José María de Pereda (1833-1906) fue un escritor español que representó el paso del prerrealismo al realismo. Escribió obras con un tono costumbrista y una intención moralizadora, retratando detalladamente su Santander natal. Sus novelas más destacadas incluyen Don Gonzalo González de la Gonzalera (1879) y De tal palo, tal astilla (1880), inspiradas por su ideología conservadora y católica. A partir de 1882 inició su gran etapa realista con obras regionalistas que recreaban el un
2. Representa el nexo
de unión entre el
prerrealismo de
Fernán Caballero y el
realismo de Galdós.
Comienza escribiendo
obras con un tono
costumbrista, aunque
con intención
moralizadora.
Pinta su Santander
natal, sin evitar casi
ningún detalle.
Su ideología
conservadora y
católica le inspiran
obras como las
siguientes:
Don Gonzalo González de la Gonzalera
(1879),
De tal palo, tal astilla (1880)
3. 1882
A partir de esta
obra inicia su
gran etapa
realista.
Una novela que
se puede
calificar como
NOVELA
REGIONALISTA
REALISTA.
Regionalista
porque siempre
recrea el
universo
regional de
Santander.
4. 1885
Nos cuenta el
enamoramiento de
tres hombres, Andrés,
Muergo y Cleto, por
Sotileza; ésta
escogerá a Cleto,
serio y trabajador y
rechazará a los otros
dos.
Abundan las
descripciones de la
ciudad de Santander y
del mar; aparecen todas
las clases sociales,
aunque con predominio
de las más humildes.
5. 1895
En un lugar cercano a
Reinosa, un joven de
Madrid, Marcelo,
acostumbrado a la vida
fácil y confortable de la
gran ciudad, se
encuentra, por
circunstancias
familiares, envuelto en
la vida del pueblo y de
sus habitantes. De ahí
surge la lucha interior
de Marcelo para decidir
si va a quedarse a vivir
en esta localidad
perdida en la montaña o
por el contrario,
regresará a Madrid,
donde se encuentran
sus amigos, su
confortable piso, el
teatro, los cafés, etc.
Novela en la que el
argumento es casi
inexistente. La prosa
descriptiva lo invade
casi todo: los
campesinos
montañeses, en
contacto con una
naturaleza agreste.
Aparecen temas
como el menosprecio
de la Corte y
alabanza de la aldea,
tradicionalismo
religioso, político y
regionalismo.
6. 1893
Nos cuenta la historia de
un Pedro juvenil,
revolucionario, amigo de
aventuras: se nos recrea
el universo madrileño, las
batallas políticas y
periodísticas de la época.
Es una obra en la que
no hay tantas
descripciones como en
las novelas anteriores
Cierta crítica satírica de
la realidad revolucionaria
de la época.
Es una obra con un cierto
tono autobiográfico.