Marco conceptual para la información financiera.pdf
Analisis del comportamiento de los precios
1. UNIVERSIDAD ECCI.
JUAN JOSE ALVARADO.
FUNDAMENTOS DE ECONOMIA.
ANALISIS DEL COMPORTAMIENTO DE LOS PRECIOS
(2000-2016).
2017.
2. Para la construcción de este Índice se estableció una canasta representativa del
consumo final de los hogares, con ponderaciones fijas para cada grupo y subgrupo
que la componen. Por lo tanto, la variación del índice depende del crecimiento
porcentual del precio del bien dentro de la canasta, multiplicada por su ponderación
dentro del índice.
El período base para el cálculo del IPC es diciembre de 1998 y la información se
obtiene en las principales trece capitales de departamento.
Los grupos de gasto que conforman el IPC y su ponderación dentro del mismo son
las siguientes: Alimentos (29.51 por ciento), Vivienda (29.41 por ciento), Transporte
(13.49 por ciento), Gastos Varios (7.89 por ciento), Vestuario (7.31 por ciento),
Educación (4.81 por ciento), Salud (3.96 por ciento), Cultura (3.60 por ciento).
3. En los últimos meses se ha observado una tendencia decreciente en la inflación
anual al consumidor, la cual pasó de 7.85 por ciento en abril a 7.11 por ciento en
septiembre, explicada principalmente por la caída en la inflación anual del grupo
de alimentos, el cual se redujo de 10.76 por ciento en abril a 6.52 por ciento en
septiembre.
Otros grupos de menor ponderación dentro de la IPC también han registrado una
tendencia decreciente en el mismo período, como salud, educación, y otros gastos,
que en conjunto representan el 12.7 por ciento de la inflación total.
La reducción en estos grupos ha sido suficiente para contrarrestar el crecimiento
de otros rubros como vivienda, transporte, vestuario y cultura, que representan el
45.14 por ciento del IPC.
4. Dado el comportamiento reciente de la inflación y la corrección observada en
ciertos grupos de gasto como los alimentos, se espera una reducción adicional
en lo que resta de 2003.
El Índice de Precios al Productor (IPP) mide las variaciones de los precios en la
primera etapa de comercialización (insumos), utilizando una canasta de bienes
representativos de la oferta total de la economía. Por lo tanto, se tiene en
cuenta el precio de fábrica si se trata de un bien producido en el país, y el de la
primera venta en el país si es un bien importado.
El IPP como se conoce hoy es calculado desde 1990 por el Banco de la
República y se puede desagregar de acuerdo con tres clasificaciones: por
actividad económica, por uso o destino económico y por su origen.
5. Por actividad económica, los grupos del IPP son: a) agricultura y ganadería, b)
explotación de minas y canteras, y c) industria manufacturera. En el último año, el
IPP se ha incrementado en 6.87 por ciento. El grupo de industria ha contribuido con
el 87 por ciento de esta variación, seguido por agricultura (11 por ciento) y
minerales (2 por ciento).
De acuerdo al uso o destino económico, los componentes del IPP son: a) bienes
finales ofrecidos internamente (con una variación anual de 6.31 por ciento en
septiembre), que a su vez está compuesto por bienes de capital, materiales de
construcción y consumo final, y b) IPP de consumo intermedio (incremento de 7.61
por ciento anual).
Finalmente, el IPP calculado por el origen se calcula como un promedio ponderado
del IPP de bienes importados, el cual creció 7.99 por ciento anual en septiembre, y
el IPP de bienes producidos y consumidos en el país (6.49 por ciento).
6. Desde abril del presente año se ha observado una tendencia decreciente en el IPP
anual, explicada principalmente por la reducción en el precio del componente
importado de los insumos adquiridos por los productores nacionales. En abril de 2003
este grupo registraba un crecimiento anual de 21.85 por ciento, mientras en
septiembre de 2003, dicha variación se redujo a 7.99 por ciento.
De acuerdo con la clasificación por destino económico, el IPP de la industria
manufacturera registró en abril de 2003 un crecimiento anual de 11.82 por ciento,
mientras en septiembre se ubicó en 7.71 por ciento.
Esta disminución refleja la tendencia decreciente de los precios al productor en los
últimos meses, lo cual se explica por la revaluación de la tasa de cambio en dicho
período.
7. Uno de los factores determinantes en la formación de los precios y la liquidez de
los títulos de renta fija es la confianza que tengan los inversionistas en el emisor.
En el caso de los bonos soberanos, la confianza estará determinada por aspectos
como el desempeño macroeconómico del país, la sostenibilidad fiscal y eventos
políticos relevantes. La evolución de los factores mencionados incrementa o
disminuye la disposición de los inversionistas a comprar estos títulos, razón por
la cual los TES y los bonos soberanos de deuda externa tienen un movimiento
similar.
En los últimos meses se ha observado una mejor percepción de riesgo de los
inversionistas internacionales sobre la economía colombiana, sustentada en la
aprobación de reformas económicas estructurales a finales de 2002 y en un
mejor desempeño macroeconómico del país.
8. Esta mejor percepción se ha traducido en una reducción de los spreads de deuda
externa. El Embi + Colombia, calculado por JP Morgan, que mide el spread promedio de
los bonos más líquidos de deuda externa, se ha reducido en 160 puntos en lo corrido
del presente año. Por su parte en el mercado de deuda interna, la confianza de los
agentes se ha visto reflejada en un incremento en los precios de los TES.
El Indice de Deuda Pública IDP Corfivalle, que describe la evolución de los precios de los
TES más líquidos del mercado, ha tenido en lo corrido de 2003 un incremento de 11.76
por ciento.
En conclusión, se observa una mejor percepción de riesgo del país tanto en el mercado
interno como externo, lo cual ha llevado a incrementos en los precios de los títulos de
deuda colombianos. En lo corrido del año, el coeficiente de correlación entre el Embi +
Colombia y el IDP Corfivalle es de - 0.86, lo cual demuestra que estas dos variables
están altamente correlacionadas entre si.
11. son muy preocupantes los datos del Dane sobre el PIB del primer trimestre, no solo
porque la tasa de crecimiento anual de 2,5 por ciento es la más baja desde la crisis
financiera del 2008, sino porque todos los componentes de la demanda crecen todavía
menos, señalando un gran debilitamiento de los motores de la economía.
En efecto, el total de la demanda interna solo crece 1,3 por ciento, y es positivo solo
porque el consumo de los hogares mantiene algún impulso al crecer 3,5 por ciento, pues
el consumo del Gobierno solo se incrementa 1,6 por ciento y la inversión pública y privada
cae (¡sí, disminuye!) 4,8 por ciento.
12. En todos los años de este siglo, con excepción del 2009, la demanda interna creció
más que el PIB, ya que el gran aumento de las importaciones por la apertura hacia
adentro era un freno al crecimiento. Este año, el PIB, es decir la producción nacional,
aumenta más que las compras internas por el impulso que le está dando a la
economía la devaluación del peso, que incrementa la demanda externa neta por dos
vías: la sustitución de importaciones y el estímulo a las exportaciones.
A pesar de la caída de los precios del petróleo, las ventas al exterior están creciendo
más que la demanda interna (2,1 por ciento), y, por primera vez en mucho años, las
importaciones disminuyen 1,5 por ciento. Esto significa que los consumidores y el
Gobierno han reducido el gasto en bienes importados y lo han aumentado en bienes
nacionales.
13. No pinta bien el resto del año. Será difícil llegar al 3 por ciento esperado por el
gobierno, pues el aumento de tasas de interés del Banco de la República y el
recorte de gasto público, por el déficit fiscal, van a frenar la demanda interna, y
no se espera más devaluación acelerada que mejore la demanda externa.