El documento describe los diferentes tipos de soledad que experimenta el hombre. Explica que la soledad existía antes del pecado para Adán, y que Dios creó a Eva para ser su compañera y resolver ese problema. Después del pecado, Adán y Eva se escondieron de Dios y experimentaron soledad como resultado. Sin embargo, los creyentes no necesitan temer la soledad porque Dios promete estar con ellos y no abandonarlos.