La tecnología móvil, incluyendo teléfonos inteligentes y tabletas, permite a los usuarios acceder a la educación en cualquier lugar y momento. El creciente número de dispositivos móviles ha abierto la puerta a nuevos usos educativos. Instituciones en todo el mundo están explorando cómo hacer que sus materiales educativos y recursos estén disponibles en línea y optimizados para dispositivos móviles, particularmente a través de aplicaciones educativas.