ACRÓNIMO DE PARÍS PARA SU OLIMPIADA 2024. Por JAVIER SOLIS NOYOLA
Rna
1. RNA
…Y pensar que mis sentimientos no podrían surgir , y menos por alguien como ella…
Hace unas semanas atrás solo podía verme como alguien que no debió haber nacido,
debido a las dificultades que viví desde mi infancia hasta lo que soy ahora, el odio y
rencor se apoderaron de mí, hasta el punto que odié mi propia existencia, aunque eso
es lo que menos importa ahora.
Sorprendente la llegada de la revolución de las máquinas, solo podía sonreír porque
ahora existía algo con mayor inteligencia que el hombre. Mi vida era un fiasco, con
solo recordar que podía mover solo la mitad de mi cuerpo me hacía destrozar por
dentro, mis lágrimas nunca compensaron el dolor que sentía dentro de mí.
Decidí servir como experimento para la neurología, con el deseo de morir sin sentir
dolor físico, al final serviría de algo para los mediocres que estarían en la tierra, bueno,
antes de que hiciera de esta tierra un desastre.
Instalaron en mi un sistema de RNA o Redes Neuronales Artificiales, que normalmente
antes se utilizaba con máquinas antiguas, era la primera vez que se instalaba en un
hombre, además de la mitad izquierda de mi cuerpo de metal si el intento funcionaba,
(para poder mover ese lado gracias al RNA), lo que no sabían era que estaban
ocasionando su propia destrucción, estúpidos seres que lograron dejarme con vida.
El proyecto fue un éxito, aun dormido podía escuchar sus gritos de alegría celebrando
una nueva meta, ingenuos, si solo hubiesen pensado un poco más, hoy no estarían en
este lio.
Mi despertar fue inesperado, porque no pensaba hacerlo, me costaba ver gracias a la
luz que entraba al cuarto, lleno de flores y globos como si fuera alguien especial,
¡Espera¡, para ellos lo era, el primer hombre mecánico, ese era yo. No podía reconocer
mis nuevas extremidades, pero funcionaba, lograba mover lo que antes no, era más ligero
de lo que pensaba, las lágrimas brotaban de mí, pero me extrañó que no eran de dolor,
logre sentir felicidad por un momento, ¿será que la vida me daba otra oportunidad de
florecer o solo duraría un rato?, esas preguntas llegaban a mi aun en medio de la
alegría, no lo entendía pero no me importó, solo estaba impaciente por salir de ese
cuarto.
2. El día que salí, una gran ola de periodistas me bloqueó, con tantas palabras al rededor
y tantas personas cerca me asfixiaba, hice un esfuerzo para correr y alejarme de ellos,
sin pensar que fue la primera vez que forcé este cuerpo semimetálico. El RNA funcionaba
de esta manera; servía como neuro-conductor, enviando la información del cerebro al
cuerpo mecánico, como una neurona más del cuerpo, pero solo funcionaba con el metal,
pudiendo así mover esa partes del cuerpo que antes no podía.
Ya hace una semana que estrené este cuerpo, ocurrió algo extraño, una de las máquinas
de mi hogar, que tenía como función cocinar, y muy bien que lo hacía, comenzó a
presentar fallas, bueno eso pensaba, solo pensaba en cómo podía arreglarle, en cuanto
fui a ponerle la mano encima, casualmente use la izquierda, mi compañero robótico
ejerció el mismo movimiento, quede sorprendido, mientras seguía comprobando que en
verdad sucedía, y si era real, el robot respondía a todos mis movimientos, no solo con
moverme, sino con mi pensamiento.
Ya después de unos días haber descubierto esta habilidad, pensé que todo en mi vida
cambiaria, pues parecía no importarme ese odio que aún estaba dentro de mí, hasta que
brotó. La verdad no recuerdo mucho lo sucedido, pero mi ira se incendió contra el
mundo y ahora con esta habilidad nadie podría detenerme.
Comenzó la destrucción, ese era mi plan, comenzar una nueva raza, que tonto ¿no?,
pensar que haría algo nuevo fue una torpe idea, solo me guie por mi odio. Ya con
media tierra destruida ahora pude entender que estaba equivocado, y todo gracias a una
niña de 6 años que abrió mis ojos y me hizo detenerme, no pude seguir al escuchar
su llanto en medio de sonidos de guerra entre mis compañeros metálicos y los seres
que son de mi raza, mi mente me hizo pensar que ya no era humano, fue engañado
por mis pensamientos.
Y pensar que mis sentimientos no podrían surgir , y menos por alguien como ella, era
una simple niña, tierna y sin culpa, ¿Cómo detengo esta guerra ahora?, ¿Qué es esto?
¿Son lagrimas?, pero, ¿De culpa?, mi odio cambio de sentido, no logre ver esas
dificultades que antes viví como una escuela para el futuro sino como una carga que
no quise soltar, y pensar que ya no era humano.
Solo hay una forma de terminar con todo esto, y es mi última orden a las máquinas…
Destruirme.