La historia trata de una niña llamada Gloria que vivía cerca del mar. Un día de lluvia, Gloria se asomó a la ventana y soñó que estaba en la playa, donde conoció a una estrella de mar y una concha que le contaron sobre su viaje. Luego, una paloma perdida les pidió ayuda para volver a casa. Gloria le dio de beber una poción mágica que la devolvió a casa, despertando de su sueño junto a la ventana. Desde entonces, Gloria pintaba escenas de su sueño.