El documento habla sobre el Año de la Fe, un tiempo para renovar la conversión a Jesús y ser testigos gozosos de su resurrección. La fe trae la fuerza de Cristo resucitado para superar los sufrimientos con paciencia y amor, y es una decisión de estar con el Señor para vivir con Él. La fe crece cuando se comparte el amor recibido de Dios como experiencia de gracia.