Las Religiosas Franciscanas de María Inmaculada siguen el estilo de vida de San Francisco de Asís y la Madre Caridad. Viven y anuncian el Evangelio como Hermanas Menores, con la fraternidad como su hogar y Jesús Eucaristía como el centro de su vida consagrada. Comparten la realidad del pobre a través de la oración, la educación, el trabajo parroquial y el apoyo a niños, jóvenes y familias necesitadas.
7. 2 - Me siento llamada En cada una de las obras apostólicas las Hermanas se empeñan en la organización de movimientos infantiles y juveniles (REFRAMI); en Comunión y participación con la Iglesia Particular; en donde el niño y el joven van descubriendo la vocación a la cual Dios les llama. La joven con inquietud vocacional se entrevista con la Promotora vocacional local quién conoce a la joven y su familia. 1 - Descubro mi vocación
8. 3 - Clarifico lo que Dios quiere de mi Se realiza el seguimiento procesual de la joven con inquietud vocacional a través de fichas y encuentros Vocacionales en donde se trabaja las dimensiones: Humana, Cristiana y Congregacional. Participación en encuentros vocacionales a nivel local y provincial en donde se proporciona un ambiente de reflexión, oración, discernimiento, conocimiento mutuo de la joven con las Promotoras vocacionales y el Gobierno Provincial. 4 - Respondo al llamado de Dios.
9.
10. NUESTRA PROVINCIA CUENTA CON UN PLAN DE FORMACION INICIAL Y PERMANENTE EN DONDE TIENE ARTICULADO EL PROCESO DE LA PASTORAL VOCACIONAL , CON SUS DIMENSIONES HUMANA, CRISTIANA Y CONGREGACIONAL. “ La fraternidad prioriza la promoción vocacional , incluyendo el proyecto de Pastoral Vocacional en el Proyecto comunitario, en donde se comprometen en la elaboración, ejecución y evaluación del mismo”.
12. “ Después Jesús subió a un cerro y llamó a los que el quiso. Una vez reunidos, eligió de entre ellos a los doce, para que lo acompañaran y para mandarlos a anunciar el mensaje” (San Marcos 3, 13-14)