La escasez de agua afecta a más de 1,200 millones de personas y se prevé que empeore. El uso de agua ha crecido a doble ritmo que la población en el último siglo. Gestionar el agua de forma sostenible, reutilizar aguas residuales de forma segura y reducir el impacto ambiental son claves para prevenir la escasez de agua.