El empirismo como teoría del conocimiento basado en la experiencia
1. 4.2. EMPIRISMO (XVll – XVllld.c.):
Empirismo proviene del término griegoempeiría (textualmente, experiencia). Con
empirismo señalamos al conocimiento que se basa en la experiencia para
validarse como tal, o sea que la experiencia es la base de todos los
conocimientos. Parte del mundo sensible para formar los conceptos: lo que uno ha
experimentado, lo ha experimentado (Whitehead).
La filosofía empirista evoluciona a lo largo de los siglos XVII y XVIII, propugna que
el origen del conocimiento es la experiencia y que la mente es como un papel en
blanco (Hume), sin ideas innatas, esto implica la negación de las ideas del
racionalismo, y que el conocimiento humano no es ilimitado; la experiencia es
también su límite; la consecuencia filosófica de esta afirmación lleva a la negación
de la metafísica.
En filosofía occidental, doctrina que afirma que “TODO CONOCIMIENTO SE
BASA EN LA EXPERIENCIA”, mientras que niega la posibilidad de ideas
espontáneas o del pensamiento a priori. Hasta el siglo XX, el término empirismo
se aplicaba a la idea defendida sobre todo por los filósofos ingleses de los siglos
XVII, XVIII y XIX. De estos filósofos ingleses, John Locke fue el primero en dotarlo
de una expresión sistemática, aunque su compatriota, el filósofo Francis Bacon,
había anticipado algunas de sus conclusiones. Entre otros empiristas también se
cuentan David Hume y George Berkeley. Opuesto al empirismo es el racionalismo,
representado por pensadores como el francés René Descartes, el holandés
Baruch Spinoza y los filósofos de los siglos XVII y XVIII Gottfried Wilhelm Leibniz y
Christian von Wolff. El pensador alemán Immanuel Kant intentó lograr un
compromiso entre el empirismo y el racionalismo, restringiendo el conocimiento al
terreno de la experiencia, a posteriori, y por ello coincidía con los empiristas, pero
atribuía a la mente una función precisa al incorporar las sensaciones en la
estructura de la experiencia. Esta estructura podía ser conocida a priori sin recurrir
a métodos empíricos, y en este sentido Kant coincidía con los racionalistas.
En los últimos años, el término empirismo ha adquirido un significado más flexible,
y ahora es utilizado en relación con cualquier sistema filosófico que extrae todos
sus elementos de reflexión de la experiencia. El término leyes empíricas se aplica
a aquellos principios que expresan las relaciones que, según se aprecia, existen
entre los fenómenos, sin que impliquen la explicación o causa de los fenómenos
mismos.
Los empiristas, se apartan de la razón para considerar que la observación es la
única vía honesta para explicar los conocimientos y para hacer ciencia.
Es una teoría del conocimiento que enfatiza el papel de la experiencia, ligada a la
percepción sensorial, en la formación de los conceptos. El conocimiento encuentra
su validez en su relación con la experiencia; significa que la experiencia es la base
de todos los conocimientos no solo en cuanto a su origen sino también en cuanto
a los contenidos del mismo. Se parte del mundo sensible para formar los
conceptos y éstos encuentran en lo sensible su justificación y su limitación.
Respecto a los conceptos universales continúan la crítica nominalista ya iniciada
en la Baja Edad Media.
Para el empirismo científico puro el método de la ciencia es la inducción y la
ciencia ofrece una verdad probable.
4.2.1. Tomas Hobbes (1588 – 1679 d.c.): (Sensismo materialista)
2. Nació en Malmesbury, Wiltshire, en Inglaterra. Fue un notable filósofopolítico,
famoso por su obra Leviathan (1651). Más tarde diría respecto a su nacimiento: "El
miedo y yo nacimos gemelos", dado que su madre dio a luz de forma prematura
por el terror que infundía la Armada Invencible española acercándose a costas
británicas. Ha sido considerado a lo largo de la Historia del pensamiento como una
persona oscura, de hecho en 1666 en Inglaterra se quemaron sus libros por
considerarle ateo. Posteriormente, tras su muerte, se vuelven a quemar
públicamente sus obras.
“ESTE PENSADOR SE BASA EN QUE NO EXISTEN MÁS QUE CUERPOS Y
QUE EL CUERPO SE REDUCE A LOS SENSIBLE Y EXPERIMENTABLE, A LO
QUE ES SUSCEPTIBLE DE MEDIDA Y DIVISIÓN”.
La filosofía que se dedica al estudio de los cuerpos naturales se llama “filosofía
natural” y la de los cuerpos sociales “Filosofía civil”.
En su tratado más famoso, Leviatán (1651), Hobbes señaló formalmente el paso
de la doctrina del derecho natural a la teoría del derecho como contrato social.
Según este filósofo inglés, en la condición de estado de naturaleza todos los
hombres son libres, y sin embargo viven en el perpetuo peligro de que acontezca
una guerra de todos contra todos (bellum erga omnes).
Desde el momento en que la sumisión por contrato de un pueblo al dominio de un
soberano abre una posibilidad de paz, no la verdad, sino el principio de autoridad
(en tanto que sea garante de la paz) constituye el fundamento del derecho.
Aunque la fama de Hobbes se debe esencialmente a sus teorías políticas y
sociales, su filosofía constituye la más completa doctrina materialista del siglo
XVII.
El universo es concebido como una gran máquina corpórea, donde todo sigue las
estrictas leyes del mecanicismo, según las cuales, cualquier fenómeno ha de
explicarse a partir de elementos meramente cuantitativos: la materia (extensión),
el movimiento y los choques de materia en el espacio.
"El universo es corpóreo. Todo lo que es real es material y lo que no es material
no es real" (Leviatán).
Este fragmento del Leviatán resume la filosofía materialista de Hobbes,
estrechamente vinculada a una postura determinista del mundo que postula que
todos los fenómenos del universo se hallan determinados inexorablemente por la
cadena causal de los acontecimientos.
Nada surge del azar; todo acontecer es el resultado necesario de la serie de las
causas, y, por lo tanto, podría ser anticipado, previsto.
La libertad humana y el libre arbitrio (albedrío) de la voluntad quedan
subordinados y limitados por el feroz determinismo de Hobbes. Ambos están
condicionados por los movimientos de los cuerpos externos.
Como forma óptima de gobierno defendió la monarquía, desaconsejando cualquier
reparto entre los poderes legislativo, ejecutivo y judicial.
La Filosofía debe ocuparse del estudio de los cuerpos, de sus propiedades y de su
origen.
Quedan fuera de la filosofía los temas teológicos (Dios, los ángeles, Lo Eterno, Lo
Increado, Lo "Supra-Racional").
4.2.2. John Locke (1632 – 1704 d.c.): (Sensismo racionalizado)
3. Nació el 29 de Agosto en Wrington en 1632, hijo de un jurista y de familia
puritana. Pensador inglés, máximo representante de la doctrina filosófica del
empirismo. Falleció el 28 de octubre de 1704 en Oates.
Su epistemología niega la existencia del innatismo y el determinismo considerando
el conocimiento de origen sensorial, por lo que rechaza la idea absoluta en favor
de la probabilística matemática.
Para Locke, el conocimiento solamente alcanza a las relaciones entre los hechos,
al cómo, no al por qué.
Por otra parte cree percibir una armonía global, apoyado en creencias y supuestos
evidentes por sí mismos, por lo que sus pensamientos también contienen
elementos propios del racionalismo y el mecanicismo.
Cree en un Dios creador cercano a la concepción calvinista del gran relojero,
basando su argumentación en nuestra propia existencia y la imposibilidad de la
nada de producir el ser, un Dios tal cual como lo describe el pensador del
racionalismoDescartes en el Discurso del método en la tercera parte del mismo.
De la esencia divina solamente pueden ser conocidos los accidentes y sus
designios solamente pueden ser advertidos a través de las leyes naturales.
Trata la religión como un asunto privado e individual, que afecta solamente a la
relación del hombre con Dios, no a las relaciones humanas. En virtud de esta
privatización el hombre se libera de su dependencia de la disciplina e imposiciones
eclesiásticas y sustrae la legitimidad confesional a la autoridad política, puesto que
considera que no hay base bíblica para un estado cristiano.
Considera la ley natural un decreto divino que impone la armonía global a través
de una disposición mental (reverencia, temor de Dios, afecto filial natural, amor al
prójimo), concretada en acciones prohibidas (robar, matar y en definitiva toda
violación de libertad ajena), que obligan en favor de la convivencia.
Locke criticó en sus dos Tratados sobre el gobierno civil (1690) la teoría del
derecho divino de los reyes y la naturaleza del Estado tal y como fue concebido
por el filósofo y teórico político inglés Thomas Hobbes.
Afirmaba que la soberanía no reside en el Estado sino en la población, y que el
Estado es supremo pero sólo si respeta la ley civil y la ley natural. Mantuvo más
tarde que la revolución no sólo era un derecho, sino, a menudo, una obligación, y
abogó por un sistema de control y equilibrio en el gobierno, que tenía que tener
tres ramas, siendo el poder legislativo más importante que el ejecutivo o el judicial.
También creía en la libertad religiosa y en la separación de la Iglesia y el Estado.
La influencia de Locke en la filosofía moderna ha sido muy grande y, con su
aplicación del análisis empírico a la ética, política y religión, se convirtió en uno de
los filósofos más importantes y controvertidos de todos los tiempos. También
escribió Pensamientos sobre la educación (1693) y Racionabilidad del cristianismo
(1695).
“PARA ESTE PENSADOR LA EXPERIENCIA ES LA QUE SUMINISTRA EL
MATERIAL A LA RAZÓN Y LA QUE LE SEÑALA SUS PROPIOS LIMITES. LA
EXPERIENCIA ES EL FUNDAMENTO DE TODO PROCESO INTELECTIVO”.
Las ideas simples se originan de los sentidos externos, y las ideas complejas de la
experiencia interna (Reflexión).
4.2.3. Jorge Berkeley (1685 – 1753 d.c.): (Inmaterialismo)
4. Filósofo y clérigo irlandés, nacido en el condado de Kilkenny, Irlanda, el 12 de
marzo de 1685. Murió el 14 de enero de 1753 en Oxford, considerado el fundador
de la moderna escuela del idealismo.
Obispo irlandés continuador de la obra de Juan Locke. Su obra principal es
Tratado sobre los principios del conocimiento humano. Su filosofía parte del
conocimientosensible (negando todo conocimiento abstracto), distinto del Yo y su
actividad voluntaria. Sin embargo, lo sensible sólo existe a partir de la percepción
de un sujeto cognoscente, de tal modo que si no hay sujetopercipiente no hay
sensible: esseestpercipii. De este modo, el mundo es un conjunto de seres
percipientes que dependen de la existencia de un serpercipiente: Dios, el autor de
todas nuestras representaciones, única actividad similar al conocimiento abstracto.
Así, el mundo sensible no sería más que un curso de percepciones que produce la
voluntad divina en los demás seres conscientes.
Berkeley mantenía que no se puede concebir que la materia exista con
independencia de la mente; los fenómenos de los sentidos sólo pueden explicarse
suponiendo que hay un dios que provoca de forma continua la percepción en la
mente humana.
Berkeley desarrolló su teoría filosófica como una respuesta al escepticismo y el
ateísmo. Afirmaba que el escepticismo surge cuando la experiencia o las
sensaciones se encuentran desligadas de los objetos, no dejando ningún camino
posible para saber de ellos excepto a través de las ideas. Para poner fin a esta
disociación, una persona tiene que reconocer que el "ser" de las cosas sensibles
consiste sólo en que son percibidas. Todo lo que es percibido es real, por eso las
únicas cosas cuya existencia se puede conocer son aquellas que se pueden
percibir. Berkeley insistió, no obstante, en que las cosas sí tienen una existencia
fuera de la mente humana y sus percepciones, pues las personas no pueden
controlar las ideas que tienen. En consecuencia, debe haber una mente en la que
existan todas las ideas, un omnipresente espíritu infinito, a saber, Dios, que lo
percibe todo.
“EL SISTEMA FILOSÓFICO DE BERKELEY ELIMINABA CUALQUIER
POSIBILIDAD DE CONOCIMIENTO DE UN MUNDO EXTERNO MATERIAL”.
A pesar de que su sistema tuvo pocos seguidores, sus críticas a los
razonamientos sobre un mundo separado externo y al concepto de la materia
fueron poderosas y han influido en los filósofos posteriores.
Su teoría que ha de terminar por negar la capacidad de conocimiento del mundo
material, partiendo del hecho de que no existen las sustancias corpóreas, hasta
convertir así su sistema en una especie de inmaterialismo, por eso la causa de las
ideas solo puede estar en una sustancia espiritual, superior, que es Dios.
La filosofía de Berkeley es el empirismo llevado al extremo. Si John Locke había
dudado sobre el conocimiento de los cuerpos, Berkeley va más allá. En su
juventud, Berkeley propuso que no se puede saber si un objeto es, sólo puede
saberse un objeto siendo percibido por una mente. Declaró que los seres
humanos no pueden conocer los objetos reales o la materia que causa sus
percepciones, sino que incluso las propiedades matemáticas son ideas
semejantes a las cualidades sensoriales.
4.2.4. David Hume (1711 – 1776 d.c.): (Fenomenismo escéptico)
5. David Hume nació en Edimburgo (Escocia), en 1711. Fue un filósofo, economista
e historiadorescocés y constituye una de las figuras más importantes de la filosofía
occidental y de la ilustración escocesa,
Su pensamiento ejerció una notable influencia en el desarrollo del escepticismo y
del empirismo.
Hume dio un paso revolucionario en la historia de la filosofía occidental al rechazar
la idea de causalidad, argumentando que “la razón nunca podrá mostrarnos la
conexión entre un objeto y otro si no es ayudada por la experiencia y por la
observación de su relación con situaciones del pasado. Cuando la mente, por
tanto, pasa de la idea o la impresión de un objeto, a la idea o creencia en otro, no
se guía por la razón, sino por ciertos principios que asocian juntas las ideas de
esos objetos y los relaciona en la imaginación”. El rechazo de la causalidad
implica también un rechazo de las leyes científicas, que se basan en la premisa de
que un hecho provoca otro de forma necesaria y, como resulta predecible, siempre
lo hará. Según la filosofía de Hume, por tanto, el conocimiento de los hechos es
imposible, aunque admitía que en la práctica las personas tienen que pensar en
términos de causa y efecto, y que deben asumir la validez de sus percepciones
para no enloquecer.
Su escéptico planteamiento también negaba la existencia de la “sustancia
espiritual” defendida por Berkeley y de la “sustancia material” defendida por Locke.
Yendo aún más lejos, Hume negaba la existencia de una identidad del yo,
argumentando que como las personas no tienen una percepción constante de sí
mismas como entidades diferentes, no son más que “un conjunto o colección de
diferentes percepciones”.
El objeto de nuestro conocimiento no se reduce a otra cosa que a captar todo
aquello que aparece, es decir, el conjunto de fenómenos, de impresiones que
experimentamos:
“LAS IDEAS SON LAS DÉBILES IMÁGENES QUE DEJAN LAS IMPRESIONES
EN EL PENSAMIENTO Y EN EL RACIOCINIO”.
Hume cree que todo el conocimiento humano proviene de los sentidos. Nuestras
percepciones, como él las llamaba, pueden dividirse en dos categorías: ideas e
impresiones. Así define estos términos en Investigación sobre el entendimiento
humano: «Con el término impresión me refiero a nuestras más vívidas
impresiones, cuando oímos, o vemos, o sentimos, o amamos, u odiamos, o
deseamos. Y las impresiones se distinguen de las ideas, que son impresiones
menos vívidas de las que somos conscientes cuando reflexionamos sobre alguna
de las sensaciones anteriormente mencionadas». Más adelante precisa el
concepto de las ideas, al decir «Una proposición que no parece admitir muchas
disputas es que todas nuestras ideas no son nada excepto copias de nuestras
impresiones, o, en otras palabras, que nos resulta imposible pensar en nada que
no hayamos sentido con anterioridad, mediante nuestros sentidos externos o
internos». Esto constituye un aspecto importante del escepticismo de Hume, en
cuanto equivale a decir que no podemos tener la certeza de que una cosa, como
Dios, el alma o el yo, exista a menos que podamos señalar la impresión de la cual,
esa idea, se deriva.