto de Orange tiene algunas
similitudes con el texto de Corintios, esta se establece a partir del amor que busca
superarse a sí mismo y tener un contacto con lo divino mientras que, al adentrarse
Orange en el amor humanado, se pierdo todo contacto con lo divino y por ende,
toda similitud con el amor cristiano. Volviéndose entonces vértice de pasiones y
necesidades humanas que crea monstruos perfilados en relaciones dañadas y
tormentosas donde uno busca en el otro lo que ninguno puede ofrecer.
3.2 El amor que aparece aquí como núcleo de este tema, aparece también como
tema principal de muchas historias de amor que pueden ahora entenderse si se
considera la falta de profundidad de los amantes que lloran en las novelas y que
no logran superar sus necesidades humanas renunciando a sí mismos para
encontrar en el otro, el objeto que los lleve a experimentar una experiencia solo
vivida por los santos y que bien podría realizar los sueños de estos amantes
frustrados que se quedan en el amor emocional o instintivo.
3.3 Es fácil entender entonces la gran cantidad de matrimonios que ante este tipo
de amor, sucumben al egoísmo y la ruptura. Pero, Orange con el amor consiente y
San Pablo con el amor cristiano, nos recuerdan esos matrimonios de los abuelos
que encontraron la felicidad en el olvidarse de sí y encontrar la dicha en el gozo
familiar, en el cuidado de los hijos y en comprender y entender al hombre-mujer
que eligieron para vivir este estadio transitorio que es la vida.
No es que yo piense que el amor es fácil, pero sí creo que si se desea hablar del
AMOR, así, con mayúsculas, debemos dejar a un lado el pensamiento de dignidad
y comodidad tan mal entendidas en la actualidad y crear en torno a nosotros, la
necesidad de entrega, sin esperar que el otro sea el responsable de nuestro bien-
estar y felicidad.