El documento describe las principales causas de la contaminación, incluyendo las actividades humanas como la explotación de recursos naturales y el uso de sustancias sintéticas, así como procesos naturales. Explica que el crecimiento demográfico aumenta la demanda de recursos y puede causar mayor contaminación. También analiza los impactos ambientales de la extracción y uso de carbón, petróleo y gas natural, como derrames, emisiones tóxicas, y efectos en la salud humana y ecosistemas.
1. ORIGEN DE LA CONTAMINACIÓN.<br />La materia no se crea ni se destruye por principio de la primera ley de la termodinámica. Por lo tanto, para que se mantenga el equilibrio en un sistema cualquier forma o cantidad de materia o energía que entre en él, deberá salir tarde o temprano. Si esto no ocurre, la materia o energía que se encuentren en exceso se acumularán en el sistema y darán origen a la contaminación. En consecuencia, por ejemplo cuando se explotan los depósitos naturales de un metal, éste y sus impurezas entrarán al ambiente y, si se considera al mundo como un sistema cerrado, es evidente que se generará contaminación. Lo mismo ocurre cuando se producen, utilizan o desechan sustancias sintéticas (xenobióticas).<br />Existe también la contaminación debida a causas naturales, como las erupciones volcánicas y la erosión. Sin embargo, en términos generales, la contaminación de origen natural nunca es tan grave como la de origen antropogénico, de la misma manera que sus efectos adversos, sobre todo a largo plazo, son menores. En síntesis, la contaminación puede ser natural o antropogénica, esto es, generada por las actividades humanas.<br />Como se dijo anteriormente, las principales causas del origen de la contaminación son las actividades del hombre, las relacionadas con la generación de energía, incluyendo la explotación de los recursos naturales no renovables, como el petróleo o los diversos minerales, la industria en general, o la agricultura.<br />Sin embargo, también pueden causar contaminación las actividades no productivas, como las que se realizan dentro del hogar o las asociadas con el transporte o los servicios.<br />La contaminación también puede ser consecuencia de procesos sociales como el crecimiento demográfico, los movimientos migratorios y la urbanización a causa de los cuales, por ejemplo, en un sitio determinado se pueden generar mayores cantidades de desechos. Una causa adicional son los patrones culturales, en particular, los asociados con la economía de consumo. Actualmente un factor de gran importancia es el uso generalizado en el hogar, la industria o la agricultura de sustancias sintéticas para diversos fines. En un lugar en particular, y en un momento dado, pueden existir simultáneamente varias de estas causas.<br />EXPLOTACIÓN DEMOGRÁFICA.<br />En la actualidad existe un crecimiento demográfico en el planeta y es importante para ello descifrar el impacto que esta tendrá en el planeta lo cual plantea serias interrogantes acerca de la forma en que la humanidad enfrentará la siempre creciente demanda por agua y alimentos.<br />El incremento de la población también aumenta la demanda de recursos energéticos.<br />El desafío que se plantea al respecto es el desarrollo de un nuevo sistema mundial de manejo de energía, capaz de garantizar el abastecimiento estable de este recurso, puesto que el sistema actual basado en la explotación y uso de combustibles fósiles, parece ser un modelo poco sustentable.<br />La explosión demográfica también está acelerando la destrucción del ecosistema a través de la tala de árboles, la contaminación de ríos, y la desertificación resultante de la deforestación, creando un círculo vicioso que acrecienta los problemas de abastecimiento de alimentos, fuentes de agua consumibles y suelos para el cultivo.<br />Ahora bien, frente a esta realidad, los grandes países industrializados deben asumir su responsabilidad y tomar el liderazgo en la búsqueda de un balance armonioso entre la protección del medio ambiente y el desarrollo económico, pues los países desarrollados son responsables de gran parte de la degradación ambiental que sufre el planeta.<br />El problema de población es complejo y debe concebirse desde una perspectiva más amplia; por ello, los avances en materia de promoción de la planificación familiar, educación básica, y sistemas nacionales de salud y servicios médicos, son fundamentales para enfrentar el problema de la falta de acceso y el mal manejo de los recursos para satisfacer las necesidades de la población mundial.<br />IMPACTOS AMBIENTALES DEL CARBÓN, PETRÓLEO Y GAS NATURAL.<br />Impactos ambientales del carbón. <br />Normalmente el carbón se recupera por uno de los dos procesos. En las minas a cielo abierto, el carbón próximo a la superficie se extrae por medio de equipo para movimiento de tierra; la sobrecarga de suelo se retira y se guarda para reposición posterior. El área se puede se puede rellenar y cubrir con vegetación después de extraer el carbón. En la explotación de depósitos mas profundos con cantidades de azufre y compuestos metálicos que han permanecido inertes en su entorno subterráneo a lo largo de las eras geológicas, la exposición de los minerales extraídos hacia el oxigeno y el agua inicia una serie de reacciones, en particular de oxidación y disolución, que antes no se podían producir. El resultado es la formación de óxidos de azufre (y por tanto de ácido sulfúrico), soluciones de metales, fenoles y otros compuestos diversos, muchos de los cuales son dañinos para el ambiente. Los apilamientos de carbón y los montones de escoria pueden generar cantidades considerables de estas sustancias, y es necesario controlar los lixiviados e impedir que penetren en aguas superficiales o subterráneas. Un problema humano importante es la seguridad y la salud de quienes trabajan en las minas de carbón. Los problemas de seguridad en las minas son muy conocidos, y han ocurrido muchas pérdidas trágicas de vidas humanas en accidentes subterráneos. Menos espectacular, aunque igualmente devastador, es el grave daño a la salud humana de padecimientos como el pulmón negro, cuya causa es la exposición de los trabajadores a partículas o polvo en las minas de carbón.<br />En la actualidad se están haciendo muchas investigaciones encaminadas a la gasificación del carbón, un proceso de licuefacción que por lo general implica la conversión a lata temperatura, y en muchos casos a lata presión, del carbón en productos líquidos o gaseosos. Si la conversión del carbón en combustibles gaseosos o líquidos desempeña un papel importante en las futuras economías energéticas, se pueden producir impactos ambientales significativos como consecuencia de la formación y dispersión de estas sustancias en los ambientes aéreos y acuáticos.<br />Impactos ambientales del petróleo.<br />Durante la exploración en busca de petróleo, ya sea en tierra o lejos de las costas, existe el riesgo de un estallido cuando se llega a perder el control del pozo. Esto puede ocasionar graves y prolongados derrames de petróleo que dañan el ambiente marino. La recuperación del control de un pozo estallado puede tomar un tiempo considerable y generalmente es necesario perforar un pozo de alivio para interrumpir el flujo de petróleo. El problema es particularmente grave en los climas nórdicos, donde la formación y el movimiento del hielo puede obstaculizar seriamente o incluso impedir la perforación de pozos de alivio.<br />Los derrames de petróleo pueden ser causas de mortalidad en las aves y de contaminación en las costas, con efectos biológicos graves en los organismos que habitan en la zona de mareas y cerca de la costa, en valiosas pesquerías de mariscos. También se ensucian embarcaciones, redes e instalaciones de bahías, lo cual requiere una limpieza costosa. El impacto del petróleo en el medio marino abierto es más difícil de evaluar, pero es probable que el derrame tenga cierto efecto en las pesquerías y, en general, en los organismos presentes en las aguas superficiales del océano.<br />Existe también un riesgo de derrame durante la producción y recolección de petróleo en tierra antes de su traslado a las refinerías. En ellas existe el potencial de emisión de hidrocarburos; óxidos de azufre (SOx), que causan acidificación de lagos y problemas respiratorios en los seres humanos; ácido sulfhídrico (H2S), que es muy tóxico y maloliente; dióxido de carbono (CO2), que da origen al “efecto invernadero”; óxidos de nitrógeno, que causan esmog fotoquímico y acidificación; y ciertas sustancias malolientes. Las refinerías generan además efluentes líquidos que pueden contener hidrocarburos, fenoles, amoniaco y otras sustancias tóxicas. Los compuestos orgánicos disueltos en estos efluentes se tratan normalmente por medio de procesos de oxidación biológica, y el petróleo se extrae por separación física. Es inevitable la formación de lodos compuestos de mezcla de hidrocarburos y organismos contaminados en muchos casos con metales, en particular níquel y vanadio, que están presentes por lo común en el petróleo crudo.<br />Durante la producción de petróleo existe el potencial de daños debidos a la contaminación del entorno local por productos químicos y lodos de perforación, así como la salmuera (una solución de sal) que suele salir de la formación asociada con el petróleo crudo.<br />Impactos ambientales del gas natural.<br />Es claro que estos efectos son considerablemente menos graves que los del petróleo. En general, el impacto de los escapes de gas natural (metano) en el ambiente es de poca importancia, siempre y cuando no estén acompañados de incendios o explosiones. El metano tiende a disiparse con rapidez en la atmósfera y tiene pocos efectos adversos en el ambiente.<br />También en este caso existe el riesgo de emisión de hidrocarburos durante los estallidos, pero probablemente es más grave el peligro por emanación de sulfuro de hidrógeno (H2S) durante la exploración y la producción. El sulfuro de hidrogeno, acompañante normal de gas natural en los depósitos de petróleo, es muy tóxico. El procedimiento usual consiste en eliminarlo del metano en una “planta de gas” próxima al pozo. Una y otra vez los desperfectos en el funcionamiento de las plantas han ocasionado fuertes emisiones de H2S que han hecho necesaria una evacuación rápida de grandes áreas en la dirección del viento. Como en el caso del petróleo, la eliminación de la salmuera y los productos químicos de perforación tiene un impacto. Además, la construcción de tuberías de gas puede ser destructiva y particularmente difícil en algunas regiones con variedad climática.<br />Un área de preocupación creciente es la posibilidad de que se produzcan accidentes graves como consecuencia del transporte de gas natural licuado (GNL). No resulta económico transportar gas natural gaseoso por buque cisterna; la licuefacción aumenta en alto grado la densidad energética de la carga y permite acarrear una mayor cantidad por viaje. Estas cargas se deben mantener a temperaturas muy bajas (abajo del punto de ebullición del gas natural) o a grandes presiones. Si en el recipiente que lo contiene hay una falla, se producirá una emisión de metano líquido, el cual se evapora muy rápido en esas condiciones y crea una condición muy riesgosa; por lo tanto, es probable que se produzcan incendios y explosiones.<br />