1. El Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para
servir, y para dar su vida en rescate por muchos.
" Yo estoy aquí como un siervo de Dios sobre la tierra,
para compartir lo que experimenté, para que otros
puedan conocer la gloria de Dios “
S. Mateo 20: 28

2. La palabra de la cruz es locura a
los que se pierden; pero a los que
se salvan, esto es, a nosotros, es
poder de Dios. Cosas que ojo no
vio, ni oído oyó, ni han subido en
corazón de hombre, son las que
Dios ha preparado para los que le
aman… Dios nos las reveló a
nosotros por el Espíritu. - 1
Corintios 1:18; 2:9-10.