Las anfetaminas son estimulantes que incrementan la actividad y reducen el apetito. Se conocen también como anfetamina, metanfetamina, efedrina, entre otros. Funcionan estimulando receptores neuronales relacionados con la recompensa y solo deben obtenerse con receta médica. Su consumo por embarazadas puede traer consecuencias negativas para la madre y el bebé. Se han usado en terapias para la obesidad y mejorar el rendimiento académico.