El documento habla sobre los cantares de gesta, la primera manifestación poética de las naciones de Occidente en la Edad Media. Menciona cuatro grandes poemas épicos: el Beowulf en Inglaterra, la Canción de Rolando en Francia, el Cantar de Mío Cid en España, y el Nibelungenlied en Alemania. Luego describe que el Cantar de Mío Cid es el primer monumento literario español que se conserva, escrito en el siglo XIV pero sobre los hechos del Cid ocurridos mucho antes.