El documento describe 4 clases de caballos: el caballo Albino de los Estados Unidos derivado de los caballos traídos por los conquistadores europeos, el caballo Criollo Argentino originado de los cruces de caballos españoles en Argentina hace 300 años, el caballo Español o Andaluz originado en España y utilizado para diversas disciplinas ecuestres, y el caballo Francés de Silla reconocido en Francia desde 1958 a pesar de derivar de razas más antiguas.