2. Para ti, que estás afligido porque un ser querido murió, Para ti, que lloras y no encuentras consuelo, recuerda que la vida no termina en la tierra, recuerda que la vida perdura en la eternidad, La vida terrenal es un paso rápido que nos lleva al más allá, nos lleva a la Vida Eterna, Por eso vivamos siguiendo a quién es la Vida Eterna.
3. Si sufres, si extrañas, si caes, si un ser querido muere, Mira al mayor de los Maestros y fíjate que El también sufrió y los dolores más grandes, Él también extrañó, también cayó y murió. Y mirándolo a El mira que venció a la carne y Resucitó,
4. Y agradece a Dios por tu vida y ya en la tierra alimenta tu espíritu para que cuando llegue la hora del fin de tu viaje en la tierra , tú espíritu esté tan lleno de Dios que se desprenda fácilmente de la carne como queriendo volar y ser libre para verdaderamente Volar por la Eternidad.
5. Que sea como un pajarito que viviendo, aprendió a volar y vuela a la Eternidad, dejando atrás todo lo que lo estancaba en su deseo siempre presente de volar.
6. Confía y comprende tu que sufres, tu que lloras y extrañas, que todo tiene un fin y una razón de ser …
7. Si haz formado de tus días una vida que te lleva a la Vida Eterna, si confías en que una oración levantada al cielo es escuchada, verás que los días pasan rápidamente y a quién extrañas con desaliento lo verás, lo verás porque haz puesto tu Confianza en Dios, Él es el dueño de la vida.
8. Aprovecha el tiempo que tienes por vivir y que vives para alimentar tu espíritu con el Pan Vivo bajado del Cielo (Jesús, verdaderamente presente en la Eucaristía), para formar días de amor, días de paz, para cumplir con el Amor, y para rezar por los que se nos adelantaron en el viaje al cual todos tenemos que ir.
9. Tú que vives, ¡vive en realidad!, sin preocuparte por competir materialmente, que tu felicidad se encuentre en las cosas simples de la vida y que no se compran: disfruta cada amanecer y cada anochecer, da Gracias a Dios por eso, y con cada vuelo de mariposa, cada canto de un Ave, cada sonrisa de un niño… ¡VIVE!.
10. Vive en lo simple, vive en lo sencillo. Recuerda que es muy triste si vives sin vivir, y que para vivir eternamente: tienes que buscar vivir alimentando tu espíritu en ésta vida terrenal
11. ¡Vive!, libre con la libertad de saber que todo lo que siembres en la tierra lo cosecharás en el cielo, todo lo invisible que haces y no se ve, lo verás en la Eternidad, en los tesoros que haz acumulado: al amar al Amor, al confiar en Él, al hacer su Voluntad, Y así: al amar, al perdonar, al seguir …
12. Espera, el tiempo pasa con rapidez, Espera llenando tu corazón de paz, Espera sin desesperarte, todo pasa, pronto lo verás, Camina, y ofrece tus pasos al Amor…
13. Que Dios te llene de bendiciones. Y que permanezcamos unidos en el amor a Jesús.