1. TEMA:
“EL CERRO SANTANA”
MATERIA: TEC. EXP. ORAL Y ESCRITA E INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA.
ESTUDIANTE: ERIKA LISSETH CASTILLO CASTILLO.
PROFESORA: ING. MARTHA AGUILAR.
PARALELO: 7
AÑO LECTIVO
2012 – 2013
2. INTRODUCCIÓN.
“Entre el Río y las Estrellas” es una obra literaria de
Arturo Vergara, basado en sus experiencias vividas en el
conocido Cerro Santa Ana de Guayaquil.
Son historias referentes a personas y familias (los
cerreños) que compartieron anécdotas junto al autor, así como
también costumbres y tradiciones que se practicaban en el
cerro.
El Cerro Santa Ana ha pasado por muchos cambios
desde que fue habitado hasta la actualidad, con eso también
ha ido desapareciendo poco a poco ciertas costumbres y se
han ido adquiriendo otras, así mismo ha ido mejorando su
estructura en viviendas y alrededores, además de la
personalidad de sus habitantes, haciendo de este lugar un
atractivo turístico en la ciudad.
La mayoría de las personas que actualmente viven
en el Cerro Santa Ana han dejado de lado algunas costumbres
que los caracteriza como “cerreños”, ya que el mundo ha
cambiado tanto y las personas se están dejando llevar por
factores influyentes en su personalidad, olvidando asi sus
costumbres o dejándolas de lado; los cambios siempre se darán
pero no debemos dejar de lado lo que nos caracteriza.
3. CONTENIDO.
La ciudad comenzó en las laderas del Cerro Santa
Ana en el año de 1957, en un caserío de madera, con un
promedio de 150 habitantes; siglo y medio más tarde este
promedio se multiplico de manera apreciable construyendo
una nueva ciudad en el transcurso de las gradas que conducen
al mirador más hermoso de Guayaquil.
En el año de 1963 Guayaquil se dividió en ciudad
nueva y ciudad vieja, quedando el Cerro Santa Ana como
parte de la ciudad vieja, entre muchas personas que llegaron a
habitar el cerro, como migrantes que buscaban un refugio en
un lugar poco visitado para no ser encontrados y tener
estabilidad económica y emocional, ellos empezaron a construir
casas de caña alrededor de él.
El Rio Guayas formó parte desde un comienzo de
este atractivo turístico a vista de muchas personas que
habitaban el cerro y ahora a vista de turistas y ecuatorianos que
apreciamos la belleza de éste desde el cerro, el sistema fluvial
del Río Guayas es el más extenso, el más hermoso e importante
en todo el Ecuador, Occidental y de toda la Costa
Sudamericana.
4. Una de las primeras fuentes de trabajo que se
extinguieron en el cerro fueron los trabajos en madera, desde
que se puso el primer poste existieron los albañiles y carpinteros,
los cuales eran personas que contribuían con el desarrollo del
lugar, llegando a ser muy reconocidas y admiradas por los
mismo habitantes del cerro; pero no solo existieron trabajos con
madera, también se practicaba la pesca junto al Río Guayas, la
cual no solo era una profesión sino que se llegó a convertir en un
estilo de vida para los habitantes. Los pescadores del Río
Guayas son personas que han adquirido generación tras
generación las memorables costumbres y aun algunos de ellos
las mantienen, aun salen a pescar en canoas, las cuales son un
pequeño campamento para ellos ya que aparte de que en ella
llevan sus herramientas de pesca, llevan sus alimentos y una
radio que los acompaña mientras la noche de pesca termina.
El viento se ha convertido en un amigo de los
pescadores, siendo uno de los pocos sonidos que escuchan en
el transcurso de sus noches, en el Río Guayas también nacen
muchas leyendas y mitos, como por ejemplo las almas piratas
que rondaban el cerro por las noches. Los pescadores afirman
que las aguas del rio han cambiado, así como su fauna, que
hay menos agua, menos profundidad, que los peces e incluso
los fantasmas se han ahuyentado. Sin embargo, ellos siguen ahí
trabajando con esfuerzo a pesar del clima y muchos otros
factores.
5. Los Asaltos de Piratas y Bucaneros a Guayaquil, son
historias del cerro, eje de la ciudad desde entonces y asiento de
los cañones que la defendían.
A lo largo de la historia el Cerro Santa Ana fue
cambiando, sus viviendas, sus habitantes, su estructura, etc.
Fueron apareciendo nuevas enseñanzas y costumbres y en si
casi todo cambió.
En los últimos años son en los que se ha
transformado este lugar con mayor fuerza, aumentando el
turismo y la economía de los habitantes.
En el Cerro Santa Ana se llevaron a cabo una serie
de modificaciones y mejoras para hacer de este lugar un gran
centro turístico, en el cual en la actualidad pocas personas aun
rescatan y mantienen las costumbres de sus antepasados, ya
que eso siempre queda como huellas en la historia familiar a
pesar del tiempo.
El cambio del Cerro Santa Ana, pudo ser la puerta
que abrió una ventana turística al mundo aunque también fue
el factor para que sus habitantes pierdan ciertas costumbres,
pero de una cosa si podemos estar seguros, es que todo
cambio se hace para bien.