Las bombas se clasifican en dos tipos: dinámicas y de desplazamiento positivo. Las bombas dinámicas incluyen bombas centrífugas, periféricas y electromagnéticas, y usan la energía cinética para bombear fluidos. Las bombas de desplazamiento positivo, como las bombas reciprocantes y rotatorias, transportan fluidos a través de un cambio controlado en el volumen de una cámara.