Este documento describe los 10 pasos clave en la cadena de custodia de la evidencia: 1) Reconocimiento, 2) Protección, 3) Fijación, 4) Levantamiento, 5) Examen, 6) Rotulado, 7) Envasado, 8) Sellado, 9) Traslado y 10) Almacenamiento. El objetivo es asegurar que la evidencia sea manejada correctamente y de forma que pueda ser usada en un juicio.