La metanfetamina fue ampliamente utilizada por los soldados nazis y japoneses durante la Segunda Guerra Mundial para mantenerlos despiertos por largos períodos. Aunque tenía efectos útiles como combatir el cansancio, también podía causar alucinaciones y delirios que ponían en peligro la misión. Los oficiales tenían reservas sobre su uso debido a los riesgos psicológicos.
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Metanfetamina
1. Metanfetamina, el arma secreta de
los soldados nazis durante la
Segunda Guerra MundialMANUEL P. VILLATORO@ABC_HISTORIA / MADRID
Día 15/10/2014 - 02.13h
Esta sustancia fue empleada por los soldados de Hitler debido a que
les permitía estar despiertos durante muchas horas
OR LA N DO
En la Segunda Guerra mundial esta droga permitía a los soldados mantenerse
despiertos 48 horas seguidas
No han pasado ni dos días desde que un coleccionista hizo público que había hallado
unos informes que afirmaban que Hitler tomaba regularmente metanfetamina. Al
parecer, esta sustancia le era recetada por uno de sus médicos, el cual consideraba que
le podía ayudar a mantener la atención durante las interminables horas que pasaba
tras una mesa organizando su particular Tercer Reich. Sin embargo, el Führer no era
el único que la consumía pues, en aquella época, era muy utilizada por los
2. soldados nazis, pues lograba mantenerles despiertos durante horas yestar
siempre alerta.
A pesar de que parece un invento relativamente moderno, la metanfetamina cuenta ya
con casi un siglo de vida. Creada en 1919 en Japón usando como base la anfetamina,
esta droga fue ampliamente utilizada en la Segunda Guerra Mundial. Por entonces,
lasinterminables horas de guardia y las defensas a ultranza de las
trincheras a cualquier hora provocaban un cansancio extremo en los
combatientes. En base a ello, muchos países consideraron necesario darles un pequeño
«empujoncito» para que pudieran mantener los ojos abiertos durante más tiempo.
Entre las naciones que más repartieron la sustancia entre sus militares
destacaron Alemania (a pesar de las quejas de multitud de oficiales nazis)
y Japón (el país que la vio nacer), donde no era raro que loskamikazes la ingirieran o
se la inyectaran en grandes dosis con el objetivo de acudir eufóricos a morir por su
país. Posteriormente, y tras la contienda, esta droga fue puesta al alcance del público
ycomercializada en forma de medicamento. «La droga se usó en
descongestionantes nasales e inhaladores bronquiales», explica el «National Institute
on Drug Abuse» (NIDA).
Hitler pasa revista a sus tropas
A su vez, y con el paso de los años, el desconocimiento de sus posibles efectos
secundarios a largo plazo provocó que fuera utilizada en la década de los 60 por
muchos médicos y dietistas. «Hace 50 años los derivados de las anfetaminas y la
metanfetamina eran recetados por los médicos para hacer adelgazar a sus
pacientes durante las dietas, ya que reducía el apetito. Lo utilizaban por entonces
sobre todo las señoras. Pero, al final, se vio lo dañinos que eran» explica, en
declaraciones a ABC, Emiliano Corrales -director de la clínica
Cazorla (especializada en salud mental y en todo tipo de adicciones) desde hace 30
años y responsable de la unidad de conductas adictivas del hospital Vega Baja-.
3. ¿Qué es y por qué la usaban los soldados?
Pero ¿Qué es la metanfetamina? Conocida en la actualidad como «meth», «hielo» o
«speed», puede definirse como una droga estimulante y adictiva. «La
metanfetamina afecta el sistema nervioso central. Es un polvo blanco, cristalino, sin
olor, y con sabor amargo que se disuelve fácilmente en agua o licor», completa el
«National Institute on Drug Abuse». De la misma opinión es el «Servicio de
Drogodependencia y otras adicciones de la Rioja» que, en su sitio Web explica que se
presenta en polvo y se consume a través de la nariz.
En cuanto a su uso, la metanfetamina se ha hecho famosa es por su efecto estimulante,
ya que produce, entre otras cosas, una disminución radical del cansancio -algo esencial
para los soldados que, en medio de la Segunda Guerra Mundial, sabían que
mantenerse despiertos podía significar la diferencia entre vivir o morir-. «Es muy
común que esta sustancia produzca insomnio y falta de apetito mientras se
consume. Es una droga que, en cierto modo, pudo ser muy útil durante aquellos
años, pues permitía a los combatientes estar con los ojos abiertos durante muchas
horas seguidas (hasta 48) y, después, irse a descansar», completa el experto español a
este diario.
Unos riesgos demasiado altos
El problema que tenía esta sustancia para los oficiales nazis era que, a pesar de que
tenía efectos muy útiles durante los extensos combates que se vivían en Europa,
también producían todo tipo de consecuencia negativas. «Para empezar la
metanfetamina provocan alteraciones nerviosas. Es decir, que la persona esté
constantemente alerta, en tensión. También existe el riesgo de que una persona sufra
un brote psicótico tras tomarla, aunque estos se producen normalmente a largo
plazo y cuando el consumo es constante», sentencia Emiliano Corrales.
La metanfetamina puede generar alucinaciones auditivas y visuales
A su vez, tampoco gustaban demasiado a los responsables militares debido a que
podían producir alucinaciones en los combatientes. «En personas jóvenes, de 18
años, pueden provocar trastornos severos que se pueden materializar de diferentes
maneras. La primera es con alucinaciones visuales (en el caso de los soldados en la
Segunda Guerra Mundial,ver por ejemplo a un enemigo que no estaba allí). Por
otro lado, también están las alucinaciones auditivas internas (oír, por ejemplo,
una voz en tu cabeza que te dice que mates a tu teniente) oexternas (escuchar a
alguien a tu alrededor, pero mirar y no ver nada», añade el experto español.
Los soldados, a su vez, podían sufrir delirios, como bien explica el director de la
clínica a este diario: «Los delirios son más frecuentes. Se producen cuando alguien
hace una interpretación errónea a algún estimulo externo. Si, por ejemplo, alguien te
mira en medio de la calle, tú puedes pensar que puede que te conozca de algo. Alguien
4. con delirios puede considerar que está planeando hacerle algo malo y actuará,
por ello en consecuencia. En ese caso, no sería raro que un soldado disparara
contra sus propios compañeros»
Los otros efectos
A corto plazo, además, la metanfetamina aumenta la sudoración de aquel que la haya
consumido, genera vértigos y temblores e, incluso, agresividad e irritabilidad.
Además, puede llevar a problema todavía más serios: «También puede causar una
variedad de problemas cardiovasculares, incluyendo un aumento en la frecuencia
cardiaca, latido irregular del corazón y elevación de la presión arterial. Una sobredosis
de la droga puede elevar la temperatura del cuerpo a niveles peligrosos (hipertermia)
y producir convulsiones, que si no se tratan inmediatamente pueden resultar fatales»,
completa el «National Institute on Drug Abuse».
Por otro lado, si el abuso de la metanfetamina es constante, se puede desarrollar
una tolerancia a ella. Esto lleva al cuerpo a acostumbrarse a sus efectos y a
necesitar una cantidad mayor para sentir las sensaciones a corto plazo que,
anteriormente, se conseguían con una dosis pequeña. «Con el fin de intensificar los
efectos deseados, los abusadores pueden tomar dosis más altas de la
droga, consumirla con más frecuencia o cambiar el método de administración. El
síndrome de abstinencia ocurre cuando el abusador crónico deja de usar la droga y
entre sus síntomas están la depresión, la ansiedad, el agotamiento y un deseo
vehemente por la droga (“craving”)», finaliza el NIDA.
El tratamiento psicológico de las adicciones
M.P.V.
Tabaco, alcohol, drogas, videojuegos… A día de hoy, las adicciones son un habitual
dentro de la sociedad. Por ello, desde ABC hemos contactado con Francisco Jesús Ortiz
de Haro, psicólogo especialista en los tratamientos de la desintoxicación, para que nos
cuente cómo es el proceso de desintoxicación de una persona a nivel psicológico.
1-¿Qué síntomas puede padecer un adicto –formas de actuar por ejemplo-?
Los primeros síntomas suelen aparecer incluso horas después del consumo o el cese
del mismo "efecto craving" (abstinencia). La persona siente la necesidad de seguir
consumiendo, puesto que el organismo reclama esa sustancia a la que se vuelve
dependiente y a la vez ms tolerante, necesitando más cantidad. Ansiedad, cambios de
humor, fallos en la concentración y memoria y sudores pueden ser de los síntomas mas
acusados, acompañados de sentimientos de culpabilidad por una parte y una falsa
sensación de control, "puedo dejarlo, y no lo haré mas"; "Yo consumo de forma
controlado, podría dejarlo ahora si quisiera". El negar la evidencia así como mentir al
entorno suelen ser otras de las formas de actuar del adicto.
5. 2-¿Cómo se inicia un tratamiento psicológico para que una persona deje
las drogas?
El paso fundamental es que el paciente reconozca la dependencia a la sustancia y el
daño que hace a su vida en general. Romper con la negación y por tanto pasar a la
aceptación es el mejor predictor para el buen funcionamiento de una terapia. El
siguiente paso es la evitación del consumo y todo lo que tenga que ver con ello.
Personas, hábitos… Todo aquello relacionado con la adicción debe ser eliminado
temporalmente de la vida del paciente, así como la sustitución en muchos casos por
otras conductas. En la mayoría de los casos hay que pedir ayuda a personas cercanas y
formarlas al respecto, pues serán guías durante todo el proceso. Otro de los primeros
pasos es controlar y registrar cada una de las conductas del paciente, desde las
reacciones adversas que pueden aparecer, hasta clarificar las situaciones de riesgo para
poder evitarlas. Por tanto, aceptación y registro de la conducta del paciente es el
primer bloque en un tratamiento de adicción.
3-¿Qué dificultades pueden encontrarse?
Depende del tiempo de adicción que lleve la persona, el tipo de consumo, así como la
sustancia en sí. Pero por lo general, las primeras dificultades suelen ser la modificación
de hábitos y estímulos de su entorno que le ayudan a consumir. Cambiar relaciones
sociales, hábitos de ocio o laborales que inviten al consumo e identificación de
personas de riesgo. No olvidemos que hay que "aislar" todos los estímulos que estaban
presentes en el consumo, y no todos son controlables. El momento de la prevención de
la recaída es otro de los momentos más difíciles y de riesgo durante el proceso de cura.
4-¿Cuál es el caso más duro de adicción que ha conocido o tratado?
Hace algunos años, el caso de una mujer embarazada de gemelos, consumidora de casi
3 paquetes de cigarrillos al día, donde fumaba en el trabajo, en su hogar… Sus
relaciones sociales eran fumadoras y con un consumo de hacía más de 20 años, pues
empezó muy joven. A parte de la ansiedad de dejar de fumar, había que trabajar el
sentimiento de culpa hacia su embarazo, evitar los estímulos de riesgo, y cambiar
conductas que ya de por si el mismo embarazo le había obligado a cambiar. Finalmente
y tras unos 3 meses de sesiones de deshabituación logró dejar el consumo.
5-¿A nivel psicológico, existe una recuperación total?
Prácticamente nunca podemos hablar de ausencia de trastorno psicológico, en ningún
caso, solo se controla o se vuelve adaptativo para la vida cotidiana, pasando a ser
menos intenso por tanto. En el caso de las adicciones, es cierto que el éxito terapéutico
se logra con el mantenimiento del no consumo durante el resto de la vida, pero nos
6. encontramos con paciente que permanecen siempre en alerta y que, si han identificado
situaciones de riesgo para la recaída, las van a seguir evitando. Curación sí, pero hablar
de desaparición sería irónico, pues el medio en sí y las propias situaciones de la vida
pueden hacer que un paciente recaiga y por tanto, volver al inicio de un tratamiento
que ya se plantea más difícil por el mero hecho de saber a lo que se enfrenta.