La semántica, semiótica e ideología: significado de los símbolos y representaciones
1. La semántica se define como la
ciencia de las significaciones. Es
decir, el significado de los símbolos
y representaciones que nos
permiten comprender el mensaje
que ellos transmiten. El hombre es
quien más representaciones y
símbolos ha creado, de esta
manera ha podido avanzar en su
desarrollo como ente social y
transformador de su medio.
Diariamente hacemos uso de los de
los símbolos y sus
representaciones, muchos de ellos
utilizados a nivel mundial, sin
importar la diferencia de idiomas,
estos representan un mensaje
concreto que es aceptado y
comprendido a nivel mundial.
Ejemplo de ello son el significado
de las señales de tránsito,
hospitales, fuerza pública,
comunicación, entre otros.
2. La semiótica es la ciencia que
estudia la vida de los signos
en el seno de la vida social.
La dimensión semiótica
consiste en lograr
representar a través de un
signo o símbolo un significado
o mensaje. Hoy día el
lenguaje a través de los
signos es cada vez mayor, en
nuestro medio solemos decir
que “una imagen vale más que
mil palabras”, y es que a
través de ellos podemos
aprender o enseñar
conceptos reales o
abstractos.
3. La ideología es el conjunto de
conceptos, teorías y valores que se
tiene acerca de la naturaleza y el
hombre. La esencia de la ideología
está en la influencia que pueda tener
una ideología sobre el modo de
pensar y actuar de los demás. Es
decir, las ideologías cumplen un
papel conductor, rector y/o
transformador de la conducta,
pensamiento y acción de las
colectividades o sociedades. Las
ideologías no siempre corresponden a
un modo correcto de interpretar la
realidad. Muchas de ellas son
especulaciones del mundo real. La
ideología que integre en sus
conceptos, aquellos que son producto
de la ciencia, interpretan la
naturaleza y al hombre más
objetivamente, y por consiguiente
contribuyen en transformar la
realidad.
4. El discurso es la lectura de
un conjunto de ideas acerca
de un tema. El discurso
depende de la ideología o
interés que tenga la persona
sobre un tema concreto. Es
decir, es más personal. En el
discurso se pretende fijar
una posición ideológica y
política. En tanto que la
historia es el resultado del
estudio más detallado
acerca de un tema o hechos
ocurridos. En si la historia es
el relato de hechos pasados,
elaborados de una manera
objetiva, lo más cercano a
la realidad de los hechos, sin
pretender distorsionar o
injerir sobre lo ocurrido.