Carta refugiados

1. La Provincia Franciscana de la Inmaculada
cede locales para los refugiados
7 de febrero de 2017
Queridos Hermanos: Paz y Bien.
Lo vemos cotidianamente en los medios de comunicación: hay millones de personas que
escapan de su propia patria huyendo de la persecución, de la guerra y de la pobreza. Es grande la
tragedia de estas personas: tener que abandonar sus países en una huida sin garantías
humanitarias ni vitales, el riesgo de morir en el mar, las consecuencias psicológicas, el abandono
sanitario, la ruptura familiar, el abuso de las mafias, el rechazo de los países donde llegan…
El Papa Francisco está clamando para que el Evangelio de la misericordia interpele la
conciencia de los cristianos y de toda la sociedad. Y en más de una ocasión ha pedido a las
Congregaciones religiosas que colaboren a paliar esta tragedia y a facilitar la acogida de los
refugiados.
En la actualidad se ha disparado el incremento de personas que han solicitado asilo en
España (de 5.947 solicitudes en 2014 se ha pasado a 14.881 en 2015). En el verano de 2015 España
se comprometió a la acogida de 9.323 personas refugiadas reubicadas desde Grecia e Italia y 1.449
reasentadas desde terceros países. Todo esto supone una gran necesidad de lugares de acogida.
Aunque en el último año se ha incrementado en más de un 400 % el número de plazas del sistema
español y el gobierno está dotando de mayores recursos a las organizaciones que acogen a
refugiados, el número de plazas de acogida sigue siendo insuficiente.
Por todo eso, el Definitorio provincial ha decidido ceder un buen número de locales
(pisos, algún convento no habitado, espacios no utilizados de conventos en los que vivimos),
para la acogida de refugiados.
La CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado), una de las tres organizaciones a las que
el Gobierno encargó oficialmente la acogida de refugiados, ha solicitado a la Provincia espacios
habitacionales para esta finalidad. Y el Definitorio nos encargó a Fr. Jose María Sainz y a Fr. Vicente

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Felipe hablar con ellos y acordar el modo cómo se cederán esos espacios. Queremos informaros
de cómo están las cosas sobre esta cuestión:
1. Hemos presentado a CEAR los lugares que la Provincia pone a su disposición,
informándoles de sus características.
2. El programa de acogida de la CEAR cubre los gastos vinculados al espacio utilizado:
suministros, pequeñas reparaciones e inversiones de acondicionamiento, algo de
mobiliario, así como todas aquellas necesidades básicas de las personas que allí vivan
(manutención, gastos médicos y farmacéuticos, vestuario, escolares, etc.).
3. Así mismo, la CEAR acompaña a las personas acogidas en todo momento por medio de
un equipo de profesionales (abogados, trabajadores sociales, psicólogos) que hacen la
orientación y seguimiento de cada uno de los itinerarios. Este acompañamiento se
prolonga dos años, tiempo durante el que las personas acogidas tienen que irse haciendo
autónomas.
4. La CEAR tiene sedes solamente en Madrid, Sevilla, Málaga, Las Palmas, Tenerife,
Barcelona, Bilbao, Valencia y Cullera. Desde éstas trabajan los equipos que atienden a los
refugiados. Para crear un equipo nuevo en otras sedes tendrían que atender al menos a
30 refugiados en una misma zona. Por eso han necesitado un tiempo para valorar nuestro
ofrecimiento. Acaban de enviar su respuesta, interesándose por varios espacios. En las
próximas semanas los visitarán para verificar la viabilidad de la acogida y proceder a la
firma del acuerdo con la Provincia. Iremos avisando a los guardianes respectivos.
5. Entraremos posteriormente en relación con ACCEM, otras de las organizaciones a las que
el Gobierno ha encargado la acogida de refugiados, para ver si pueden serles útiles los
inmuebles disponibles que no sean útiles a CEAR.
6. Y, naturalmente, os iremos comunicando qué lugares se van cediendo y las condiciones
contractuales.
El Definitorio ha tenido la iniciativa, pero también quiere que nuestras Fraternidades se
impliquen de alguna manera en esta acogida a los refugiados, no sólo con la cesión de locales
sino también de otras maneras. De hecho, esta carta tiene también como objetivo el animaros a
las Fraternidades a colaborar en esta urgencia. Os sugerimos algunas actividades, a modo de
ejemplo:
 Si todavía algunas fraternidades disponéis de espacios en los conventos, o de alguna otra
vivienda que puedan ofrecerse para esta acogida a refugiados, informarnos cuanto antes,
para estudiar su viabilidad.
 Podéis sensibilizar sobre el tema e implicar a la gente entre la que vivimos, con la que
trabajamos y a la que servimos, mediante actos informativos: charlas, videos, películas…

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 Se pueden realizar vigilias de oración (hay tres fechas especialmente oportunas: el 17 de
enero es para la Iglesia católica la Jornada Mundial del Inmigrante y Refugiado; las
Naciones Unidas tiene declarados el 20 de junio como el Día Mundial del Refugiado y el
18 de diciembre, Día internacional de las Migraciones). La Comisión de JPIC de la Provincia
enviará material para ello.
 Otra posibilidad es la aportación de dinero del fondo de solidaridad de la Fraternidad y la
realización de colectas para esta finalidad.
 Tal vez algunos monasterios de Clarisas o fraternidades de OFS cercanos a vosotros
disponen de algún lugar que puedan ceder. Comentadles la posibilidad.
 Nuestras Fraternidades podrían proponer a la Familia franciscana del lugar el pagar entre
todos el alquiler de un piso que se cediera a la CEAR. Sería una bonita iniciativa, y
seguramente la Familia franciscana lo agradecería mucho, porque hay muchos hermanos
y hermanas con ganas de ayudar pero sin los medios adecuados…
 Aunque no es condición imprescindible, la Familia franciscana del lugar también podría
actuar como red de apoyo a la CEAR para ayudar en la integración de los refugiados en el
barrio o en el pueblo donde vivan.
 En fin, hermanos, se trataría de vivir en esta hora una fraternidad y solidaridad creativas…
Os rogamos que nos comuniquéis cualquier iniciativa que ya estéis llevando a cabo o
aquellas que estéis dispuestos a realizar. En lo que podamos, os apoyaremos.
La Provincia ha abierto una cuenta para recoger y encauzar cuanto se reciba con esta finalidad
(aportaciones de las fraternidades, colectas, donativos…); es la siguiente: ES27-0216-0251-59-
8200144189, de la Entidad “Targobank”. Naturalmente la página web de la Provincia será un buen
espacio para compartir información. Y la Comisión de JPIC está disponible para sugerir actividades
y enviar materiales informativos y de sensibilización, y textos para encuentros o vigilias de
oración.
Nosotros, por nuestra parte, estamos muy contentos con la decisión tomada por el Definitorio
y muy disponibles para coordinar esta acción solidaria.
Os saludamos a todos con un abrazo fraterno
Fr. José María Sainz, ofm Fr. Vicente Felipe, ofm