El documento describe la semana de toros en Algemesí, una ciudad valenciana. Aunque algunos dicen que es una tradición local, la mayoría de la población no participa o se opone a la tortura de toros. La feria principal consiste en novilladas convencionales que involucran la tortura y muerte de decenas de toros jóvenes. También hay becerradas nocturnas donde becerros bebés son torturados y asesinados por peñas locales en una mezcla de carnaval y violencia contra los animales.

2. 1. Algemesí.
Haremos referencias a muchas cosas
que hemos podido leer en las redes
sociales sobre Algemesí. La primera
aclaración, aunque parezca innecesaria,
es que Algemesí no es una aldea
perdida en los mapas, es un gran
municipio con varios parques
industriales, una potente agricultura y
casi 30.000 personas habitantes.
También es un error decir que
Algemesí es un pueblo de gente asesina.
La mayoría del pueblo ni
participa ni se siente identificada
con la semana de toros. Es habitual
que la gente se marche de vacaciones
durante esta semana, e incluso salen
varios autobuses de viajes organizados. Muchas personas sienten la tortura taurina como algo
ajeno a su forma de ver la relación de los seres humanos con los otros animales, y no se acerca a la
plaza. Y muchas de la que sí lo hace buscan la fiesta y el alcohol, no la tortura taurina.
Si damos por buenos los datos de Mundotoro, la plaza de Algemesí tiene un aforo de 4.000
localidades. Si fuera así, llena y sin ninguna persona forastera podría acoger alrededor del 15%
de la población. Se debe tener en cuenta que aprovechan que es desmontable para hacerla con
menos o más localidades. Muchos testimonios dicen que ahora, con la crisis, reducen el aforo
dejando más espacio entre las gradas y, así, aspiran a poder colgar el cartel de "lleno".
A pesar de la promoción con dinero público y la televisión, la afición es muy minoritaria. También
en Algemesí.
Por ello, quieren esconder la tortura taurina tras la fiesta y la diversión y, incluso, tras
la cultura. Las fiestas de la Virgen de la Salud de Algemesí se celebran a primeros de septiembre,
antes de la semana de toros. Son un maravilloso espectáculo, declarado Patrimonio Cultural
Inmaterial de la Humanidad desde
2011. Destaca por el baile de las
muixerangues, las torres humanas
que son el origen de las que se
hacen en Cataluña y que se alzan
mientras suena la Muixeranga, un
himno para todo el pueblo
valenciano.
La semana de toros de Algemesí no
tiene nada que ver con esta
maravilla. Cuando se presentó
la candidatura de las fiestas
de la Virgen de la Salud ante
la UNESCO, hubo mucho
cuidado no dejar claro que la
tortura taurina no formaba
parte de ellas. La semana de
toros sólo es patrimonio de la
inhumanidad.
2. La semana de toros.
Otro error muy común es el de pensar que en la semana de toros de Algemesí sólo se hacen
becerradas. El núcleo central de esta semana es una feria de novilladas convencional, como
las que se hacen en cualquier plaza de torturas. La industria de la tortura taurina llama feria a un
programa de muchos días de corridas. Esto se hace en todas las plazas, porque el negocio taurino
Vista aèria d’Algemesí.
Festes de la Mare de Déu de la Salut, a la plaça Major.

3. necesita vender abonos y hacer muchas corridas juntas
para que determinados gastos fijos sean asumibles.
Es de novilladas porque torean novilleros, profesionales
de la tortura que están en el camino de tomar la
alternativa. Estos toreros de segunda categoría
torturan y matan novillos, toros jóvenes de entre
3 y 4 años. Los toreros consagrados matan toros, que
son animales de más de 4 años (ninguno de ellos llega a
cumplir más de 6, por ley1).
Esta feria se realiza con corridas a pie y de
rejoneadores, con picadores. También suelen
incorporar exhibiciones con aprendices de matarife de la
escuela taurina de Valencia, que torturan y matan
erales, novillos pequeños (de 2 años).
La feria de este año, por ejemplo, se ha saldado con la
matanza de 37 novillos y 4 erales, 41 animales en total, en
10 espectáculos de tortura taurina.
Se debe tener en cuenta que el número de animales se ha reducido debido a la crisis. Los años
anteriores contaban con días de dos espectáculos: el de novilladas de tarde combinado con el de
mañana para la gente de la escuela taurina. Además, se mataban 5 animales cada día2.
1 Real Decreto 145/1996, de 2 de febrero, por el que se modifica i da nueva redacción al Reglamento de Espectáculos
Taurinos. Artículo 25. http://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-1996-4945
2 Según el reglamento taurino vigente, si se mataran 6 animales, como es habitual en los espectáculos de tortura taurina,
se tendría que disponer de un toro sobrero, para disponer de una sustitución de otro que otro se enviaran a corrales. Este
animal, que se tendría que de matar después del espectáculo, seria un gasto añadido.
Baix, detall dels “espectacles” de la setmana de bous del 2013. Dalt, el cartell.

4. 3. La plaza i las peñas.
La plaza es el elemento principal de la historia de
la tortura taurina en Algemesí. Es famosa por
ser completamente de madera y cuadrada, ya
que se ajusta a la forma de la plaza Mayor. La
montan y desmontan cada año, según un una
diseño de 1943.
Otra característica de la plaza es que, por la
falta de espacio, deben incorporar las
calles de los alrededores para
equipamientos como los corrales de los
toros. Destaca la calle Muntanya, donde los
caballos de los picadores se cruzan con los de los
tiros que arrastran los animales muertos, por el
medio de la calle ya la vista de todos y todas,
hasta un vehículo tractor del Ayuntamiento que
los levanta con una pala y los lleva al camión
donde se recogen los cuerpos. La cara
desencajada del toro cubierto de sangre es otro
espectáculo impuesto a la gente que ama a los
animales.
Una cuestión muy importante es que, en
realidad, el diseño de la plaza está pensado para
formar módulos independientes unos de otros,
secciones que se llaman cadafals (catafalcos).
Cada uno con su grada y, debajo, un espacio por
donde se pueden mover los miembros de las
peñas y las cuadrillas de toreros. La forma de la
plaza hace que Tengan diferentes prestaciones y
calidades: unos son muy grandes y otros muy
pequeños, unos son de sombra y otros de sol...
Es así porque esta feria taurina siempre se ha
organizado en torno a las peñas cadafaleras.
En muchos sentidos son como las peñas taurinas
que hay en muchos pueblos del País Valenciano,
volcadas en la organización de esa otra forma
autóctona de linchamiento de animales que son
los bous al carrer (toros en la calle).
Y, en otros sentidos, tienen similitudes con las
fallas, las comparsas de carnaval o, simplemente,
las peñas festeras que durante todo el año
preparan fiesta mayor, fiesta que la gente identifica con la excepcionalidad de un tiempo de
diversión sin límites, de espectáculos, conciertos, casetas de feria, paellas, alcohol...
Desde este punto de vista, las bases para una fiesta sin tortura siempre han existido.
Estas peñas tienen como función la gestión, cada una por su lado, de un cadafal de la
plaza. Implica participar en el montaje y desmontaje de la plaza y, sobre todo, asumir la venta de
entradas para sus cadafales, incluso "compitiendo" entre ellas en precios de entradas y abonos,
ofreciendo prestaciones adicionales como el acceso a las casetas que se montan en el parque
Salvador Castell, donde se organizan comidas y cenas y donde se vende bebida.
Todo comienza con la subasta de los cadafales del mes de marzo. Se podría decir que, para
cada peña, el cadafal "es su falla". Entran en la subasta en función de sus capacidades y
aspiraciones y, en función de estos condicionantes, planifican conseguir un cadafal mejor o peor.

5. Cada peña paga el precio alcanzado en la subasta y asume todo el riesgo que supone vender las
entradas y recuperar lo que han pagado.
La Comisión Taurina, formada por el conjunto de peñas cadafaleras, gestiona la semana de
toros con la recaudación de la subasta como presupuesto (en teoría). La subasta comienza con
precios de partida que la competencia entre peñas debería hacer subir, pero la crisis ha hecho que
tanto estos precios de partida como la recaudación final esté en caída libre desde hace años y
que aumente el número de cadafales que quedan desiertos. Este año ya han llegado a cuatro
y , en un hecho inédito, el PP de Algemesí se ha quedado uno.
Aquí tenemos una de las muchas
formas de inyectar financiación
pública a la tortura taurina, tan
difíciles de controlar. Dicen que la
semana de toros se autofinancia, pero
este año ha recibido dinero
directamente de un partido político,
que no es una peña cadafalera y que
se financia en gran parte de fondos
públicos. Deben añadirse muchos
otras gastos como el despliegue de
policía local y otros trabajadores y
trabajadoras, la limpieza y el uso de
maquinaria y equipamientos
públicos...
4. Las becerradas cadafaleras.
La parafernalia.
Dicen que las becerradas derivan de
los inicios de la semana de toros de Algemesí, que mucha gente probaba suerte ante los
cazatalentos y mostraba sus habilidades taurinas con los becerros, por si se les abría la posibilidad
de dejar el hambre atrás como matadores de toros. El terrible espectáculo de ahora está muy lejos
de ese relato, y por eso lo dotan de toda esta elaborada cobertura festiva que ayuda a la
digestión de la masacre, que adoctrina, que normaliza...
Se debe tener claro que dejan las becerradas fuera de la feria taurina oficial. Como suele
ocurrir con los más terribles espectáculos de tortura animal, la ocultación es casi una
obsesión: los quieren como algo que no debe trascender, que no debe salir del reducido círculo de
la gente que los perpetra, de la que participa como espectadora, de la que los consiente y de la que
mira hacia otro lado. La gente de otros pueblos y ciudades no entiende y no debe saber. Incluso
cuando estalla la polémica, la obsesión continúa: la Comisión Taurina no permite que se graben las
becerradas porque se manipulan para dar mala imagen de Algemesí.
Se hacen de noche, combinadas con otros espectáculos populares como conciertos y
desfiles, y con nuevas formas de tortura taurina que se van incorporando, como una
Esquema dels cadafals de la plaça de bous d’Algemesí.
Cartell d’espectacles nocturns del 2013. Les becerrades cadafaleres es feren el dilluns 23 i el
dijous 26 de setembre.

6. imitación de los encierro del Sanfermín de Pamplona, una gincana con vaquillas como las del
programa de televisión Grand Prix e, incluso, encierros y festivales infantiles.
Se quieren dotar de las herramientas más efectivas para incorporar los niños y niñas a la
insensibilización frente al sufrimiento. La insensibilización, la normalización de lo que
deben ver después, es un el elemento esencial para su éxito.
Las protagonistas vuelven a ser las peñas con cadafales en la plaza. Aunque parezca mentira, las
becerradas comienzan como un festival carnavalesco donde, básicamente, los hombres más
jóvenes de las peñas perpetran una "coreografía". Es un ritual supuestamente divertido y muy
repetitivo con otra obsesión: el travestismo con ropa de mujer (minifaldas, sujetadores, medias de
rejilla, pelucas...). La gracia de los "bailes" sólo está en ver a gente que conoces haciendo aquello
como si no le diera vergüenza, muy a menudo,
gracias a la ayuda del alcohol.
5. La terrible transición a la oscuridad.
La hacen esas mismas personas con esos
mismas disfraces, como si no se produjese
ninguna ruptura. Y matan becerros. De 4 a 7
cada una de las dos noches de becerradas, en
función de las peñas cadafaleras dispuestas a
hacerlo.
Los becerros son sólo crías, más pequeñas que
los erales. No tienen más de un año, puede que
ni siquiera lo hayan cumplido, y son muy
miedosos. El miedo hace que les cueste moverse
del sitio, que busquen constantemente la
protección de las barreras de la plaza, que se
queden inmovilizados ante los cadafaleros que
van cara a ellos con banderillas o con el estoque
de matar. Si se defienden y llegan a coger a un
ser humano adulto y de 70kg, suelen caer al
suelo a la vez que esa persona y, a menudo,
antes. Su sufrimiento es difícil de explicar
con palabras.
La "cuadrilla de aficionados" no tiene
ninguna experiencia. Este año, la Comisión
Taurina ha proclamado a los cuatro vientos que
han hecho un cursillo de formación de un mes
con personas expertas. Lo que esto pueda
significar debe compararse con la "formación"
en las escuelas taurinas, las largas carreras
acumulando muerte a las espaldas hasta la
alternativa y, a pesar de todo , las eternas
agonías que sufren muchos toros a manos de los
toreros consagrados3.
Y la falta de experiencia se suman a los
efectos del alcohol. La Comisión Taurina
también ha dicho que no iba a permitir la
participación de cadafaleros borrachos. No
sabemos si acabará incorporando el uso de los
alcoholímetros, lo que dudamos, pero lo que es
3 Antes de tomar la alternativa en una corrida de toros, un torero tiene que acreditar un mínimo de 25 novilladas con
picadores. Previamente, habría conseguido la categoría de novillero con picadores acreditando 10 novilladas sin
picadores. I, para dar este primer paso, tendrá que acreditar su formación y conocimientos, avalada por una persona
profesional o ganadera. Si lo hace como alumno de una escuela taurina, tendrá que contar con un certificado de la
dirección de la escuela que reconozca que ha trabajado con aprovechamiento por un periodo, como mínimo, de un año.
Reglamento de espectáculos taurinos, Capítulo I (registro general de persones profesionales taurinas).
Vedells.

7. seguro es que este año, fuera de la plaza, mientras esperaban a su actuación, todas y todos vimos
muchos cubatas en las manos los cadafaleros.
Esta gente se acerca con tanta prevención al animal, para guardar las distancias y no perder la vista
del camino de fuga , que clava las banderillas en cualquier parte del cuerpo del becerro
mientras éste grita y llora desconsoladamente. Cerca de la cabeza, del culo, por los costados, los
muslos... Es prácticamente imposible que aciertan a matar a la primera, y pinchan al
animal una y otra vez. Las terribles imágenes que se han podido conseguir muestran becerros con
el estoque clavado, con un agujero de entrada y otro de salida que sólo les puede provocar un
enorme sufrimiento, nunca la muerte. Algunos testimonios, horrorizados, han visto hasta 14
pinchazos, 14 intentos de matar antes de que el becerro cayera destrozado en el suelo.
6. La Folgança – Iniciativa Animalista d’Algemesí.
La Folgança d’Algemesí nació hace más de 15 años como una propuesta alternativa de la gente
joven que, desde el principio, puso en marcha una forma de hacer fiesta autogestionada,
participativa y sin tortura animal. No tenía como motor la lucha por los derechos de los animales ,
pero nunca se manchó con la sangre de la plaza de toros.
La gente de Algemesí que impulsó el movimiento animalista del pueblo surgió de esta Folgança.
Era gente concienciada que, en 2006, organizó la primera manifestación antitaurina de
Algemesí que, este año, ha llegado a su 8ª convocatoria. Este movimiento ha
evolucionado, ha incorporado cada vez más gente y, finalmente, se ha integrado en Iniciativa
Animalista como agrupación local.
Otro error es equiparar las becerradas cafaleras con el Toro de la Vega. Si se puede
decir que alguna forma de tortura taurina es más terrible que el Toro de la Vega, quizás sean las
becerradas cadafaleras de Algemesí por el número y la edad de las víctimas, por la forma como se
las tortura y mata y porque sufren junto a 50 toros más.
Equiparar Algemesí con Tordesillas es una gran equivocación porque, desgraciadamente,
la gente animalista de Tordesillas todavía no ha podido generar una respuesta propia al Toro de la
Vega, como la que se ha generado en Algemesí y por gente de Algemesí.
Pensamos que iniciativas como la ocupación organizada desde fuera de Algemesí debería tener en
cuenta todas estas cuestiones. No se puede ocupar una plaza de toros cerrada a cal y canto, sólo se
podría saltar a la arena para hacer una acción de protesta para la concienciación contra la tortura
taurina y para retrasar el momento en que comience, como en cualquier otra plaza.
También pensamos que tiene más sentido exportar hacia Tordesillas la experiencia de
Algemesí. Estamos a disposición de la buena gente de Tordesillas que, como nosotras y nosotros,
aman a su pueblo y lo quieren libre de barbarie.
También estamos a disposición de toda la gente que queráis venir a Algemesí a luchar
contra la tortura taurina y , especialmente, contra las becerradas cadafaleras. Os recibiremos

8. con los brazos abiertos y con todo el agradecimiento del mundo. Sólo os pedimos que vengáis
sabiendo dónde venís y que es lo que tenéis en frente, y que busquéis la gente que lleva muchos
años generando conciencia para que la voz del pueblo se pueda levantar contra las becerradas.
7. A pie de calle, los 365 días del año, por la consulta ciutadana.
La Folgança continuará trabajando por la abolición de las becerradas cadafaleras, el primer gran
paso que se debe dar. Hablaremos con todo el mundo, participaremos en debates y conferencias y
trabajaremos para añadir cada vez más voces a la demanda de una consulta ciudadana popular
al pueblo de Algemesí sobre las becerradas cadafaleras.
Queremos que los algemesinenses y algemesinensas puedan expresar si quieren que su pueblo siga
siendo conocido como el lugar donde, cada año, se comete la barbarie de las becerradas
cadafaleras, o si quieren que esta terrible práctica pase a la historia y Algemesí sea la tierra de la
Muixeranga , patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad.
Mientras se empeñan en que cada final de septiembre haya una semana que haga de Algemesí un
punto negro del mapa, la Folgança–Iniciativa Animalista convocará la manifestación antitaurina
que servirá para hacer cada vez más grande el Algemesí de verdad.
Os esperamos a todas y todos. Muchas gracias .