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Agosto
PRINCIPIO EXCELENCIA
Dios ha hecho a sus hijos con la capacidad de desarrollar competencia
en todos los campos donde se desenvuelvan.
Excelencia se define como “superior calidad o bondad que hace digna de aprecio y
estima una cosa o a una persona.” Esta definición me hace recordar la vida de un joven
cuya familia quizás fue muerta por los caldeos, llevado cautivo a Babilonia, puesto en el
palacio del rey que mandó a destruir su pueblo y familia, pero a quien sirvió con corazón
puro y una actitud intachable y más que digna de imitar, y cuyo espíritu es reconocido en
la Biblia como superior al de los demás de su misma condición. ¿De quién hablamos? De
Daniel, quien demostró la casta de campeón, de obediente, sujeto a Dios y respetuoso de
las normas y leyes, y quien no tiene un pasado muy alegre, y ha podido convertirse en un
rebelde y renegado hebreo, pero decidió labrarse otro camino a través de su dependencia
de Dios (Pero Daniel mismo era superior a estos sátrapas y gobernadores, porque había en
él un espíritu superior; y el rey pensó en ponerlo sobre todo el reino. Daniel 6.3)
No suele ser tan fácil hablar de excelencia con base en la Palabra de Dios, quizás porque se
ha abordado mucho el tema desde lo secular, o porque enseñándola desde los pulpitos
cristianos se ha tratado de formas erradas, o confusas. Sin embargo, según la Biblia y el
plan creador de nuestro Padre Eterno, debería tratarse de forma clara, sencilla y sin
prestarse a confusiones.
Y es que la excelencia, tratada desde el punto de vista de que hemos sido creados por Dios
a su imagen y semejanza, y que dentro de sus planes y agendas hemos sido incluidos para
reflejar de su gloria, grandeza y amor, podemos entender, que para ello recibimos una
unción, dones, talentos y capacidades especiales que deben provocar placer a ese Padre
generoso en proveernos de sus regalos.
No se trata entonces de abordar la excelencia únicamente desde enfoques seculares o
solamente desde el ámbito cristiano y espiritual, sino que debería abarcar todo en
nuestras vidas, y eso incluye, por supuesto, aquello en lo cual el Señor nos permite
participar. No solo Daniel es excelente ejemplo de la excelencia, sino que también
podemos hablar de José, y es que vemos que este joven rechazado por sus propios
hermanos llegó a convertirse en un imán de éxito a cualquier lugar que llegase, y no solo
debemos recordar la casa de Potifar (prospera con la administración de José) y el palacio
MEMORIZAR
no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de
nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios,
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el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la
letra, sino del espíritu; porque la letra mata, más el espíritu vivifica.
2 CORINTIOS 3:5-6

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de Faraón que sobrevivió a la terrible sequía por sus instrucciones y consejos sabios, sino
también que en el escenario de la cárcel, donde estuvo injustamente, no se dedicó a
quejarse y reclamar justicia o pelear con su Dios por permitir algo así, sino que también
dejó brotar lo mejor de él para traer orden en ese espacio tan complejo, hacerse notar, y
volverse deseado para los jefes y guardias carcelarios.
¿Cómo seguir un ejemplo tan evidente en
excelencia como el de José? Quizás la
respuesta esté en él mismo, y es que antes
de todo lo descrito anteriormente, lo que
encontramos en la Palabra es un deseo de
agradar a su padre, de ser obediente y de
hacer las cosas correctamente. ¿Qué le hizo
ganar todo eso? Pues la respuesta es obvia y
de seguro ya la sabes: rechazos, envidias,
ira. Para sus hermanos, el deseo de José y su
actitud de agradar a su papá eran vistos con
malos ojos y llegaron a ser motivos para planear su desaparición. En el ámbito juvenil y
escolar también se puede evidenciar que el deseo de algunos de ser obedientes, sujetos y
hacer las cosas bien, en ocasiones, es visto por algunos compañeros con malos ojos. Unos
pueden llegar a perseverar, pero lamentablemente otros deciden abandonar su buena
actitud y copiar malos ejemplos.
Luego observamos que en cualquier ambiente donde es enviado, sea por ser vendido
como esclavo, enviado injustamente como preso, o puesto en alto por su sabiduría y
capacidad de interpretar sueños, vemos una misma actitud: quiero dar lo mejor. Parece
que ese fuese un slogan de vida de José.
Piensa por un momento, ¿Cuál sería tu slogan de vida hasta ahora?
Pero incluso, antes de emprender todas estas pruebas, que no eran más que las escuelas
permitidas por Dios para llevarle a lugares altos, José hace algo, o más bien, recibe algo.
¿Qué crees que fue? Recuerda que contó a sus hermanos y padres imágenes donde él era
reverenciado y honrado por todos ellos. La respuesta es: SUEÑOS. José supo soñar. ¿Por
qué digo que supo soñar si los sueños los recibe de Dios? Porque no basta con recibir algo
de parte de Dios, sino que puede mucho más valioso lo que se hace con ello. Este joven
bonachón, obediente y sumiso supo atesorar los sueños de Dios y parece que él se deleita
soñando con esos sueños, los piensa, medita, y por extraños o impropios que pareciesen a
su familia, José no permite que se esfumen o mueran.
Su primera victoria es guardar esos sueños, volverlos motor de sus pensamientos e hilos
de su destino de gloria. Aquí quiero que honestamente te confrontes tú mismo y trates de
corregir algo si es necesario hacerlo, y es que suele ser muy común escuchar jóvenes
diciendo que su sueño es ser un gran futbolista, otros quieren ser grandes ministros de

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Dios, destacados profesionales, o quieren ser muy buenos estudiantes… PERO. Oh sí,
aparecen los peros… aquellos que José no se permitió en su vida (ni siquiera en los
momentos más injustos y dolorosos). Esos peros expertos en matar sueños y por supuesto
derrotar la buena actitud, la obediencia y el esfuerzo. Peros como: “eso de ser un gran
futbolista es muy duro y con muchas roscas”, “no tengo lo suficiente”, “la vida es muy
injusta conmigo”, “eso de creer en Dios y confiar en él es puro cuento, no sirve de nada”,
“en mi familia nadie ha hecho cosas grandes”, “ni mis padres creen que yo llegue a algo
grande”, “siempre me ponen a hacer cosas menores y sin mucha importancia, eso no es
conmigo”… y la lista puede continuar inundando hojas enteras de pesimismo del mismo
infierno.
Te pregunto, ¿cuáles de esos peros no enfrentó José? La respuesta sería: ninguno. ¿Cuáles has
enfrentado tú? O, mejor dicho, ¿Cuáles has vencido o estás venciendo? Y es que no se trata de
estar libre de ataques e injusticias, sino de saber usarlas como escalones para alcanzar lo que Dios
quiere que alcances y conquistes para su gloria. La acción de este solo hombre llamado José, su
buena actitud, su esfuerzo y disciplina garantizó la supervivencia de todo un pueblo y le llevó al
lugar donde serían multiplicados, a pesar de que luego quedasen como esclavos.
Lee y considera este hermoso pasaje que encontramos en 1 Corintios 10:31 “Si, pues, coméis o
bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.” Hasta impresiona que no
haga referencia a actividades eclesiásticas o de orden ministerial como predicar, enseñar
la Palabra, orar, interpretar instrumentos para la alabanza o similares, sino que dice que
hasta para sentarse a la mesa y comer, deberíamos pensar en dar gloria a Dios. Podríamos
decir también que cuando hacemos una tarea debemos hacerlo como para darle gloria a
Dios; cuando arreglas tu cuarto lo debes hacer de tal forma que Dios sea honrado, etc.
RECOMENDACIONES PARA DESARROLLAR EXCELENCIA
 Cuida los detalles más de lo que otros consideren*
 Arriesga más de lo que otros consideren seguro*
 Sueña y no dejes de soñar aunque te llamen cursi o iluso*
 Escribe los sueños, planea sobre cómo cumplirlos.
 Esfuérzate en hacer lo humano y propio en tus fuerzas y déjale a Dios lo sobrenatural.
 Todo lo que hagas ten presente hacerlo como para dar gloria a Dios (1 Cor. 10:31)
 Se agradecido pero no cultives cultura de conformismo (o dejadez)
CARACTERÍSTICAS DE PERSONAS DE EXCELENCIA
 Llenura del Espíritu de Dios*
 Sabiduría*
 Inteligencia*
 Trabajo en Equipo*
 Creatividad*
 Solución de Problemas*
 Mentoría*
 Ejecución*

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*ACSI Cultura Cristiana de Excelencia, Estuardo Salazar Gini
ENEMIGOS DE LA EXCELENCIA
 La impaciencia (Éxodo 32)*
 La cultura de mediocridad*
 La procrastinación*
 La mentalidad de “no se puede”*
La palabra procrastinación puede parecer extraña, pero su
definición no lo es; mirémosla: La procastinación o
procrastinación, consiste en aplazar el cumplimiento de
una obligación o el desarrollo de una acción. Cuando dicha
actitud se vuelve habitual, la procastinación se convierte en un trastorno del
comportamiento que puede llegar a requerir atención psicológica.
Las personas pueden procrastinar sus tareas en diferentes ámbitos. En el caso de un niño,
la procastinación puede aparecer cuando decide quedarse frente a la computadora o al
televisor en lugar de completar la tarea escolar que debe entregar, por citar una
posibilidad. El pequeño no asume la responsabilidad, sino que la aplaza y reemplaza la
realización de los deberes por otra actividad.
Los adultos pueden desarrollar procastinación cuando demoran una visita al médico o
cuando nunca se deciden a ordenar la casa. La clave de la procastinación está en el
reemplazo de una actividad que necesita de atención por otra que resulta más placentera.
La actividad elegida tiene menor importancia, aunque es más agradable. De este modo, se
pospone lo importante y se privilegia algo diferente.
Lee el material titulado “Descubre 7 hábitos que te llevarán a la excelencia” en el siguiente link:
https://novicap.com/blog/como-llegar-excelencia-habitos/
Entrega semana del 21 al 24 de Agosto
1. Resume la vida de José según la lectura anterior y tu propia lectura de su historia en el
libro de Génesis y enumera tres aspectos claves de la excelencia en su vida.
2. ¿Qué sueños especiales tienes para tu vida? Realiza un listado de tus habilidades e intenta
relacionar este listado con los sueños.
3. ¿Qué deberías hacer para llegar a alcanzar esos sueños?
4. ¿Lo estás haciendo desde ya?
5. ¿Cuál es tu slogan de vida con relación al principio excelencia hasta este momento?
6. ¿Cuántos y cuáles PEROS has detectado o has enfrentado o enfrentas hasta ahora para el
cumplimiento de esos sueños?
Procrasti
qué?
PROYECTO