La administración tiene cuatro características básicas: es universal ya que se da en cualquier organización social donde se requiere coordinación; es específica pues aunque esté acompañada de otras funciones, es un fenómeno distinto; mantiene una unidad temporal dado que todos sus elementos existen en cualquier momento de la vida de una organización; y presenta una unidad jerárquica ya que todos los jefes participan de la misma administración aunque en grados diferentes.