1. De un simple pedazo de
acero a una espada del
rey
Por amor de Sión no callaré, y por amor
de Jerusalén no descansaré, hasta que
salga como resplandor su justicia, y su
salvación se encienda como una
antorcha. Isaias.62:1
2. Introducción
Un hombre tuvo curiosidad por preguntarle a un
herrero como era el proceso para elaborar una
espada, y este se lo describió literalmente, de
principio a fin: Primero caliento la lamina de
acero a un calor infernal, hasta que se pone al
rojo vivo, enseguida, sin mas pensarlo le aplico
varios golpes, hasta que la pieza adquiere la
forma deseada, luego la sumerjo en un balde de
agua fría, y el taller entero se llena con el ruido,
y el vapor, por lo que la pieza de acero estalla y
grita a causa del violento cambio de
temperatura……Tengo que repetir este proceso
hasta obtener la espada perfecta, una sola vez
no es suficiente….
3. Continuación..
El herrero hizo una larga pausa, y continuo
diciendo…… a veces el acero que llega a mis
manos no logra soportar este tratamiento, el
calor, los martillazos y el agua fría terminan
por llenarlo de frizuras…..En ese momento me
doy cuenta de que jamás se transformara en
una buena hoja de espada y entonces,
simplemente lo dejo en el montón de fierro
viejo que está en la parte de atrás de la
herrería.
4. Desarrollo
Cuando venimos a Cristo, en ese preciso
momento, es cuando nosotros somos como
una pieza de acero en las manos de Dios…es
decir, cuando recibimos al Señor Jesucristo
como nuestro Señor y Salvador de nuestras
almas, literalmente somos llevados a su taller
como un trozo de metal sin forma…ya que
recordemos que la condición en la que
venimos, era rustica, ordinaria, llena de
imperfecciones…y es ahí donde comienza el
proceso de formación. En el taller del herrero
por excelencia….
5. Hay dos cosas que dice la Biblia en
Isaías 62.1, por las cuales Dios no
callara, ni descansara de trabajar en
nosotros
1.- Que nuestra salvación se encienda como
una antorcha
Jesús dijo que no podíamos guardar debajo
de un cajón la luz que Él había puesto en
nosotros, que al contrario, debía ser puesta
en la parte mal alta posible, con el propósito
de que todos los del mundo nos vean, y así,
ellos mismos puedan ser alumbrados, y a
través de esa luz, puedan venir al
arrepentimiento….Además debe ser puesta
en alto para que alumbre también a todos los
de casa….
6. si esa luz esta en nosotros seremos de los que marcan
una diferencia entre las multitudes, ¿sabes por qué?
Porque la conducta de un hijo de justicia se evidencia
en sus conversaciones, en su caminar en publico, y en
lo secreto, aun en nuestra manera de vestir…si Cristo
es nuestro Salvador, la salvación, en nuestro diario
vivir, debe de evidenciarse en todo lugar. Galatas.4:19
2.- Hasta que Cristo sea Formado:
cambio de carácter. Pablo compara su dolor por la
iglesia de Cristo, con el de una mujer que está a punto
de dar a luz, él tenia carga de parte del Espíritu Santo,
ya que sabia que El Padre tiene un solo propósito para
su Iglesia, y es el de formar el carácter de Cristo en los
llamados hijos de Dios.
7. Cuales son los instrumentos
que el Señor usa en su
taller?,
Todas aquellas adversidades que vienen a
nuestra vida…
por ejemplo; como aprenderíamos a ser
pacificadores sino nos encontramos en
situaciones de pleitos o contiendas… como
aprenderíamos a ser hijos de fe, si todo nos
fuere dado con facilidad, como aprenderíamos a
perdonar, si nunca fuésemos ofendidos… en fin,
todo, absolutamente todo lo que nos acontece,
tiene que ver con la forma que se nos esta
dando en el taller del Señor… El propósito…
llegar a ser una espada de utilidad en el ejercito
de Cristo.
8. Lo difícil de permanecer en
su taller
Es difícil entrar a su taller, y sobre todo
permanecer en el… los duros golpes, el
sometimiento al fuego, las inundaciones,
son difíciles y nos hacen pasar por
mucho sufrimiento….pero es de suma
importancia saber que es por nuestro
bien, y que todo lo que hace y permite en
nosotros es por amor….por amor de si
mismo, por amor de su Santo nombre.
9. Conclusión
Solo hay dos opciones
2. o te quedas entre los desperdicios del
Herrero del cielo,
3. o aceptas la formación en su taller,
para llegar a ser de un simple pedazo
de acero a una espada nada menos
que del rey, nuestro Señor Jesucristo…
tú decides.