1. LA PENA DE MUERTE
•Eduardo Martín Santos
•Raúl Álvarez Sánchez
2. •El concepto de pena tiene su origen en el termino poena y hace referencia al
castigo que es establecido por un juez o por un tribunal de acuerdo a lo estipulado
por la ley, y que tiene como fin sancionar a aquel que haya cometido un delito o una
falta.
3. •La muerte de criminales y disidentes políticos ha sido empleada por
algunas sociedades en un momento de su historia, tanto para castigar el
crimen como para suprimir la disidencia política.
4. • Actualmente la pena de muerte ha sido abolida y penalizada en
casi todos los países europeos (excepto Bielorrusia), y la mayoría
de los correspondientes a Oceanía (como Australia, Nueva
Zelanda y Timor Oriental). La mayoría de países latinoamericanos
han abolido la pena de muerte, mientras que en países como los
Estados Unidos de América, Guatemala y la mayoría de los
estados del Caribe aún sigue siendo aplicada. En Asia la pena de
muerte está permitida en democracias como Japón e India. En
África, aún se usa en Botsuana y Zambia.
5. •En muchos países donde aún se aplica la pena
de muerte, se usa como un castigo para
crímenes de asesinato, espionaje, traición, o
como parte del Derecho militar.1 En algunos
países se aplica también para castigar delitos
sexuales, siendo considerados como tales el
adulterio o la sodomía. También se castiga con
pena de muerte, en algunos países
musulmanes, la apostasía, la renuncia formal a
la propia religión. En China, el tráfico de
personas y los casos graves de corrupción
política son castigados con la pena de muerte.
6. • En el pasado los métodos históricamente
utilizados han sido variadísimos: hoguera,
horca, decapitación, lapidación, fusilamiento,
despeñamiento, arrojar a las fieras,
ahogamiento en agua, derrumbe de pared
sobre el ejecutado, emparedamiento,
estrangulamiento, apuñalamiento,
descuartizamiento, crucifixión,
envenenamiento, hacer tragar plomo fundido,
atropello con carro, ser pisoteado por
elefantes, etc...
7. •En la actualidad en los Estados Unidos se introdujeron finalmente la silla eléctrica y la
cámara de gas como métodos de ejecución más humanitarios que la horca, pero han
sido casi totalmente desplazados en favor de la inyección letal, que a su vez ha sido
criticada como demasiado dolorosa. A pesar de todo, algunos países islámicos aún
emplean métodos de ahorcamiento «lento», decapitación por espada,
derrumbamiento de pared sobre el ejecutado (Afganistán) e incluso lapidación. En
China, el sistema habitual es el de fusilamiento.