La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria transmitida por mosquitos que afecta a humanos y animales. Los síntomas incluyen lesiones cutáneas y fiebre. Para prevenirla se debe eliminar los reservorios del parásito como roedores y evitar la picadura de mosquitos aplicando repelentes e insecticidas. A pesar de los esfuerzos, la leishmaniasis sigue siendo un problema de salud pública.