El documento explica que los verbos regulares mantienen la misma raíz en todas sus formas y toman las mismas desinencias que el verbo modelo de conjugación, mientras que los verbos irregulares presentan cambios en la raíz o desinencias diferentes al verbo modelo. Para determinar si un verbo es regular o irregular, basta con conjugar el presente, pretérito y futuro, y verificar si hay formas irregulares.