2. Gustavo Adolfo Claudio Domínguez Bastida o mas conocido como Gustavo Adolfo
Bécquer fue un poeta y narrador español nacido el 17 de febrero de 1836 en Sevilla,
perteneciente al movimiento del romanticismo.
Su obra mas celebre son las rimas y leyendas
Biografiá
3. Biografiá
Nació en Sevilla el 17 de febrero de 1836, hijo del pintor José Domínguez Insausti
Gustavo Adolfo muestra afición y dotes para el dibujo. Se queda huérfano y es acogido por su
madrina Manuela Monahay, mujer muy rica, culta y sensible. En su biblioteca el poeta empieza a
aficionarse a la lectura.
4. Biografiá
Cuando cumple 18 se marcha a Madrid con el deseo de triunfar como escritor,
Los siguientes años fueron de bohemia literaria y privaciones económicas,
En 1858 enfermo de tuberculosis de la cual morirá años mas tarde.
En ese año se enamora de la que sera su musa en sus primeras rimas Julia Espín,
pero ella era ambiciosa y no le gustaba la vida que llevaba el poeta
5. Sigue publicando algunas de sus rimas y leyendas y conoce a Casta Esteban, con la que
contraerá matrimonio en 1861.
González Bravo funda en 1860 El Contemporáneo, donde se le ofrece un puesto de
redactor hasta que 1865 desaparece.
En 1862 se inicia una etapa de intenso trabajo para mantener a su familia ya que nace
su primer hijo, de esa época son algunas de sus leyendas. En 1863 sufre una grave
recaída en su enfermedad y se vuelve a sevilla.
6. Al año siguiente nace su segundo hijo un amigo del poeta le nombra
censor de novelas y vuelve a Madrid y la economía familiar mejora
El año 1868 sera un año difícil casta le es infiel su libro de poemas
desaparece a causa de los disturbios de la revolución En diciembre de ese
año nace su tercer hijo pero se dice que este es del amante de casta
7. En 1870 se vuelve a madrid, donde muere a los 34 años
Un año mas tarde publicaran sus poemas gracias a sus amigos
8. Poesía que elegí
Rima l x v
Llegó la noche y no encontré un asilo;
y tuve sed ... ¡mis lágrimas bebí!
¡Y tuve hambre! ¡Los hinchados ojos
cerré para morir!
¿Estaba en un desierto? Aunque a mi oído
de las turbas llegaba el ronco hervir,
yo era huérfano y pobre... El mundo estaba
desierto... ¡para mí!