1. MOISES EL GRAN LIDER SEGUNDA PARTE Por : Miguel Pascuas Dussan

2. Fueallí en un desolado lugar donde el granlíderempezósuproceso de aprendizaje bajo la dirección de Dios, quien usaría un método y materias totalmente diferentes a las que había recibido Cuarenta anos atrás para poder convertirse en el libertador del pueblo de Dios y así cumplir con la misión Divina para la cual había sido preparado desde el vientre de su madre. Empezó su educación en un lugar como un extranjero, las materias serian : La naturaleza, la aridez del desierto, las ovejas, el contacto permanente con las fieras que sin duda alguna estarían hambrientas de caza y al acecho del rebano que el cuidaba, los espinos que encontraría a su paso y que muchas veces le hirieron al igual que a sus ovejas a las que tubo que curar. Su gran maestro, Dios, con quien tendría un contacto continuo y seria su ayudador en los momentos de dificultad mientras realizaba su trabajo. “Moisés había aprendido muchas cosas que (allí) debía olvidar” PP 254:3.

4. Pero Moisés aunque estaba siendo guiado por el Altísimo necesitaba hacer algo mas, Ellen White dice : “ Para recibir ayuda de Dios el hombre debe reconocer su debilidad y sus deficiencias; debe esforzarse por realizar el gran cambio que ha de verificarse en el; debe aprender el valor de la oración y del esfuerzo perseverantes. Los malos hábitos y costumbres deben desterrarse; y solo mediante un decidido esfuerzo por corregir estos errores y someterse a los sanos principios, se puede alcanzar la Victoria.” PP 255:1 Empezó por reconocer su condición humana y la cantidad de fallas que tenia pero a su ves estaba dispuesto a someterse a las reglas que la escuela nueva le estaba ofreciendo y al tipo de clases que recibiría del mas grande maestro, Dios. Moisés aprendió a depender de Dios, se convirtió en un hombre de Fe; vivió experiencias que jamás imagino vivir con el dador de la vida en la soledad del campo.

5. Fueaquí en el desierto de Horebdondeapacentandosurebaño escucho el llamado de Dios para que se convirtiera en el caudillo de Israel. Aprendió a ser humilde, manso reverente, paciente. La biblia dice: “ Y aquel varón Moisés era muy manso mas que todos los hombres que había sobre la tierra” Números 12:3 Para ser catalogado así como la sagrada Escritura lo cataloga tubo que pasar por el crisol de la prueba y permitir que Dios puliera el carácter de tal manera que estuviera en condiciones optimas para cumplir con su misión. Durante esta etapa de su vida Moisés aprendió a darle la importancia que tenían las cosas pequeñas porque de ahí dependía el éxito o el fracaso en su trabajo. El pueblo de Israel era un pueblo frágil azotado por mas de 400 años de esclavitud en un país extraño y había que ser cuidadoso con el aunque muy firme en las determinaciones que se tomara por su parte para bien del mismo pueblo.

6. Amigo, joven, hermanoestas en un desierto donde necesitas aprender cosas nuevas para poder enrumbarte al cielo y consigo llevar a otros. Eres un Moisés moderno que tienes que desaprender muchas cosas aprender otras. Eres un Moisés que necesitas aprender a desarrollar la fe y a tener un contacto mas estrecho con Dios para recibir la debida capacitación que lo hará triunfador en la vida actual y en la vida eterna. O aun sigues en la tierra de Egipto acomodado a lo que ella ofrece y todavía no has salido al desierto de Madian donde aprenderás de Dios como su maestro: la humildad, la mansedumbre, la paciencia, el valor por las cosas pequeñas que te harán grande en el reino de los cielos, el amor por los demás, el privilegio de perdonar y ser perdonado? No puedes solo verdad?

7. “Venid a mi todos los que estais trabajados y cargados ,que yoos hare descansar” Mateo 11:28 esas son las palabras del Señor Jesús para usted ahora .El te esta invitando a salir de Egipto para moldear tu carácter y hacerte regresar cambiado para que ayudes a sacar a otros y sean libres al igual que lo hizo Moisés con su pueblo mas de cuatro mil años atrás acepta ese llamado hoy que tal ves mañana puede Ser demasiado tarde. Dios te bendiga No tepierdas la ultima parte de Moisés