El Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice) denuncia una nueva amenaza firmada por las Águilas Negras, dirigida contra varios de nuestros integrantes, además de otros defensores de derechos humanos, víctimas de crímenes estatales, funcionarios de la Alcaldía de Bogotá y medios alternativos de comunicación.

1. Nuevas amenazas contra integrantes del Movice, medios y defensores DDHH
Escrito por protección MOVICE
Viernes, 12 Diciembre 2014
El Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice) denuncia una nueva amenaza firmada por las Águilas Negras, dirigida contra varios de nuestros integrantes, además de otros defensores de derechos humanos, víctimas de crímenes estatales, funcionarios de la Alcaldía de Bogotá y medios alternativos de comunicación.
Hechos
El día 9 de diciembre, en horas de la mañana, un hombre desconocido entregó un panfleto amenazante en la mano de una defensora de DDHH, que se encontraba en el Centro de Memoria Paz y Reconciliación de la Alcaldía de Bogotá.
El panfleto, titulado “Comunicado de comando superior plan desalojo punpunpun”, nombra a los siguientes integrantes del Movice: Alfonso Castillo, Director de la Asociación Nacional de Ayuda Solidaria (ANDAS); Camilo Álvarez, de Hijos e Hijas por la Memoria y contra la Impunidad; Adriana Cuellar, integrante del equipo legislativo del Representante a la Cámara Alirio Uribe, y Ana Jimena Bautista, miembro del equipo legislativo del Senador de la República Iván Cepeda.
La amenaza también declara objetivo militar a funcionarios de la Alta Consejería de Víctimas de Bogotá, a medios de comunicación alternativos, incluyendo Canal Capital, y a varios otros defensores de DDHH.

2. Contexto
Este panfleto es entregado después de una serie de agresiones contra los medios alternativos, víctimas de crímenes de Estado y figuras públicas que han respaldado abiertamente a la paz, incluyendo varias amenazas firmadas por las Águilas Negras:
-El 8 de septiembre es enviado por correo una amenaza contra 91 defensores de DDHH, incluyendo varios miembros del Movice y varias víctimas que habían integrado las delegaciones de víctimas para participar en los diálogos de paz en la Habana.
-El 9 de septiembre es enviado por correo una nueva amenaza contra 89 defensores de DDHH, incluyendo muchos de los mismos nombres que el anterior, firmada por las Águilas Negras.
-El 10 de octubre, en horas de la tarde en Bogotá, la Policía debió cerrar una parte de la carrera séptima con calle 85 por un posible artefacto explosivo que se encontraba en la vía. Posteriormente, aseguraron las autoridades que era una falsa alarma. En inmediaciones a la zona en donde ocurrieron los hechos residen la ex candidata a la vicepresidencia por la Unión Patriótica, Aída Avella, y la directora de la Corporación Reiniciar, Jahel Quiroga.
- El 23 de octubre, la Corporación Nuevo Arcoíris denunció que a su correo directo llegó un nuevo mensaje en el que el grupo paramilitar autodenominado Águilas Negras amenaza de muerte a 99 personas pertenecientes a organizaciones de víctimas, sociales, étnicas, populares y políticas. Al parecer, se trata de una reiteración de las amenazas realizadas a 91 defensores de derechos humanos durante el mes de septiembre, pero con la inclusión de al menos ocho personas más.
-El 30 de noviembre y el primero de diciembre el grupo paramilitar “Bloque Capital - Águilas Negras” profirió amenazas de muerte contra varios medios de comunicación colombianos, entre ellos la `Agencia de Reporteros sin fronteras’, Canal Capital, Telesur y el periodista Nelson Arnesto, fundador de Patio Bonito Al Día.
Es preocupante que las Águilas Negras, pese a no ser un grupo armado con presencia militar comprobada en ningún departamento, tengan la capacidad de amenazar a más de 200 personas. Esta situación genera dudas sobre el origen real de las amenazas y conduce al interrogante sobre si en realidad agentes estatales estarían usando este apelativo para amenazar de forma directa a quienes trabajan comprometidos con la salida política del conflicto armado y a favor de la paz con justicia social.

3. Exigimos
-Que el gobierno nacional y las entidades estatales competentes, incluyendo la Fiscalía General de la Nación, tomen acción urgente para identificar y sancionar a los responsables de la amenaza.
-Que el gobierno nacional y las entidades estatales competentes, incluyendo el Presidente Santos y el Ministerio del Interior tomen medidas para asegurar la protección política y el cumplimiento de las medidas de protección física a los defensores de DDHH y víctimas.
-Que la comunidad nacional e internacional se pronuncie a favor de la protección preventiva para los defensores y víctimas de crímenes estatales, que apoyan la paz y que han sido amenazados como resultado.
Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice)
12 de diciembre de 2014
En las últimas dos semanas se conocieron amenazas a medios de comunicación, estudiantes de universidades públicas y líderes sociales de diversas regiones del país. El contexto político de estas amenazas, y de las anteriores. Por el Equipo Editorial de Colombia Informa. Publicado el día Viernes, 12 Diciembre 2014

4. Cada una con destinatarios distintos, pero todas con el mismo sello: lenguaje paraco, algo de información que podría pensarse fruto de tareas de inteligencia, señalamientos e intimidaciones. Lamentablemente estas situaciones no son nuevas, ni patrimonio exclusivo de voceros anónimos o supuestas bandas criminales o paramilitares. Basta recordar las palabras recientes del senador Álvaro Uribe tildando a los medios de comunicación ahora amenazados (Telesur, Canal Capital) de estar “al servicio del terrorismo” por transmitir la audiencia pública en la que se pidió explicaciones a este senador (y expresidente de la República) por sus vínculos con el paramiliarismo. Uno de los grupos promotores de los panfletos amenazantes, que se hace llamar 'Bloque Capital de las Águilas Negras', ya ha enfocado sus amenazas contra personalidades de la política; en febrero de este año fueron amenazados el alcalde de Bogotá Gustavo Petro, el senador Iván Cepeda y organizaciones defensoras de derechos humanos. En aquel momento se revelaba el escándalo de las 'chuzadas' a la Mesa de diálogos de La Habana. Algo similar puede analizarse respecto a estos días de nuevas amenazas, después del secuestro y entrega del general Alzate (con el consecuente desprestigio de las Fuerzas Armadas por la irresponsabilidad de uno de sus más altos mandos) y la evidencia de vínculos de efectivos del Ejército y la Policía con bandas criminales. Los sectores más concentrados de la reacción, del poder militar y de su extensión, el paramilitarismo, se ven cuestionados; es entonces cuando los medios de comunicación "molestan", los referentes sociales o de izquierda "molestan", y resurge la estrategia del panfleto y la amenaza. Señalamientos concretos a sectores concretos Durante estos primeros días de diciembre, fueron amenazados cada semana referentes de un grupo social distinto. El último hecho fue denunciado por la Asociación Colombiana de Estudiantes Universitarios, que informó sobre amenazas recibidas por un vocero de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil -MANE-, un representante ante el Consejo de la Universidad Nacional y otros referentes estudiantiles, también en nombre del supuesto Bloque Capital del supuesto grupo Águilas Negras. ¿Anuncio de un próximo accionar paramilitar que se cobre las vidas de quienes están siendo amenazados? Sería irresponsable descartar de plano cualquier hipótesis, teniendo en cuenta la impunidad con la que siguen contando sectores criminales con vínculos con expresiones de la inteligencia del Estado y agentes de las fuerzas militares. Aún

5. así estos casos, por la masividad de los “objetivos” que señalan en sus amenazas, parecen estar dirigidos en otro sentido: generar temor. El contexto: los avances de los procesos de Paz, en este caso la reanudación de los diálogos de La Habana y la renovada expectativa de que se concreten los diálogos con el Ejército de Liberación Nacional -ELN-. Fabiola León Posada, corresponsal en Colombia de Reporteros Sin Fronteras -uno de los colectivos de prensa amenazados a principios de mes- analiza: “Creemos que el panorama responde a la polarización del país y el apoyo social a los diálogos de paz. Cuando hicimos un análisis de los 14 medios que están allí amenazados, más los otros tres que habían aparecido días anteriores, se ve que esos medios tienen posturas críticas frente al comportamiento de las fuerzas militares”. En el mismo sentido opinaron, mediante un comunicado, los diversos medios de prensa amenazados: “En todas estas intimidaciones se acusa a las organizaciones sociales de aliadas del ‘terrorismo’ o de ser ‘enemigas del progreso’ o de la Fuerza Pública, por el simple hecho de defender sus derechos”. Objetivo no cumplido Continúa su análisis la periodista Fabiola de León: “Es una estrategia de intimidación, y afortunadamente las amenazas que han llegado no han pasado de ser amenazas, si bien en algunos casos son continuas. Lo que buscan es amedrantar para que no se siga realizando el trabajo de investigación o el trabajo social que se está haciendo. Específicamente en el caso de los periodistas les están pidiendo que se callen, que no den a conocer ciertos procesos sociales. En estos procesos lo que hemos identificado es que, aparte de hablar de paz, hay una clara línea a favor de los derechos humanos y de señalamiento de la corrupción y el accionar de bandas criminales”. A modo de respuesta activa, ayer jueves 11 de diciembre se convocó a un plantón en rechazo a esta lógica de amedrentamiento. Los medios, periodistas y líderes sociales blanco de las amenazas, entre los que se encuentra Colombia Informa, seguiremos en nuestras funciones y proyectos. Sin descuidar los recaudos legales y de seguridad, ya que no se puede olvidar la larga lista de asesinatos perpetrados por el paramilitarismo -aún activo, más allá de la veracidad o gravedad de los panfletos en cuestión-, ni a los 56 periodistas asesinados desde el año 2000 en Colombia, al igual que sucede con sindicalistas, líderes campesinos o sociales. Conscientes de la situación, así como de la necesidad impostergable de avanzar

6. en la construcción de un futuro con paz verdadera, con cambios y sin miedos, reafirmamos la declaración suscrita junto a comunicadores y medios también señalados: “Ni ésta ni ninguna amenaza impedirá que cumplamos nuestra labor por la defensa de los derechos humanos; las amenazas, antes que amedrentarnos y aislarnos, nos unen en defensa de los derechos del pueblo colombiano”.
DIC2014 Colombia. Amenazas y mentiras para, una vez más, conquistarnos. Escrito por Radicales Libres de Colombia Carlos A. Castaño M. Pero también el papel de las transnacionales, haciendo uso de ese “gobierno invisible”, es el de poder, una vez mas conquistarnos, con todo el entorno que nos rodea. “Alternativa Latinoamericana”, ha informado de actos de hostigamiento y de amenazas de muerte en contra del colectivo radial “Radicales Libres” en Colombia, de parte del bloque capital de águilas negras (http://alternativalatinoamericana.blogspot.com/search/label/Colombia); El pasado 4 de diciembre, a las 9:37 am, fue enviado a los correos electrónicos personales de miembros de diferentes colectivos y medios de comunicación alternativa y popular de Colombia un panfleto amenazante firmado por el Bloque Capital del grupo paramilitar Águilas Negras. (http://alternativalatinoamericana.blogspot.com/search/label/Colombia) En entrevista concedida a Dick Enmanuelson, subdirector de ANNCOL, entre otras, Luis Alberto Castaño, uno de los amenazados, señalo: “lo que quiero enfatizar, es que si a mi persona o a alguno de mis familiares, que también son amenazados, le ocurre algún atentado, solo podría decir que hay un responsable: El gobierno de Juan Manuel Santos y el Estado Colombiano; porque nos han querido

7. hacer creer que el problema del paramilitarismo, es un problema de delincuencia común, cuando en realidad son sectores muy cercanos al estado y es la inteligencia militar jugándose lo suyo, para podernos afectar”. (http://alternativalatinoamericana.blogspot.com/2014/12/entrevistas-paramilitares-amenazan-16.html) En el panfleto se declara como objetivo militar a 12 colectivos de comunicación, así como a 14 periodistas que son mencionados con nombre propio, y en donde se les advierte que deben cesar sus actividades porque serán callados a plomo, dándoles un plazo hasta el 1 de enero para abandonar las ciudades en las que desarrollan sus labores periodísticas. De otro lado el programa “Lombelico del Mondo” que trasmite por la radio argentina 106.3 radionauta FM, entrevisto a Carlos Velandia, ex integrante del Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia y actual analista y escritor, analizando la suspensión de los diálogos de paz de La Habana entre el gobierno Santos y las FARC. Refiriéndose a las amenazas a periodistas de medios populares y alternativos, ante la pregunta de cómo explicar que los periodistas sean amenazados por paramilitares, en medio de una negociación de paz, Velandia dijo: “Es bueno que lo sepa la opinión mundial, aquí en este País, la amenaza es casi que un deporte nacional, aquí se amenaza por todo; yo le podría asegurar, aquí todo el activismo de derechos humanos, está amenazado de muerte, todo el activismo de paz, está amenazado de muerte, todo el activismo popular, de líderes populares, que solamente pelean con la cedula de ciudadanía cuando van a votar, que hacen uso de la palabra, han sido amenazados de muerte desde hace mucho tiempo, aquí el asesinato y el crimen político es permanente, no hay garantías reales, para la participación, para el ejercicio de discrepar, e incluso de oponerse al gobierno……” (http://ombelicodelmondoblog.wordpress.com/2014/12/05/en- colombia-todo-el-activismo-de-paz-esta-amenazado-de-muerte/). Es necesario informar que ya se han colocado las denuncias pertinentes ante los organismos correspondientes, en relación con estas amenazas, y que la mayoría de medios amenazados han manifestado que “ni esta ni ninguna amenaza impedirá que cumplamos nuestra labor por la verdad informativa y la defensa de los derechos humanos, y que las amenazas, antes que amedrentarnos y aislarnos, nos unen en defensa de la libertad de expresión, la libertad de prensa y el derecho del pueblo colombiano a comunicarse libremente, con calidad informativa y sin ningún tipo de censura ni autocensura” (http://www.colombiainforma.info/politica/derechos-humanos/1940- nueva-ola-de-amenazas-paramilitarismo-activo-o-estrategia-de- amedrentamiento).

8. No nos dedicaremos a este tema, y por lo tanto, continuaremos informando sobre el reciente segundo encuentro de dirigentes campesinos, agrarios y sociales de la región Caribe, que se desarrolló en la ciudad de Sincelejo los pasados 29 y 30 de diciembre, contando con la participación de un poco mas de 300 dirigentes, provenientes de todo el País. Un concepto necesario de entender, es el significado que tiene la tierra para los campesinos, los negros y los indígenas y por eso Ángel Tolosa, un viejo dirigente y fundador de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos ANUC, quien se hiso presente en el encuentro, se adentra en la temática refiriendo una corta historia de las luchas organizadas campesinas de los años 70 en la que el Municipio de Sincelejo juega un destacado papel, al punto que al interior de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos ANUC, surge una tendencia, por aquella época, conocida en el País como ANUC línea Sincelejo. Para el común de la gente, no es de conocimiento las profundidades conceptuales que en el campo se dan en torno a la tenencia de la tierra y al significado que ella tiene para quienes la habitan, imposibilitando entonces entender el porqué de las luchas, que por ella se libran y la “guerra” en materia de la confrontación de lucha de clases que por ella se da. También el territorio, tiene sus bemoles en esta larga lucha por la tierra, lo que nos lleva a escuchar hablar, por ejemplo, de las zonas de reserva campesina, entre otras. Tan importante es el territorio, tanto para los negros, campesinos e indígenas, que en la disertación de Ángel Tolosa, este se pregunta y también se responde, “si desde las luchas que se iniciaron el 21 de febrero de 1971, cuando se ocuparon 800 latifundios y en esa movilización participaron 60.000 familias, se hubiera construido y desarrollado a partir de ahí, el concepto de territorialidad, a los paramilitares les habría quedado muy difícil entrar a controlar nuestros territorios; como no lo hicimos, de alguna manera, les quedo más fácil hacer ese ejercicio de desarraigo y de despojo de tierras, pero también de territorio” Para el negro, el indio y el campesino, tanto el concepto de tierra, como de territorio, tiene distintos significados, que en el transcurso del programa se irán desenmarañando. La reflexión se adentra también en el concepto del ejercicio de la territorialidad, la cual, eso si, no es dejada de lado por el modelo económico que como en el caso del Departamento del Choco, el

9. portal (www.pacificocolombia.org), en su artículo “Desangre del rio Quito”, reporta que: “El uso de mercurio y cianuro es efectuado sobre el lecho del río contaminando las aguas. Paradójicamente, la pobreza es la constante en el Chocó a pesar de sus grandes riquezas naturales. Y un factor desequilibrante es el modelo económico extractivo que se impone a través de la locomotora minera que está generando destrucción ambiental, desplazamiento y pobreza. El modelo de desarrollo extractivista es obsoleto, pues enriquece a unos pocos, empobrece a muchos y destruye el medio ambiente”. (http://www.pacificocolombia.org/novedades/desangre-quito- choco/1151) La afectación de las comunidades indígenas, en la medida que las transnacionales avanzan en sus megaproyectos neoliberales, que afectan los territorios pero que igualmente imponen su ejercicio de la territorialidad, va permitiendo entender la importancia de tener un concepto solido, unificado y diferente sobre estos aspectos, desde las comunidades, campesinas, indígenas y Afrodescendientes. En otro extremo distante de donde se ha llevado a cabo el segundo encuentro de dirigentes campesinos, agrarios y sociales de la región Caribe, y según nos lo reporta el mismo portal (www.pacificocolombia.org), 830 indígenas desplazados a la ciudad de Buenaventura se han sumado a los 140.000 reportados en 15 años, en esta región del País. Los oyentes se preguntaran, y para que, o que se busca con estos desplazamientos, pudiendo encontrar la respuesta en que “lo que está en juego es todo el territorio”.(http://www.pacificocolombia.org/novedades/indigenas- desplazados-buenaventura-suman-anos/1153) Los negros, indígenas y campesinos señalan que posterior a la llegada de las multinacionales y sus megaproyectos, no solo cambian las relaciones sociales entre las comunidades, sumándosele el desplazamiento, sino que igualmente el paisaje deja de ser lo que se conoció, pasando a ser un paisaje uniformado exportador, en el que solo se observan grandes monocultivos, que no dedicaran a dar comida a las gentes, sino comida a los carros, y a pretender convertir la vocación indígena, afrodescendiente e indígena, por la tierra, en un vulgar apéndice del capital transnacional . De otro lado, recientemente John Pilger en el portal de rebelión, refiriéndose a la guerra a través de los medios de comunicación señalaba, entre otras, que: “El mundo enfrenta la perspectiva de una gran guerra, tal vez una guerra nuclear, con EE.UU. determinado a aislar y provocar a Rusia y eventualmente a China. La verdad está siendo puesta cabeza abajo y al revés por los periodistas, incluyendo aquellos que promovieron las mentiras que llevaron al baño de

10. sangre en Irak en 2003. Los tiempos en los que vivimos son tan peligrosos y están tan distorsionados en la percepción pública que la propaganda ya no es, como la llamó Edward Bernays, un “gobierno invisible”. Es el gobierno. Dirige directamente sin temor a contradicción y su principal objetivo es conquistarnos: conquistar nuestro sentido del mundo, nuestra capacidad de separar la verdad de las mentiras”. Pero también el papel de las transnacionales, haciendo uso de ese “gobierno invisible”, es el de poder, una vez mas conquistarnos, con todo el entorno que nos rodea.