Una vez que sabes lo que es la resiliencia, se te plantea un nuevo reto: ¿Cómo potenciarla? No hay truco, para desarrollarla correctamente sólamente has de tomar perspectiva de lo sucedido, tener una actitud proactiva, y hacerte con todo aquello que posees y puede serte de gran ayuda en esta nueva etapa: tus fortalezas.