La ruta para llegar a la gestión de la información del ciclo de vida incluye tres pasos principales: 1) identificar los datos y documentos relevantes para cada etapa del ciclo de vida del producto, 2) desarrollar un sistema para almacenar y recuperar esta información a lo largo del tiempo, y 3) establecer procesos para asegurar que la información se actualice y comparta entre los departamentos a medida que el producto progresa a través de las diferentes etapas.