Los desastres naturales como sismos, tsunamis, inundaciones, huracanes y erupciones volcánicas causan daños a la población, la ecología y la salud. Cuando ocurren, afectan a miles de personas y producen efectos duraderos como pérdida de vidas humanas y daños a la propiedad. El principal problema es que no estamos preparados para enfrentar los desastres antes, durante y después de que ocurren.