El discurso trata sobre la autoestima y cómo se forma a través de la observación personal y los modelos familiares y culturales. Una autoestima positiva protege contra el autoengaño y permite aceptar las propias limitaciones, mientras que una autoestima negativa puede ser perjudicial para la calidad de vida. La humildad y la honestidad actúan junto con la autoestima para permitir aprender de los demás y ser fiel a uno mismo.

1. Discurso sobrela autoestima
Profesor presente estimados compañeros tengan ustedes un buen día. Me es grato
dirigirme a ustedes para compartir con ustedes las siguientes palabras:
Cuando hablamos de autoestima personal, nos estamos refiriendo a la valoración que
hace cada individuo de sí mismo. La calidad de vida personal esa grandemente
influenciada por la forma que cada individuo se valora así mismo.
La valoración que hace uno de sí mismo, puede ser positiva o negativa es decir
beneficiosa o perjudicial para la calidad de vida. La autoestima se forma por intermedio
de la observación que se hace cada individuo de sí mismo.
Tanto los modelos familiares como los culturales conforman nuestra autoestima por eso
es importante para tener conciencia de los modelos negativos que hemos interiorizado
y así poder cambiarlos.
“la autoestima nos protege contra el exceso de autoengaño, de desconfianza en
nosotros mismos, de reproche a nosotros mismos e incluso del tradicional egoísmo”.
Albedrio. “esto significa que no deben renunciar al autocontrol, ni ceder ante hábitos
que le aten, adicciones que les esclavicen ni conducta que le destruya”.
Humildad. “explico que la autoestima y la humildad actúan en conjunto y no permiten
recibir conocimiento e instrucciones y ser receptivos a la enseñanza.
“no me refiero a la humildad de darse golpes en el pecho, ni a la de cilicio y ceniza, sino
a aquella que procede de la fortaleza y la paz interior que nos permite aceptar y vivir
con nuestras “verrugas” sin maquillarnos para esconderlas”.
Honestidad, “ser fiel a uno mismo es la esencia de la honestidad y la piedra angular de
la autoestima”.
Aunque hay quienes están especialmente dotados, la mayoría del trabajo que se lleva a
cabo en el mundo procede de las personas normales que tienen un talento que han
desarrollado.
“a veces quizá pensemos que el trabajo que hacemos no tiene importancia. Quizá
digamos: ‘soy solo esto o aquello’. Cada trabajo que se debe hacer es importante, por
muy insignificante que parezca.