1. Derecho a la vida :
Integrantes :
Gestein Gonzales ,Estuardo
Mendoza mata , melany
Tuesta caro ,hans
2. Derecho a la vida
DERECHO A LA VIDA
El derecho a la vida es un derecho universal, es decir que le corresponde a todo ser humano. Es un
derecho necesario para poder concretizar todos los demás derechos universales. El derecho a la
vida significa tener la oportunidad de vivir nuestra propia vida. Si no hay vida, no tiene sentido que
existan los demás derechos fundamentales
Para los niños el derecho a la vida es la oportunidad de vivir su infancia y poder crecer,
desarrollarse y llegar a la edad adulta.El derecho a la vida de los niños está compuesto por dos
derechos fundamentales: el derecho inherente a la vida y el derecho a la supervivencia y al
desarrollo.
El derecho a la vida, un derecho de todo ser humano
El conjunto de normas internacionales existentes hacen referencia a un derecho inherente a la
vida. Esto significa que el derecho a la vida está vinculado al carácter humano y a la dignidad de las
personas. De forma análoga, todo ser humano, sin excepción, merece el respeto incondicional por
el simple hecho de existir y estar vivo. Por lo tanto, desde su nacimiento, todos los niños tienen
derecho a una vida protegida.
El derecho a la vida, el derecho a no ser asesinado.El derecho a la vida significa, por tanto, el
derecho a no ser matado. Constituye la prohibición formal de causar intencionadamente la muerte
a una persona. Para los niños, este derecho implica no sólo que los países no apliquen la pena de
muerte sobre aquellos que cometen delitos, sino que también protejan eficazmente su vida para
luchar y condenar los actos infanticidas.
3. Derecho a la vida
DERECHO DEL NIÑO
El derecho del niño a crecer y desarrollarse en buena salud
El derecho del niño a la vida implica también el hecho de asegurarles la posibilidad de crecer y
desarrollarse en un ambiente favorable. Es indispensable, por tanto, que puedan beneficiarse de
servicios médicos adecuados, de una alimentación equilibrada, de una educación de buena
calidad, así como de un ambiente saludable.
Asegurar que los niños tengan la posibilidad de desarrollarse de una forma sana y natural en
cualquier tipo de situación (paz, guerra, catástrofe natural, etc.) constituye no solo una obligación
de los Estados sino también una responsabilidad de los padres.
Los indicadores del desarrollo infantil
El derecho a la supervivencia y al desarrollo de los niños se mide a partir de dos indicadores: el
Índice de Desarrollo Humano (IDH) y la Tasa de mortalidad infantil y de menores de 5 años
(TMM5).
El IDH fue elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en 1990
para evaluar el nivel de desarrollo humano en todos los países del mundo. Este índice se calcula
basándose en tres parámetros: la esperanza de vida al nacer, la educación (tasa de alfabetización y
número de años de educación obligatoria) y el PIB per cápita. Cada parámetro se expresa con un
valor entre 0 (nivel de vida mínimo) y 1 (nivel de vida máximo).
4. Derecho a la vida
DERECHO A LLEVAR UNA VIDA DIGNA
Nos preocupa que en el país se
violan los derechos humanos de
manera sistemática, como es la
libertad
de
expresión,
de
organización, la estabilidad laboral y
en general a tener una vida digna
señala Nelson Erazo, presidente de
la Unión General de Trabajadores
del Ecuador (UGTE).
Muestra
de
ello
son
las
pretensiones de negar la posibilidad
de que más 75% de trabajadores
puedan incrementar sus salarios
para el 2014, ya que al no existir
acuerdo entre trabajadores y
empresarios, el ministerio del ramo
estaría planteando un incremente
del 8% al salario básico unificado, lo
que afectaría a los ingresos de la mayoría de familias ecuatorianas, dice Erazo.
Para el presidente de la UGTE, “los trabajadores viven en un escenario adverso como consecuencia
de la práctica del gobierno de la revolución ciudadana, que tiene como objetivo afirmar el actual
modelo de producción en donde los trabajadores son afectados en sus derechos laborales; sin
embargo, el movimiento obrero afirma su compromiso de unidad y lucha por la recuperación de
los mismos. Una expresión de ello es la realización del X Congreso Nacional de la UGTE, que se
realizará los días 13 y 14 de diciembre, en el que se tratarán temas de suma importancia para los
trabajadores como el Código del Trabajo, Situación Nacional y las tareas y perspectivas del
movimiento obrero.”
5. Derecho a la vida
Derechos a nacer y permacer con vida :
Las organizaciones no gubernamentales son una respuesta directa de la sociedad civil al
sufrimiento de las personas menos favorecidas, y no conviene olvidar ese impulso primigenio a la
hora de evaluar su función social y sus perspectivas de futuro. Nuestro propósito es apoyar los
esfuerzos de las personas que viven en la pobreza para que consigan su derecho a una vida digna.
La pobreza no es el fruto de un hado maligno o de las fuerzas de la naturaleza, sino la
consecuencia de situaciones de injusticia y de problemas estructurales causados por prácticas y
decisiones humanas, que pueden y deben ser modificadas en atención a los derechos
irrenunciables que todo ser humano posee.
No hay suficiente, pues, con construir un pozo, aportar capacitación agrícola, levantar una escuela,
atender un centro de salud o asistir a los damnificados de un terremoto. Esto debe ir unido a un
trabajo que ofrezca a las personas y a las comunidades los recursos y capacidades necesarios para
que sean ellos mismos lo que afronten su proceso de desarrollo. Pero, cada vez más, hay que
trabajar también para que el campesino pueda vender en los mercados locales e internacionales,
en condiciones justas, esa cosecha de café, azúcar o arroz de la que depende el sustento de su
familia; hay que trabajar para que se condone la deuda externa y esos recursos se inviertan en
educación básica para todos; hay que conseguir que todas las personas del mundo, vivan donde
vivan, tengan acceso a los medicamentos esenciales y que el sistema de patentes no ponga el
beneficio de las farmacéuticas por delante del derecho a la salud y a la vida. Hay que eliminar el
comercio ilegal de diamantes que alimenta económicamente los conflictos armados y hay que
incidir sobre nuestro Gobierno para que la Ayuda Oficial al Desarrollo deje de ser tan escasa y
poco orientada a la erradicación de la pobreza.
En las últimas décadas se ha avanzado mucho en el reconocimiento y exigencia social de los
Derechos Humanos, pero mucho menos en el acceso universal a una serie de derechos sociales y
económicos esenciales: derecho a unos medios de vida sostenibles, a la educación y la salud, a la
protección y asistencia humanitaria, a la participación social y política, a la equidad de género;
unos derechos que no es suficiente con enumerar, sino que hay que crear las condiciones
objetivas para que puedan ser ejercidos.
Toda persona tiene derecho a unos ingresos suficientes para que él o ella y sus familias puedan
vivir con dignidad. Bien está -ésa es la parte esencial de nuestra labor- ofrecer formación o
microcréditos a los más pobres para que puedan aspirar a un trabajo mejor remunerado, abrir su
propio negocio o aumentar el rendimiento de sus pequeñas explotaciones agrarias, pero nuestra
labor no puede limitarse a lo asistencial y aislarse de la realidad social y política en la que se
produce, sino que hay que empeñarse también en cambiar las instituciones (entre ellas, el Banco
Mundial, el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial de Comercio) y las
estructuras que favorecen un reparto injusto de la riqueza que se produce cada día en el mundo.