1. PLANEACIÓN DIDÁCTICA DE INTERVENCIÓN FRENTE A GRUPO
Guía de Apoyo al Conferencista en Desarrollo
Recuerda que nuestra colaboración frente a grupo, en cualquiera de nuestras intervenciones, debe tener el
sello distintivo del aprendizaje. No solo debe interesarnos que quienes nos escuchan queden impactados
por la forma de nuestro mensaje sino que debe preponderar el fondo del propio mensaje. Nuestras acciones
como expositores deben estar orientadas por un fuerte compromiso educativo y formativo hacia la integrali-
dad de los auditorios que nos escucharán.
Sobre las personas:
¿Quiénes me han convocado?
¿Quiénes integrarán el grupo?
¿Qué edad en promedio ten-
drán?
¿Grupo homogéneo en térmi-
nos de aprendizaje?
¿Conozco las expectativas de
forma previa?
¿Conozco las necesidades del
grupo de forma previa?
Sobre el espacio físico:
¿Cómo será el montaje?
¿Dispone de lo necesario para
material multimedia?
¿Cómo influirá el espacio en la
interacción con el grupo?
Objetivos específicos:
¿Peticiones especiales?
¿Intencionalidad del expositor?
¿Predeterminados a la inter-
vención?
Para lograr la centralidad en el men-
saje es necesario que el expositor
frente a grupo se plantee la confor-
mación de los objetivos de trabajo
que garantizarán la claridad de su
presentación.
Los objetivos deberán responder a
tres preguntas básicas:
¿Quién?
¿Qué?
¿Cómo?
Los objetivos conformados por el
expositor deben ser priorizados, en
orden de relevancia al cumplimiento
del mensaje .
La metodología consistirá en la ruta
específica que el expositor, depen-
diendo su estilo de interacción con el
grupo, planteará para el logro de los
objetivos considerados.
Es útil clasificar la metodología en
una lógica de integración de la infor-
mación. Destacarán en este sentido
los momentos de integración inicial,
media y final.
Será necesario incorporar a la es-
tructura del mensaje que se cons-
truirá los recursos verbales y no ver-
bales que permitan promover el
mensaje de una forma convincente y
que asegure pasión y compromiso
frente al grupo. Estos recursos par-
ten de la personalidad del expositor,
pero pueden analizarse y mejorarse
como habilidades comunicativas
concretas.
A partir de la definición del mensaje,
y la forma que tendrá frente a grupo,
es necesario considerar los recursos
didácticos a utilizar y que apoyarán
la presentación:
¿Cómo debe ayudar al grupo
el material?
¿Qué tipo de material puedo
construir?
¿Qué tipo de interacción es
conveniente tener con el ma-
terial?
¿Qué opciones de seguimiento daré al mensaje?
¿Qué refuerzos dejaré en el grupo respecto el mensaje a posicionar?