La Revolución Mexicana comenzó el 20 de noviembre de 1910 cuando Francisco I. Madero se rebeló contra el dictador Porfirio Díaz debido a la explotación de los trabajadores, la desigualdad social y económica, y el control de las tierras por las clases altas durante su gobierno. La revolución derrocó la dictadura de Díaz y llevó a la promulgación de una nueva constitución que restableció los derechos laborales y creó una ley de reforma agraria.