1. LOGRANDO UN MILAGRO
Jueves -2 -2012. Mateo 8-9
Sea creyente o no todos de alguna manera
queremos un milagro, así diga que no cree en
los milagros divinos como lo expresamos los
cristianos anhela que en su vida suceda algo que
sea fuera de lo normal, así después lo llame
casualidad. U obra del destino.
Cuando ocurre algo asombroso y excepcional
para lo que no hay una explicación racional, se
dice que ocurrió un milagro. Se le llama también
milagro a aquello que, por medio de la
intervención divina, se manifiesta en tu vida
para mejorarla. A veces, se le llama milagro a
algo que simplemente te hace sentir que la vida
tiene magia y misterio.
Aunque las definiciones varían, muchas religiones y culturas de ayer y de hoy poseen
algún concepto de lo que es un milagro y reconocen los milagros como una realidad.
Origen y significado de la palabra milagro
La palabra milagro viene del latín miraculum, que significa "mirar" .Miraculum a su vez
proviene de mirari, que significa "contemplar con admiración, asombro o estupefacción".
En la antigüedad se le llamaba miraculum a todo aquello que no se podía comprender.
Con el tiempo, la palabra milagro ha llegado a ser definida, según el Diccionario de la
Lengua Española, como un "hecho no explicable por las leyes naturales y que se atribuye a
intervención sobrenatural de origen divino".
Lo que necesitamos para lograr un milagro:
1. Creer en lo sobre natural: es muy difícil que alguien llegue a recibir algo de lo cual
no cree. Para recibir algo se necesita estar dispuesto a recibirlo.
2. Aceptar la voluntad de Dios: V 1-2 “Cuando descendió Jesús del monte, le seguía mucha
gente. 8:2 Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes
limpiarme.” ¿Qué nos motiva a orar? Por lo general todos los seres humanos oramos
mientras tenemos una luz de esperanza de recibir lo que estamos pidiendo.
Jesucristo oraba y a pesar de estar desesperado al final de su clamor decía “Señor
hágase tu voluntad mas no la mía” Mateo 26: 39. Nosotros los cristianos hacemos
todo lo contrario oramos para que se haga nuestra voluntad, tanto que al no
recibir el milagro que estábamos esperando tildamos a Jehová como un Dios
2. injusto, y muchas veces hasta nos enojamos con él y según nosotros le pagamos
con el látigo de la indiferencia y ya no volvemos a la iglesia.
3. Debo creer que Dios puede hacerlo. 9: 28 “Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y
Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor.” Muchas veces creemos
y hasta predicamos sobre un Dios que hace milagros, pero Jesucristo quiere que
nosotros creamos específicamente que él puede hacer lo que yo necesito.
4. Debo tener una fe activa: 8: 7-8 “Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré.
8:8 Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la
palabra, y mi criado sanará.” La fe no debe ser solo de teoría debemos reflejarla en
cada momento de nuestra vida.
5. Cada uno recibe a la medida de lo que espera: 8: 13 “Entonces Jesús dijo al
centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora.” Mateo
9: 29 “Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.”Un hombre
estaba orando en el reclinatorio, desesperado decía Dios mío dame tres mil pesitos
para poder comer algo en este día, junto a el estaba otro varón desesperado
porque él no se paraba rápido para el poder elevar su oración. Ya cansado de
esperar se mete la mano en el bolsillo y le dice al que estaba arrodillado, necesitas
tres mil pesos tómalos, pero no le quites tiempo a Dios yo necesito pedirle diez
millones.
6. Visualizar el Milagro: Hebreos 11: 1 “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la
convicción de lo que no se ve.” Convicción es la capacidad de estar tan seguro de algo
que es como si lo pudiera ver antes de que suceda.
7. Declararlo: si puedo verlo en mi mente lo puedo declarar. 9: 20-21 “Y he aquí una
mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, se le acercó por detrás y tocó el borde de
su manto; 9:21 porque decía dentro de sí: Si tocare solamente su manto, seré salva.” antes de
tocar el borde del manto que para ella era el punto de contacto entre su fe y el
poder sobre natural de Dios, al igual que para el rey Ezequías la masa de higos o
para Naamán las aguas del rio Jordán. Ella lo estaba declarando en su mente.
Porque el milagro comienza en la mente: debemos llamar lo que no es como si
fuera. Romanos 4: 17; Joel 3: 10.
8. El milagro es una profecía: 8: 17 “para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías,
cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.” Esta profecía
al igual que todas solo se cumple en la vida de los que la creen.
9. Debo querer un milagro: Juan 5: 6 “Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya
mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano?” esta pregunta parecería ilógica, quien que
esté enfermo no quiere ser sano, o quien que este pobre no quiere salir de la
pobreza. Pero muchas veces caemos en el conformismo cristiano, y nuestras
palabras no ayudan a conseguir un milagro: “con lo que tengo es suficiente, la
3. plata daña, quiero una casita en cualquier lugar. con tal que sea propio así sea un
rancho. Etc.”
10. Debo creer de corazón: Marcos 9: 22- 23 “Y muchas veces le echa en el fuego y en el agua,
para matarle; pero si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos.
9:23 Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Si nosotros podemos creer,
Jesucristo puede hacer el milagro. Juan 11: 39-40 “Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la
hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días. 11:40 Jesús le
dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?”
Dios está dispuesto hacer milagros, pero necesita personas que le crean ciegamente, sin
dudar. Solo confía en él no te preguntes como lo hará pero si crees veras la gloria de Dios.
Para el que cree todo es posible.