Este sistema no solo consigue una imagen de eficiencia hacia los clientes, sino que también ayuda a desarrollar y automatizar procesos administrativos y financieros como el control de inventarios, ventas, ganancias y rotación de productos. Esto permite a las tiendas de barrio tener una oferta de mercancía efectiva y conocer con exactitud las ganancias que produce el negocio en un periodo determinado.