Cuando el dolor por la muerte de un ser querido llega nuestra vida, es muy bueno saber que existe una esperanza de resurrección y vida eterna, esto solo es posible en Cristo Jesús.

1. Construyendo Hogares FelicesGuía Cristiana para una Vida Mejor Lección 7 “Una Esperanza más Fuerte que la Muerte”

2. Introducción “Aunque deseemos vernos libres de problemas, debemos reconocer que estos existen. Las escrituras dice: Estas cosas os escribo para que en mí tengáis paz . En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo (Jn. 16:33)”

3. “Una esperanza que puede cambiar el perfil del hogar en momentos críticos”

4. Frente a la preocupante caída de los valores familiares tradicionales, ¿qué maravillosa esperanza nos aseguró Jesús? Juan 14: 1-3 ¿Cómo le llamó el apóstol Pablo a esta maravillosa esperanza que Jesús dejó? Tito 2:13

5. “Una esperanza más allá de la muerte”

6. La pérdida de un ser querido se encuentra entre los sucesos más dolorosos que el ser humano pueda experimentar. Cuando hay una esperanza en Cristo, el dolor se vuelve más soportable y las heridas sanan más rápido

7. ¿Cómo demostró Jesús su identificación con el dolor humano por la muerte de un ser querido? Juan 11:32-36 ¿Qué alentadoras palabras dirigidas a las hermanas de Lázaro pueden encender la esperanza en nosotros al perder un ser amado? Juan 11:25, 26

8. “¿Cómo será la segunda venida de Cristo?”

9. ¿Cómo será la Segunda Venida de Cristo? Hechos 1: 9-11 Apoc. 1: 7 ¿Será en secreto la Segunda Venida de Cristo? Mateo 24:30, 31 1ª Tes. 4:16

10. “El Reencuentro de la familia en la segunda Venida de jesús”

11. ¿Qué pasará con los fieles vivos y muertos cuando el Señor Jesús regrese para buscar a los redimidos? 1ª Tesal. 4: 13-18

12. “Desesperación vs. esperanza”

13. ¿Cómo reaccionarán los que rechazaron a Jesús como su Salvador personal? Apoc. 6:14-17 ¿Cuál será la reacción de los fieles cuando Jesús venga para destruir para siempre la muerte? Isa. 25:8, 9

14. “… Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá más llanto, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas pasaron”Apoc. 21:4

15. Mi decisión hoy “Señor Jesús, entra en mi vida y con tu sangre, lávame de toda mi maldad, pues quiero recibirte feliz cuando regreses a busca a tus hijos”