Los investigadores de la Universidad de Cambridge crearon con éxito los primeros embriones artificiales de ratón utilizando dos tipos de células madre - células madre embrionarias y células madre trofoblásticas extraembrionarias - organizadas en un andamio tridimensional. El embrión artificial siguió un patrón de desarrollo similar al de un embrión natural, con un 92% de similitud. Esto permitirá a los científicos estudiar eventos críticos en el desarrollo humano inicial sin necesidad