La apostasía y la indiferencia son los próximos pecados mencionados. Nunca antes en la historia de la humanidad eso ha sido tan cierto como lo es hoy. En unas pocas décadas, nos hemos apartado de la fe sencilla de los padres
2. INTRODUCCION
La apostasía y la indiferencia son los
próximos pecados mencionados. “Y por
haberse multiplicado la maldad, el amor de
muchos se enfriará” (Mateo 24:12). Nunca
antes en la historia de la humanidad eso ha
sido tan cierto como lo es hoy. En unas pocas
décadas, nos hemos apartado de la fe
sencilla de los padres
3. I. ¿cuándo dijo Jesús que esto
sucedería?
Dijo que iba a pasar como una “señal de Su
venida, y del fin del siglo” (Mateo 24:3). Muchas
otras Escrituras hablan de esta señal del fin del
tiempo. este verso “se aplica de una manera
específica al fin de la edad...Todo lo que ha
caracterizado a la edad se reúne y alcanza un
espantoso clímax cuando el fin viene”
Vivimos en una generación que nunca ha visto
avivamiento, y nos hemos acostumbrado a esto
4. II. ¿por qué dijo Jesús que esto
sucedería?
Nota la primera palabra del texto, “Y”.
Nota la serie de la letra “Y” en los versículos
10 a 12. “Y... Muchos tropezarán” (v. 10). “Y
se entregarán unos a otros” (v. 10). “Y unos a
otros se aborrecerán” (v. 10). “Y muchos
falsos profetas se levantarán” (v. 11). “Y
engañarán a muchos” (v. 11). “Y por haberse
multiplicado la maldad” (v. 12).
5. Esta larga cadena de la letra “Y” termina con
lo que estas cosas producen – ellas producen
“el amor de muchos se enfriará”.
Las divisiones en las iglesias y las luchas de
la iglesia del verso 10, seguido por los falsos
predicadores que engañarán [“engañan”
NASV] personas, seguido de la maldad
[anomia.; “sin ley” NASV] en las iglesias ha
producido una iglesia, llena de gente fría que
no tienen “agapeo”, no amor Cristiano – ¡no
amor por Jesús, no amor por Dios, y no amor
por los demás en la iglesia!
6. Esa serie de letras “Y” nos muestra por qué
tenemos “Un Gran Desastre Evangélico”.
¡Las iglesias son un desastre a causa de
peleas de la iglesia (v. 10), falsos
predicadores que se levantan a la ocasión (v.
11), y la maldad entre la gran mayoría de los
miembros no convertidos y reincididos,
produce iglesias frías sin amor por Jesús, y
sin amor unos por otros!
7. III. ¿quiénes son los muchos
que se enfrían?
Los “muchos” son aquellos que no son
convertidos, o que están profundamente
reincididos, demostrado por el hecho de que
el espíritu de maldad de esta edad ahoga su
celo y amor. Ellos “se enfrían”, porque el
espíritu del mundo vence todo amor celoso
que pudo haberse visualizado.
8. La parábola del sembrador
La Parábola del Sembrador da cuatro clases de
personas, y cómo cada grupo responde a la
predicación del Evangelio.
Hay cuatro clases de personas en la parábola.
Las tres primeras clases no son verdaderos
cristianos. “Las tres [primeras] clases de tierra no
representan tres clases de creyentes – ¡no son
creyentes para nada! Ellos han escuchado la
Palabra y sólo han profesado recibirla.
Por lo tanto, sólo la cuarta clase son personas
realmente salvas. El resto son personas perdidas.
9. En la parábola la “semilla” es la Palabra de
Dios.
“Nota donde cae la semilla.
Cae en cuatro clases de tierra – y las tres
cuartas partes de la semillas no crecen –
ellas mueren. No había nada malo con la
semilla, pero la tierra era el problema”.
10. Explicación de la parábola
Aquellos donde la semilla cae junto al camino,
son los que escuchan la Palabra y el Diablo la
arrebata inmediatamente. Ellos representan a los
que vienen a la iglesia un par de veces, pero no
los mueve para nada.
La segunda clase son aquellos en los que la
Palabra cae sobre piedras, que parecen recibir la
Palabra, pero se apartan tan pronto como son
probados por los problemas o la persecución.
La tercera clase son los que reciben la semilla
entre los espinos. Ellos escuchan la Palabra y
parecen ser convertidos.
11. Observemos este verso
“La que cayó entre espinos, éstos son los que
oyen, pero yéndose, son ahogados por los
afanes y las riquezas y los placeres de la
vida, y no llevan fruto” (Lucas 8:14).
12. La Palabra de Dios es “ahogada” – “ahogados por
los afanes y las riquezas y los placeres de la vida,
y no llevan fruto” (o madurez); Lucas 8:14. El Dr.
MacArthur dijo al respecto
“Estas son las personas de doble ánimo de
Santiago 1:8 que están consumidos por las cosas
temporales [mundanas] – placeres pecaminosos,
anhelos y deseos, ambición, carrera, casas,
carros, prestigio, relaciones, fama – todo lo que
ahoga la semilla del evangelio y no llevan
fruto…Este es el corazón mundano preocupado,
‘ahogado por las preocupaciones, las riquezas y
los placeres de esta vida’
13. Pero toma mucho más tiempo para saber
quiénes son los de “entre espinos”.
Los vemos hacer una profesión de fe.
Muchas veces es incluso una profesión que
incluye lucha y lágrimas.
Ellos aprenden como niños, o adolescentes,
que van a pasar a través de una lucha antes
de venir a Jesús
14. Dicen que tienen un corazón nuevo y un
nuevo deseo de servir a Jesús. Incluso me
han engañado muchas veces. Parecen tan
sinceros. Parecen grandes cristianos. Eso es
hasta que pasa un tiempo. Es sólo entonces
que las grietas en su testimonio comienzan a
aparecer.
“No he dejado la iglesia”, dicen – ¡como si
irse de la iglesia es el único pecado! ¡Pero
sus corazones ya están dejando a Jesús!
15. Un gran ejemplo
Usías sólo tenía dieciséis años cuando por primera vez
lo encontramos en la Biblia.
Cuando era joven “hizo lo recto ante los ojos de
Jehová” (II Crónicas 26:4). El profeta Zacarías era su
pastor. “Y en estos días en que buscó a Jehová, él le
prosperó” (II Crónicas 26:5). Y se nos dice, “fue
ayudado maravillosamente, hasta hacerse poderoso”.
Pero entonces,
Cuando ya era fuerte, su corazón se enalteció para su
ruina – su corazón estaba tan orgulloso que le fue infiel
al Señor su Dios” (II Crónicas 26:16 RV, NVI). ¡Cuando
se hizo fuerte, su corazón estaba tan orgulloso que se
extravió! Y el Señor hirió a Usías y él “fue leproso
hasta el día de su muerte” (II Crónicas 26:21).
16. Dios nos da la vida de Usías como un
ejemplo. Él es una imagen del hombre o
mujer que deja que los espinos crezcan y
ahoguen la Palabra de Dios en sus
corazones.
Son ahogados por las preocupaciones, y el
deseo de hacer más dinero de lo necesario, y
enredos que arruinan el alma, como el
cáncer, que poco a poco mata el cuerpo, por
lo que estos espinos lento pero seguro
ahogan las almas de las personas que
permiten que lo hagan.
17. Conclusión
¿Se ha enfriado tu amor? ¿Te estás haciendo
mundano? ¿Te estás haciendo rebelde? ¿Estás
en un lugar peor del que estuviste
anteriormente?
La Parábola del Sembrador se da para –
“examinarnos, para descubrir a qué grupo
perteneces.
Si perteneces a uno de los tres primeros grupos,
debes ser convertido” – o, al menos, “Acuérdate,
pues, de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y
arrepiéntete” (Apocalipsis 3:3). ¡Por lo menos re-
dedica tu vida a Jesús y arrepiéntete, antes de
que realmente te conviertas en una persona
“entre espinos”!