El documento es una carta de la Ministra General de la Orden Franciscana Seglar sobre la renuncia del Papa Benedicto XVI. Resume que la renuncia ha impactado emocionalmente a todos, especialmente a la Orden Franciscana debido a la relación cercana que tenían con el Papa y su admiración por San Francisco y Santa Clara de Asís. Finalmente, pide unirse en oración por Benedicto XVI y por la Iglesia para que el nuevo Papa guíe a la Iglesia en el complejo mundo actual.