2. La palabra ética viene de un vocablo griego que se define
como carácter. Ética es la parte de la filosofía que trata la
valorización moral de los actos humanos, y es un conjunto
de principios y normas que regulan las actividades humanas.
"Es la ciencia de la moralidad", entendiéndose por moralidad
el conjunto de juicios que la gente hace referente a lo que es
correcto o incorrecto, bueno o malo, en las relaciones
interiores o entre individuos.
3. La palabra ética viene de un vocablo griego que se define
como carácter. Ética es la parte de la filosofía que trata la
valorización moral de los actos humanos, y es un conjunto
de principios y normas que regulan las actividades humanas.
"Es la ciencia de la moralidad", entendiéndose por moralidad
el conjunto de juicios que la gente hace referente a lo que es
correcto o incorrecto, bueno o malo, en las relaciones
interiores o entre individuos.
4. Concluimos diciendo que la ética tiene como objetivo
orientar a las personas a fin de que sepan cómo deben
proceder para que su vida sea correcta, especialmente en
relación con el bien y el mal.
5. Ética cristiana
En cambio la ética cristiana "es la ciencia de la conducta
humana, tal como está determinada por la conducta de
Dios".
Cuando hablamos de ética cristiana, estamos pensando en
la conducta que debe observar el cristiano en todo momento
y en toda circunstancia.
6. El apóstol Pedro escribe: "Como hijos obedientes, no os
conforméis a los deseos que antes teníais estando en
vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo,
sed también vosotros santos en toda vuestra manera de
vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo"
(1 P 1.14-16).
7. La ética cristiana nos desafía a mejorar nuestra manera de
vivir porque demanda que vivamos según las normas de
santidad que Cristo vivió. El apóstol Juan escribe: "El que
dice que permanece en él debe andar como él anduvo" (1 Jn
2.6).
8. La ética cristiana sólo puede vivirla plenamente el cristiano,
ya que solo él puede alcanzar ese nivel de conducta como
resultado del poder del Espíritu Santo obrando en su vida.
9. En Romanos 8.5-6, el apóstol Pablo nos explica: "Porque los
que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero
los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu. Porque el
ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del
Espintu es vida y paz".
10. Cuando el apóstol Pablo escribe sus cartas explica el
cambio de vida que debe experimentar toda persona
después de aceptar a Cristo como salvador (Ef 4.17-32).
Declara que los que están en Cristo son una nueva criatura
y que las cosas viejas, las formas de vida, y aun las
motivaciones deben ser hechas nuevas (2 Co 5.17).
11. El cristiano debe ser un ejemplo de vida para el mundo sin
Cristo, tanto en su conducta personal como en su relación
con la familia, la sociedad y las autoridades (Ef 5.21, 6.9).
12. La ética ministerial
Es el conjunto de normas escriturales que rigen los ministros
cristianos tanto en la esfera de las motivaciones como en la
de sus acciones y que determinan su conducta en relación
con Dios, la sociedad, su familia, su iglesia, la denominación
a la que pertenece y las instituciones cristianas.
13. Es importante notar que llamamos ministro a todo cristiano
que desarrolla un ministerio de liderazgo dentro de la iglesia,
en su denominación, o dirigiendo un ministerio o entidad de
servicio.
14. LA NECESIDAD DE ESTE ESTUDIO
Somos parte de una sociedad sin Dios que está gobernada
por un relativismo moral alarmante. Hay una falta total de
ejemplos de ética en todas las esferas. En el periódico La
Nación, salió un artículo titulado "El fracaso moral de la
civilización", en el cual se expresa: "Desde el Decálogo de
Moisés a través de toda la poderosa influencia moral del
cristianismo, la civilización occidental había mantenido
tenazmente un conjunto de reglas morales y de principios
15. éticos que constituían la base misma de la educación y de la
conducta civilizada.
El reconocimiento de esos grandes principios morales
llegaban a conformar una manera de distinguir fácilmente
entre lo que era el bien y lo que era el mal. Lo que ha
ocurrido desde la Primera Guerra Mundial equivale a una
inmensa hecatombe moral de nuestra civilización.
16. Se ha ido estableciendo tenazmente un divorcio entre los
principios éticos y las realidades de la vida social, con
inmensas consecuencias destructivas del ideal mismo de
una civilización digna de ese nombre". Lo grave es que ese
relativismo moral y la filosofía hedonista de nuestra
decadente sociedad ha ingresado a las iglesias.
17. La sociedad
Todos conocemos la situación moral de nuestros países
latinoamericanos. Nuestros dirigentes no son un modelo de
conducta ética. La mentira, la vida ostentosa, el fraude, la
corrupción, la impunidad, la falta de justicia y de seguridad y
un nivel de transgresión generalizado han creado un
ambiente de libertinaje.
18. Los medios masivos presentan, además, como súmmun de
felicidad, el tener cosas, el ser exitoso, aunque no virtuoso.
Propone disfrutar de la vida, pero sin responsabilidad. Por
otro lado las mafias de la droga y la pornografía así como los
grandes emporios de la diversión, han abierto las puertas a
todo tipo de posibilidades de placeres sin pensar en el daño
que hacen.
19. Pareciera que el apóstol describe nuestra sociedad moderna
cuando dice: "Estando atestado de toda injusticia,
fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia,
homicidios, contiendas, engaños y malignidades.... quienes
habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican
tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino
que también se complacen con los que las practican" (Ro
1.29-32; véase 1 Ti 3.1-5).
20. Frente a estas situaciones nos preguntamos: ¿Qué es
correcto hoy? ¿Quién lo determina? Nuestra sociedad no
puede. Sabemos que como cristianos evangélicos esa es
nuestra responsabilidad, pero ¿tenemos la capacidad y la
disposición para hacerlo? Jesús dijo que somos la sal de la
tierra, pero que si la sal pierde sus propiedades y no cumple
su función "no sirve más para nada, sino para ser echada
fuera y hollada por los hombres" (Mt 5.13). ¿Estaremos
perdiendo nuestra capacidad de ser sal?
21. La iglesia
Al analizar la conducta de muchos líderes y congregaciones
evangélicas, nos asombra encontrar un relativismo moral
similar al que rige a nuestra sociedad sin Dios. Pero peor
aun es descubrir en nuestras iglesias y en ministerios
cristianos los mismos pecados, las mismas situaciones
censurables que encontramos en nuestra sociedad
contemporánea.
22. En esas congregaciones no se viven la santidad, la pureza,
el amor, la verdad, la humildad y el respeto o temor a Dios.
Algunos líderes obran como si fueran dueños de las
congregaciones, de los ministerios y de los recursos,
cayendo en los mismos excesos y pecados que condenan
en los líderes que no son cristianos. Bien se expresó
Cipriano cuando dijo: "Los pecados de los cristianos han
debilitado el poder de la iglesia".
23. Mencionaré algunos casos reales:
Después de abandonar a su familia, un hombre fue a otra
ciudad en la cual fue designado evangelista y enviado a otro
pueblo para iniciar una iglesia.
24. En una iglesia un líder llevaba a las mujeres jóvenes a un
salón aparte para liberarlas de "espíritus inmundos de sexo";
les hacía sacar prendas íntimas y las manoseaba mientras
pretendía reprender a los demonios.
25. Un pastor designó a un matrimonio joven como misioneros a
otro pueblo, y les pidió que vendieran su casa y que le
entregaran el dinero. Cuando regresaron se encontraron sin
su casa y estafados por su pastor que había usado el dinero
para otros fines.
26. Un pastor recibió la propiedad de unos ancianos como
ofrenda, a cambio de que la iglesia les permita usarla y les
brindaran atención ya que no tenían familiares. Poco
después, comenzó a tener problemas para brindarles la
debida atención. Los envió a un geriátrico y se quedó con la
propiedad.
27. Un pastor se ufanaba de que los vecinos le vendían sus
casas a él a muy poco precio. La razón era que ya no se
podía vivir en las cercanías del templo por el ruido que
hacían en las reuniones. Los dueños se las vendían a un
valor muy inferior con tal de irse del barrio.
28. Un pastor se ofreció a cooperar con ocho pastores del
interior del país para que ellos cobraran la asignación
familiar que otorga el gobierno. Les hizo firmar un poder
autorizándole a cobrar por ellos. Durante tres años este
pastor cobró mensualmente el dinero de sus colegas y a
quienes jamás se los remitió. Cuando el organismo estatal le
requirió la documentación correspondiente, la fraguó
29. falsificando firmas de sus colegas y dando gracias a Dios
porque no había sido descubierto.
El relativismo moral que está invadiendo nuestras iglesias.
En un curso de ética ministerial que dictaba solicité una lista
con faltas de ética más comunes el ministerio. Estos son
algunos de resultados:
30. Falta de integridad, tanto en la enseñanza como en el trato
con los demás. Falta de un verdadero espíritu de servicio.
Marcado interés por lo material. En muchos casos, se
anuncia que el Señor castigará a quienes no ponen sus
diezmos y ofrendas.
El dar el diezmo se transforma en una especie de seguro
contra la pobreza. Falta de respeto por otros ministros y
ministerios. No ser personas de palabra. Prometer y no
cumplir. lmpuntuales crónicos. Falta de interés por aprender
31. o capacitarse para ser mejores ministros. Hacer acepción de
personas, especialmente cuando tienen dinero.
Terminaremos mencionando las más obvias categorías del
relativismo moral de la sociedad contemporánea y su
influencia en la iglesia.
32. a)Orgullo y ostentación
Algunos líderes viven y se comportan como si fueran
magnates del evangelio. Sus casas, sus autos, su vestuario
y la suntuosidad de sus templos (y ministerios) contrasta
33. totalmente con el estilo de Jesús y con la pobreza de los
miembros de sus iglesias.
Visten y actúan como estrellas del cine o de la televisión.
Hacen de cada culto un "show" para demostrar todo lo que
pueden hacer o cuánta "unción" o " poder" tienen.
La idea de que todo cristiano debe vivir en prosperidad no es
una enseñanza bíblica. Los ministros que viven en lujos y sin
34. privarse de nada, mal usando las ofrendas que dan con
amor al Señor cristianos que no tienen casi para comer, es
un pecado que Dios condena.
b) Abuso de poder
El poder que tenemos por causa de nuestra posición en el
ministerio nos corromperá si no lo usamos en sujeción al
Señor, sirviendo a la iglesia. Aprovechándose de las
estructuras administrativas de su denominación, hay líderes
35. que se rodean de personas que los adulan, los secundan y
los protegen de la gente.
Hay pastores que condicionan a los miembros de su iglesia
para que ofrenden, asistan y cooperen con las actividades y
lo hacen no por amor, sino por temor. Otros ministros son
duros con los miembros pero muy permisivos con sus
36. líderes y familiares. Algunos asumen actitudes de
caudillismo, manejando la congregación como si fuera su
feudo y haciéndose acompañar por guardaespaldas.
Un caso lamentable lo constituye Diótrefes quien "...no
contento con estas cosas (criticar al apóstol Juan) no recibe
37. a los hermanos, y a los que quieren recibirlos se los prohibe,
y los expulsa de la iglesia" (3 Jn 9,10).
c)La mentira
En nuestras congregaciones e instituciones se miente,
exagerando las estadísticas sobre la membresia y la
38. asistencia. Se miente cuando se promete a la gente la
solución inmediata de todos sus males y la provisión divina
para cubrir todas las necesidades.
Como consecuencia, miles de personas se sienten
estafadas y/o defraudadas por los cristianos evangélicos que
39. les prometieron en forma muy definida cosas que no se
cumplieron.
Una familia conocida tenía una anciana internada en un
hospital en estado muy grave.
Algunos cristianos les aseguraron que para la Navidad la
anciana estaría sentada con ellos en la mesa compartiendo
esa fecha tan especial. Para esa fecha la abuela estaba
sepultada y la gente decepcionada con los evangélicos.
40. Ellos nos decían que si no los hubieran ilusionado dándoles
tanta certeza de sanidad, no se hubieran sentido tan
desanimados y frustrados.
d)Pecados sexuales
41. Nuestros jóvenes en porcentajes importantes tienen
relaciones sexuales fuera del matrimonio y se casan
apurados por un embarazo no deseado. Por otro lado cada
vez son más los líderes y pastores que caen en pecados
sexuales.
Agrava el problema la falta de disciplina para con algunos
líderes que caen en pecados sexuales. Aparte del mal
ejemplo que dan, esa falta de disciplina transmite el falso
42. mensaje de que no es tan grave la fornicación o el adulterio
porque si ellos, que son los líderes, caen y no hay
sanciones, da la impresión de que se protejen entre sí y por
lo tanto no se aplican disciplinas.
43. Tienen la sensación de que los miembros regulares pueden
y deben ser amonestados y sancionados pero los pastores
no. ¿Por qué no puede pecar un miembro y ser perdonado
sin tener disciplina?
4.La necesidad de modelos
44. Es fundamental que los líderes y pastores cristianos
evangélicos vivan éticamente, como modelos de conducta
cristiana. Esta responsabilidad tiene dos dimensiones, una
hacia la iglesia, que necesita ver en sus ministros modelos
de vida cristiana, y la otra, hacia la sociedad sin Dios, que
necesita desesperadamente ver la posibilidad de cambiar y
de alcanzar un estilo de vida que sea mejor.
45. La gente en nuestros días necesita con urgencia encontrar
una posibilidad de comenzar de nuevo, de vivir mejor y de
vencer la presión de una sociedad enajenante. Nosotros
sabemos que el evangelio es esa alternativa porque es
"poder de Dios para salvar" (Ro 1.16). Pero la iglesia no será
ejemplo a menos que sus líderes sean modelos que los
miembros de las congregaciones puedan seguir.
46. Como el apóstol Pablo, debemos estar en condiciones de
decir "Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo." (1 Co
11.1; véase 4.16; Fil 3.17).
47. Escribiendo a los cristianos de Tesalónica, Pablo les
recuerda la conducta que él y su equipo. habían tenido en
medio de ellos y los insta a imitarlos apartándose de los que
vivían desordenadamente. "Ustedes son testigos, y Dios
también, de que nos hemos portado de una manera santa,
recta e irreprochable con ustedes los creyentes; ...les hemos
encargado que se porten como deben hacerlo los que son
de Dios que los llama a tener parte de su propio reino y
gloria." (1 Ts 2.10-12 VP).
48. "Hermanos, les ordenamos en el nombre de nuestro Señor
Jesucristo, que se aparten de cualquier hermano que lleve
una conducta indisciplinada y no siga la tradiciones que
recibieron de nosotros" (2 Ts 3.6-9 VP).
49. Nuestra responsabilidad es grande y no debemos fallarle ni
al Señor quien nos llamó al ministerio, ni a la iglesia que
espera que no seamos guía viviendo delante de ellos como
es digno de siervos de Dios.
50. Frente a lo expuesto, no podemos menos que concluir
declarando que urge estudiar y vivir la ética ministerial para
ser ejemplos a nuestras iglesias como lo fue Jesús para sus
discípulos y para su generación, y como lo fue el apóstol
Pablo para las iglesias y líderes de su tiempo.
51. Regla horizontal
El pastorear es nuestra tarea, debemos formar pastores,
pero nunca dejar de pastorear y convertirnos en ejecutivos
sin relación con la grey de Dios.
52. En cierta congregación, durante el tiempo de testimonios en
el culto, doña Carmen agradeció al Señor porque al
convertirse había encontrado en su iglesia local la familia
que nunca había tenido. Había sido aceptada, amada y
pastoreada.
53. Varios años después visité nuevamente esa congregación,
había crecido, pero doña Carmen ya no estaba y pocos
sabían algo de "la hermana Carmen".
Eso me ha hecho meditar en los desafíos que tenemos en la
pastoral hispanoamericana. Cuando el evangelio llegó por
primera vez a nuestras tierras, una de las grandes ventajas
de la pastoral evangélica fue la atención que logró darle a
las personas.
54. Las conversaciones, las oraciones, el consejo y el aprecio
expresado por los primeros pastores (unido a otras formas
de actuar del Espíritu de Dios) ayudaron a preparar el
terreno para el gran crecimiento que ha tenido la iglesia en
nuestros países. Sin embargo, ¡no pude encontrar a doña
Carmen en su iglesia local! ¿por qué?
55. Como consecuencia del crecimiento numérico, la pastoral se
ha ido profesionalizando e institucionalizando cada vez más
y hemos dejado elementos fundamentales, así como
aceptado modelos no muy convenientes.
Muchos pastores hemos asimilado el modelo de «consultorio
sicológico» en la atención de los feligreses y esperamos que
ellos lleguen cuando tienen necesidades (¡Eso sí, con previa
cita!).
56. El modelo «gerencial» (Organización, planificación y
delegación, ¡lograr que las cosas se hagan!) nos ha afectado
al punto que somos tentados a perder el contacto con las
ovejas que Dios nos dio a cuidar.
Hemos tragado la idea de que el pastor debe dedicarse a
formar líderes (lo cual es cierto) y dejar que estos sean los
que tengan el contacto con las ovejas. De repente llegamos
a ser figuras de púlpito, diferentes a Jesús, quien fue el
pastor de los discípulos (más de 70) y también de las calles,
de los niños, de las multitudes.
Es necesario que volvamos a nuestras raíces pastorales. No
estamos hablando del modelo de pastor que se dedicaba a
57. mantener el culto y a visitar a los hermanos. La tarea y
demandas pastorales son amplísimas y no estamos para
hacer lo mínimo.
Lo que debemos recordar es que el pastor «huele a oveja»
(no sólo a la adulta o a la líder) y para ser pastores,
debemos estar con el rebaño. Es estar con los hermanos,
reír y llorar con ellos, enseñarles y aprender de ellos.
Permitir que en nuestra relación con las ovejas, los
formemos y seamos formados.
58. ¿Ha meditado sobre la forma que Jesús le dijo a Pedro de
cómo podía mostrar su amor hacia el Maestro? «Apacienta
mis corderos, pastorea mis ovejas» (Jn 21.15–17). Pedro
enseñó que la corona que vamos a recibir del Príncipe de
los pastores, tiene mucha relación con haber cumplido
nuestra tarea: «pastorear la grey de Dios» (1 Pe 5.4).
Es necesario volver a las prácticas y a los principios que
dieron origen al crecimiento, los cuales son el modelo del
Nuevo Testamento (Hch 2.42–47):
59. ¿Qué propósito tenemos al relacionarnos con los hermanos?
(oración, consejo, diversión, ver su estado espiritual, ¿qué
más se nos ocurre?)
Los apóstoles delegaron en los diáconos responsabilidades
que les estaban distrayendo de su prioridad, pero nunca
delegaron su llamado y su función prioritaria (Hch 6.1–7). El
pastorear es nuestra tarea, debemos formar pastores, pero
nunca dejar de pastorear y convertirnos en ejecutivos sin
relación con la grey de Dios.
60. Comparto un bello ejemplo que leí en un libro. Un hermano
en la fe, gerente de un Banco, al llegar a su oficina saludaba
por nombre a la persona que abría la puerta, a la del
ascensor, a la que limpiaba y claro está a sus colaboradores
inmediatos. No tenía problema en detenerse y preguntar por
el hijo enfermo o por el proyecto de vivienda de alguno de
ellos. ¡Mente prodigiosa! Tal vez, pero lo que se dejaba ver
en ese hombre era su interés en las personas, en los que de
alguna manera Dios había puesto a su cuidado. Si eso hizo
un gerente de banco, ¿cuánto esperará el Señor de los
pastores?
61. ¡Cuán bello es compartir con las ovejas, verlas crecer y
madurar!, a pesar de que en alguna ocasión debamos sufrir.
Cuando el Señor regrese y lo vea decirle sonriente: —Ven
buen siervo y fiel (pastor) sobre poco has sido fiel, sobre
mucho te pondré… ¡Qué satisfacción! ¡qué realización!
Le podremos decir entonces: ¡Misión cumplida, Gran Pastor!
¿Lo haremos?
62. PREGUNTAS SOBRE LA LECCIÓN
1. ¿Qué es ética?
2. ¿Cuál es el objetivo de la ética?
3. ¿Qué es ética cristiana?
4. ¿Qué es ética ministerial?
63. 5. ¿Cómo está afectando a la sociedad el hecho de los
pecados en los cristianos?
6. El relativismo moral que está invadiendo nuestras iglesias.
Terminaremos mencionando las más obvias categorías del
relativismo moral de la sociedad contemporánea y su
influencia en la iglesia.
64. 7. Mencione las categorías del relativismo moral
8. ¿Cuáles fueron las prácticas y principios que dieron
origen al crecimiento a la Iglesia primitiva?
9. ¿Qué cuidado debemos tener los pastores cuando la
iglesia comienza a crecer?