2. CONVIVENCIA
• Los estudiosos e investigadores han
comprobado desde la psicología a la fisiología,
desde la sociología a la medicina, que la
convivencia es uno de los factores más
trascendentes no sólo para el bienestar y la
felicidad, sino para el sostenimiento de la
salud total. Los enfoques psicosomáticos y
holísticos no tienen sobre esto ninguna duda.
3. Convivencia
• La convivencia es una forma de relacionarnos , que debemos escoger
desde muy jóvenes. Para la convivencia positiva es necesario el respeto, el
amor, el perdón, entre otros, debemos tolerar las costumbres de otras
personas para tener una mejor convivencia en la vida humana
• El ser humano tiene dos necesidades sociales básicas: la necesidad de una
relación íntima y estrecha con un padre o un cónyuge y la necesidad de
sentirse parte de una comunidad cercana e interesada por él. Los seres
humanos son fundamentalmente grupales y su bienestar es mucho mayor
cuando éste se encuentra en un ambiente armónico, en el cual se vive en
estrecha comunión.
• Para la convivencia es indispensable la independencia y la autoconfianza,
pero en el discurrir de la vida no puede prescindirse del apoyo y de la
compañía de los otros.
• Como señalan ciertos exponentes del existencialismo no puede haber un
"yo", sin un "tú". Esta interdependencia social es mucho más que un
abstracto concepto filosófico, constituye una necesidad humana
fundamental.
4. Amistad
• Para sentirse feliz, el ser humano necesita amigos. Sin ellos,
puede caerse fácilmente en la apatía, en la inactividad o en
la depresión crónica. Esto explica los estrechos vínculos
entre el suicidio y la alienación social, demostrados por
primera vez por el sociólogo francés Émile Durkheim en su
clásico libro El suicidio, publicado en 1897.
• Durkheim, analizó todos los factores que podían llevar a
una persona a quitarse la vida –tales como enfermedades,
pérdidas personales y dificultades económicas– pero
concluyó que el determinante principal era lo que describió
como “cohesión social”. Las personas que se sentían parte
de un grupo estrechamente unido tenían menor
probabilidad de cometer intentos de suicidio que quienes
estaban más aislados.
5. Conexión social
• El efecto terapéutico de la conexión social sobre el individuo se ha confirmado
mediante diversos estudios, en especial el que fuera realizado a lo largo de nueve
años entre 100000 residentes de Alameda County en California.
• Este estudio tenía la finalidad de identificar los factores tanto físicos como
psicosociales que otorgan protección contra las enfermedades y la muerte
prematura. Además de evaluar la importancia de factores de riesgo reconocidos
como fumar, la falta de ejercicio y la obesidad, los investigadores también
estudiaron la importancia de cuatro factores psicosociales: estado civil, redes de
amistades, pertenencia a una iglesia y participación en organizaciones
comunitarias.
• Cada uno de ellos resultó ser un importante determinante de la salud. Tanto que
los individuos no casados que tenían pocos amigos y no estaban vinculados con
una iglesia o un grupo comunitario tenían una tasa de mortalidad por todas las
causas que era entre dos y cinco veces superior a la de aquellos que tenían una
red bien desarrollada de amistades y relaciones con Nicaury.
• Es un ser psicológico que manifiesta emociones, sentimientos, afectos,
pensamientos, actitudes, deseos, metas, temores, esperanza, temperamento y
carácter.
6. La familia
• Una de las formas más usuales en que se verifica la convivencia es la familia, unidad básica de
la vida social o comunitaria.
• En el pasado, y especialmente dentro de ciertas tradiciones de etnias occidentales, la familia
era un núcleo amplio, que no sólo abarcaba a marido y mujer, e hijos. Comprendía también,
en grado no poco frecuente, a los abuelos, y a veces, algún otro familiar.
• Poco a poco, la familia ha ido adoptando la estructura nuclear, alimentada por los
componentes esenciales de marido y mujer e hijos.
• En la actualidad, no es infrecuente que haya roces entre los progenitores y los hijos. Al llegar
a la pubertad, por razones psicofisiológicas, y fundamentalmente sociales, los adolescentes
entran en conflicto con la paternidad, en sentido amplio. Lo social alimenta valores no
siempre coincidentes con los que imperan en el núcleo familiar. En ese orden pueden darse
conflictos. El natural deseo de emancipación de la adolescencia está en los tiempos actuales,
y ya desde antes de la entrada en el siglo XXI, en choque a veces continuo entre jóvenes y
padres. Con frecuencia se hace necesaria la intervención de un terapeuta familiar.
7. Convivencia
otro concepto ͔☺
• La convivencia, en sentido amplio, es la acción y el resultado de convivir,
esto es, la situación en la que dos o más personas viven en mutua
compañía, compartiendo un mismo espacio y tiempo. En forma
esquemática podemos imaginar una línea recta que tuviera en un extremo
la idea de convivencia y en el otro la idea de guerra civil como lo más
contrario a la convivencia; en la zona intermedia podríamos situar la mera
coexistencia. Porque el término "convivencia", al menos en castellano,
tiene connotaciones de una mayor exigencia que la simple coexistencia.
Coexistir sólo exige que quienes coexisten se mantengan en la existencia al
mismo tiempo, sin importar en qué condiciones, más o menos hostiles,
ocurra tal hecho. En cambio, convivir exige la realización práctica de
ciertos compromisos en cuanto a respeto mutuo, a cooperación voluntaria
y a compartir responsabilidades. Esta distinción también puede aplicarse a
las relaciones entre colectivos. Por ejemplo, puede hablarse de la
coexistencia, o bien de la convivencia, entre grupos sociales, o entre
países.